El ardor en mis pulmones por falta de aire se comenzaba a hacer presenté en mi interior, pero no me detuve y seguía corriendo colina arriba hasta llegar a la cima. Apoyé mis manos contra mis rodillas, mientras recuperaba el aliento pude divisar la silueta de Tom sentando en una gran manta que estaba extendida en el césped
Ahí estába el, recargado en un gran árbol mientras contemplaba el atardecer, sostenía su guitarra y sus dedos se movían en ella. Mientras me acercaba, reconocía la melodía de una de las tantas canciones que me había enseñando.
Me senté a su lado, recargué mi cabeza en su hombró y contemplé el atardecer, el sonrió al sentirme ahí pero no despejó su vista del hermoso espectáculo que estábamos presenciando. Siguió tocando la guitarra, haciendo que la melodía continuará, no puede evitar sonreír por qué sabía de que canción se trataba.
—Me encanta esa canción—dije, cerrando los ojos por un momento
—Lo sé, es tu favorita—respondió
Yo asentí, un nudo se instaló en mi garganta y comencé a sentir mi pecho pesado, sabía lo que estaba pasando a mi alrededor y me dolía. Abrí mis ojos y miré al chico que estaba junto a mí, el seguía tocando, su sonrisa seguía intacta en su rostro y temía que se esfumara.
—Tom...
Lo llamé, pero el me miro de una manera tranquilizante
—Shh, no te preocupes, cariño—dijo, su tono era suave, como supiera que en ese momento que yo estaba preocupada y él quisiera tranquilizarme —Todo va a estar bien, nosotros vamos a estarlo.
Dejó su guitarra a un lado y me abrazo pude sentir el calor de su cuerpo contra el mío. Mis ojos comenzaron a llenarse de lágrimas, mi pecho seguía sintiéndose pesado, pero poco a poco comenzó a cesar la sensación
—Estarás bien, Tom?—susurre
—Estaremos bien, Maddy—dice Tom
Y justamente ahí, en ese atardecer y en los brazos del chico que amaba encontré la paz y la tranquilidad que necesitaba.
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The Guitar Boy | Tom Kaulitz (Tokio Hotel)
RomanceNo se si fue la intensidad de sus ojos, oh el impacto que causaba su sonrisa en mi. Oh simplemente su esencia me encantó, pero estaba segura que me había enamorado de ese chico Todo había comenzado gracias al sonido de una melodía, desde entonces s...