omegavers Spiderbear+missa

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B) obligame

Sexo omegavers, lactancia.






En todos los años que Spreen lleva viviendo nunca se había sentido tan ansioso de arrebatarle algo tan pequeño e insignificante a otra persona.

Si tal vez no era la mejor forma para lidiar con la cituacion pero desde que llegó aquel Omega de grandes ojos rojizos no puede dejar de pensar en tenerlo apresado entre su cuerpo.

Esta era el momento perfecto para hacerlo y puede justificar que el lo provocó aunque tampoco lo quería forzar solo lo insitaria y si el empieza a forcejear o a llorar lo soltara inmediatamente y no lo molestará más.

—no debió haber dicho eso Roier—

Tras eso en un parpadeo Spreen ya estaba tomando por la muñeca a Roier, el cual ya estaba levantado con la intención de irse, tomo con un poco de fuerza la mandíbula del Omega el cual tenía los ojos en llamas, ambos al hacer contacto visual notaron el hambre mutuo en sus miradas el rojizo del Omega parecían llamas ardientes de pasión ardiente, mientras que los del alfa su mirada violeta ardía al grado de parecer un par de amatistas y en un frío deseo primitivo de poseer al Omega enfrente suyo.

Sin más el Omega se lanzó a los labios del alfa el cual no se resistió y siguió el beso volviéndolo una guerra de dominación, de a poco sus cuerpo se juntaban más al grado de ambos rosarse aún con la ropa puesta, de a poco el beso bajo de nivel a un dulce y suave roce de labios, el Omega se vio arrinconado contra el escritorio, donde fue sentado, mientras abrazaba la cintura del alfa con sus delgadas piernas, inclino su cuerpo contra el del alfa el cual rodeo su cintura con sus brazos tratando de apegarlo más a el, mientras que el Omega aferró sus manos a la camisa del alfa.

Ambos se separaron por falta de aire, para después pasar su boca al cuello del Omega el cual temblaba casa que la boca del alfa pasaba cerca de su glándula de feromonas, eso solo provocó la leve sonrisa en el alfa, el alfa paso sus manos de forma tranquila debajo de la camisa del Omega acariciando levemente su espalda y vientre, levantando ligeramente la camisa del contrario, el cual no protesto, si no que se dejó hacer, al poco tiempo el chico se encontraba sin nada corriendo su torso provocando su timidez al tener expuesto su pecho ligeramente hinchado para mantener la leche materna dentro de el.

—tan lindo Omega—

Fue cuestión de ser llamado por su subgénero, para que Roier recobrará el sentido, dejando de lado la timidez se enderezo lentamente y empezó a quitarle el chaleco de vestir a Spreen sin perder el contacto visual, después de quitarle el chaleco le seguido la camisa siendo arrojados a algún lugar de la habitación, por fin se perdió el contacto visual al Spreen hundirse en el cuello de Spreen, mientras que sus traviesas manos recorrían el ejercitado cuerpo del alfa pasando por todas partes sin pena, mientras que la boca de Roier Hiba por todos lados dejando chupetones y mordiditas leves, cada que ambos crusaban miradas Roier le sonríe con travesura, mientras que el alfa respondí apretando su cadera.

Las manos de Roier fueron directo al pantalón alcanzando a solo quitar el cinturón de Spreen, antes de ser tomado por el cuello con las grandes manos del alfa el cual separado un poco sus cuerpo para acercarse a su pecho donde dejó besos delicados y chupetones demandantes haciendo a Roier una bolita de gemidos con sus manos enterradas en los hombros del alfa, cuando el alfa por fin se acercó al pezón dio un travieso lenguentazo provocando que salga un poco de la leche del Omega, haciéndolo perder el control y que se pegará como sanguijuela a su pezón, empezando de forma delicada a succionar la leche, haciendo que un escalofrío recorría la columna de Roier y que su entrada empezará a lubricarse de una forma desesperante.

—no Spreen, espera—

El alfa a duras penas logro apartarse sintiéndose ensimismado por el delicioso sabor a leche y el fuerte aroma frutal con leche.

—que pasa necesitas que pare?—

—no, solo estoy goteando mucho y es incómodo con la ropa puesta—

El alfa no necesitaba nada más para desaserse de lo faltante de la ropa del Omega y colocarse de nuevo en medio de sus piernas abiertas ahora rosando su miembro todavía enfundado en su ropa, completamente erecto, contra la entrada ya lubricada del Omega, volvió a llevar a su boca al pezón de Omega volviendo a succionar la leche, una vez que dejó de salir leche fue directo al otro repitiendo el procedimiento, solo que en su descuido el Omega logro escabullir su mano dentro del pantalón de alfa siendo notado cuando sintió el calorcito de la mano y como era sacado de un momento a otro por el Omega, hasiendolo rozar con la entrada lubricada, con el poco autocontrol que tenía se alejo del Omega buscando un condón.

—ten—

Dijo el Omega sacando el empaque con el condón de un bolsillo de su pantalón, el alfa lo miro curioso, pero aún así lo tomo y la pregunta no pudo evitar surgir en la laguna de su mente ¿Por que Roier tenía un condón? El simple hecho de pensar que podría ser por otro alfa le provocó un inmenso enojo, coloco correctamente el condón y estoco de una al Omega.

—que me has hecho Roier?—

Soltó en un gruñido, para empezar a estocar de forma rápida y desesperada, bajando la velocidad cada que vía que Omega está cerca del clímax  a llegar sin dejar de torturar la próstata del contrario provocando los lloriqueos de Roier y que apretara su interior al rededor de Spreen al igual que sus piernas.

Ambos se sentía como si estuvieran hechizados en una burbuja de placer donde la razón se había ido, todo se sentía tan bien tan correcto y la sensación, todo esto era tan morboso y pasional que no podía evitar sonreír con calidez sintiendo como algo cálido se alojaba el su ser al ver el hermoso desastre que tenía sobre su escritorio.

Se acercó al Omega hasta su cuello para oler bien su aroma y permitir a ambos llegar al ansiado orgasmo.

—spreen por favor—

—ya casi roi—

Roier sollozo anelando su liberación, mientras que Spreen apretó la mandíbula dando estocadas mucho más rápidas y fuertes que antes, en ese momento se sintió que podria hacer lo que quiera que Roier le pidiera incluso se sería capaz de suicidarse si en ese momento Roier se lo pide.

Al alcanzar su liberación para ambos todo se quedó en blanco solo escuchando su propia respiración y la del contrario, la sensación se sentia tan adictiva tan obsesiva, se sentía perfecta su unión como si esa fuera su primera vez, todo era tan mágico a pesar de ser sexo la union de sus cuerpo, el roce, los gemidos todo fue algo demasiado distinto del sexo y más complejo de entender. Roier abrazo a Spreen por los hombros sintiendo como si ambos se estuvieran fundiendo en uno solo, provocando que Spreen pasará sus brazos por la espalda de Roier abrazándolo de regreso.

—no quiero salir—

—no lo hagas—

—quedate con nosotros y te juro que todos los días del resto de tu vida serán como ahora un sueño—



A) hablemos después cuando ambos estemos concientes.

B) si

Con Tan Pocos Años. (Roirluckity & Sprnrubegetta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora