Capítulo 2

201 37 16
                                    

THE LORD AND THE LADY OF THE BUILDING

DISCLAIMER: Naruto es propiedad de Masashi Kishimoto, pero la historia es de mi autoría.

...

Capítulo 2. La presentación de la lady

⊹。・゚♡゚・。・゚♡゚・。⊹。・゚♡゚・。・゚♡゚・。⊹。・゚

Uno de los pocos placeres que Sasuke había incorporado a su rutina después del trabajo era recostarse en el sillón, con la habitación en completo silencio y una vela aromática llenando el ambiente con su fragancia a rosas.

Su empleo como abogado a veces le robaba mucha de la calma y salud mental que toda persona necesitaba para vivir sin querer tirarse por la ventana, por lo que la hora completa que pasaba cada día luego de cenar, con los ojos cerrados y completamente inerte, era esencial para él.

Para su buena suerte, a pesar de estar localizado cerca del centro de la ciudad, el edificio "Konoha" resultó ser un sitio bastante silencioso, así que gracias a ello, los tres días que llevaba viviendo ahí su sagrado momento en blanco había sido respetado.

Solo que esa noche, cuando terminó de relajarse y estaba por levantarse para irse a dar un baño, fue sorprendido por un pequeño toque en su puerta.

Extrañado, se acercó a ésta y toda la calma que había adquirido gracias a su tiempo de descanso se fue a la basura cuando se asomó por la mirilla y se encontró con su vecina de enfrente esperando pacientemente a que le abriera.

Cómo se le aceleró el pulso de solo verla, el Uchiha necesitó de un momento para inhalar y exhalar, regulando su respiración, antes de finalmente abrir.

—Buenas noches, Uchiha-san — Sakura saludó con una gentil sonrisa apenas él apareció.

—Buenas noches — con mucha suerte, Sasuke consiguió que su voz sonara tan firme y segura como siempre, aunque sus ojos no demostraron el mismo control al vagar sin disimulo por la apariencia de la dama.

La falda larga de seda azul oscuro que se apegaba al seductor contorno de sus caderas y que hacía conjunto con la blusa de finos tirantes en el mismo color, le resaltaba el color de la piel exquisitamente y no le quitaba atención a los rizos sueltos que caían sobre sus hombros.

De pronto, se sintió abrumado por la conciencia de su propio atuendo compuesto por una camisa y pantalón de algodón simples en color negro, aunque luego esa incomodidad se convirtió en curiosidad, ya que, a esa hora de la noche, lo extraño era que esa mujer siguiera usando esa ropa tan fina, así como los altos tacones dorados que enfundaban sus pequeños pies.

—Lamento estarme presentando formalmente a ya varios días de que se mudara, he estado teniendo unos días muy ocupados en el trabajo. Por favor acepte mi disculpa y éste obsequio de bienvenida — obligándose a apartar lejos sus pensamientos, Sasuke se dio cuenta de que la dama sostenía una caja de madera de tamaño mediano entre sus manos.

—No tenía que molestarse, ni tampoco necesita disculparse — le respondió mientras tomaba el presente y se hizo a un lado invitándola a pasar a su hogar. Con un poco de timidez, la dama aceptó y verla dar lentos pasos hasta la sala de estar, para luego aceptar tomar asiento con cuidado de no arrugar su ropa y cruzando delicadamente los tobillos, hizo que se le secara la boca —. ¿Le ofrezco algo de beber?

—Así está bien, le agradezco mucho — él asintió y se sentó en un sillón frente a ella, luego, con la mirada comenzó a inspeccionar la ligera caja de madera que ella le había dado —. Es una colección de té con más de cien sobres, espero la disfrute.

The Lord And The Lady Of The BuildingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora