Worship || VegasPete

22. Games

<< Juegos >>

" I am stronger than your god and older than your devil. I am the darkness between stars, and the roots beneath the earth. I am promise, and potential, and when it comes to playing games, I divine the rules, I set the pieces, and I choose when to play."
-V.E. Schwab, The Invisible Life of Addie LaRue

<< Soy más fuerte que tu dios y más viejo que tu demonio. Soy la oscuridad entre las estrellas y las raíces debajo de la tierra. Soy la promesa y potencial, y cuando se trata de jugar, adivino las reglas, pongo las piezas y elijo cuándo jugar. >>

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El aroma de Pete abrumaba la habitación compacta del departamento que se esparcía en el aire y Vegas no podía evitar inhalar el aroma de su pareja y dejar permanecer aquel olor en su garganta.

Huele tan melancólico y seductor, suave como una delicada flor que florece al amanecer. Era espeso y calmante como un merlot celestial endulzado con frambuesas y desbordaba sus sentidos, bañándolo ola tras ola.

- Pete -. Gruñe su nombre mientras lo besa una vez más, esta vez con entusiasmo y evidentemente de hambre. Agarra sus piernas y las envuelve alrededor de su cintura mientras levanta a Pete, y se dirigen sin rumbo hacia la habitación de este último y un suave jadeo escapa de sus labios cuando lo arrojaron sobre la cama. Vegas quedó encima de él y sin siquiera dejarlo pensar por un segundo, comenzó a dejar un camino de huellas mientras lamía hacia sus labios, la lengua de Vegas haciendo maravillas por dentro, saboreándolo y devorándolo.

- Sabes tan dulce que me está volviendo loco -. Dijo en voz baja mientras chupaba los labios hinchados de Pete creando un suave gemido de este. Y era una canción para sus oídos, una sonrisa formándose en su boca mientras sentía el calor de la corriente eléctrica arder en su pecho haciéndolo acercar a Pete lo más que podía m, rodeando la espalda de Pete con sus brazos y empujándolo más hacia él.

Pecho contra pecho, él en el medio con las piernas abiertas de Pete, y su rostro enterrado en su cuello, chupando y mordiendo su suave piel.

El deseo de tomarlo ahora, devorarlo y reclamarlo nuevamente danzaba alrededor de los oscuros pensamientos de Vegas.

Ansiaba tanto a Pete, oír su voz mientras gemía cada vez más fuerte.

La forma en que gemía suavemente con cada toque, la forma en que inclina su cuello para que Vegas pueda lamer su garganta, besar cada lunar en su piel, sus largas pestañas tocando suavemente su rostro mientras cierra los ojos de placer, la forma en que su espalda se arquea cada vez que los dedos de Vegas lo tocan en cada lugar que le gusta. Su piel suave, sus orejas poniéndose rojas cuando Vegas lo muerde, los rasguños de sus dedos contra la tela de la camisa de Vegas. Extrañaba sentir a Pete tan cerca de él, lo extrañaba con cada parte de su alma, cada fragmento de su ser, cada aire que respira. Y está dispuesto a sacrificarlo todo para quedarse así con él por el resto de su vida.

- Vuelve a mí, Pete -. Susurró, mientras deslizaba su nariz sobre el cuello de Pete, inhalándolo.

- Vamos a casa -. Dijo Vegas, mirando a Pete mientras su compañero abre suavemente los ojos, su suave mirada se encuentra con la suya y casi le deja sin aliento, al ver lo hermoso que se ve Pete debajo de él.

- Mmm  - . Pete logró decir entre medio de jadeos, y respondía en voz baja mientras una lágrima rodaba por sus suaves mejillas con una suave sonrisa que se formaba en sus labios mientras asentía.

Sabía que había mucho que hablar, y que perdonar pero lo que más ansiaba era tenerlo cerca a él y Vegas no iba a permitir alejarse de Pete una vez más.