Babysitters - Young Miko

02

"Jail"

Ver el amanecer era una de las cosas favoritas de Victoria, sobretodo si lo hacía acompañada por una taza de café y sus mascotas.

Su casa era realmente hermosa, muchos colores, pisos de madera, plantitas y un aroma a vainilla que la caracterizaba.

Se encontraba admirando el cielo mientras la taza le calentaba las manos. A través de esa ventana también podía verse la calle, la cuál estaba siendo bastante transitada y unas ganas de esconderse y dejar de mirar hacia afuera comenzaron a hacerse presente.

Y casi como si fuera magia, el auto de la policía pasó y el instinto de la peliblanca le hizo agachar la cabeza e irse a hacer otra cosa.

Hoy tenía trabajo, así que fue a arreglarse, lavó su taza, tomó su bolso con algunas cosas básicas y se subió a su Jeep.

Fue con una velocidad normal, tratando de no llamar demasiado la atención.

Al llegar se sorprendió al no ver el auto de su compañera, ya que los señores McConnel habían decidido que querían que ambas trabajasen juntas.

Realmente Nina no le agradaba demasiado, pero los niños las eligieron a ambas y eso las conmovió lo suficientemente como para aceptarlo.

---Buenos días, ¿Nina no vino hoy? --- Saludó entrando a la casa.

Los padres estaban con sus hijos en la sala, las maletas ya estaban hechas y puestas cer a de la puerta.

Hoy ellos se irían a Europa y desde allí ella y Nina estarían a cargo por todo el verano.

---Hola Vicky, Nina aún no llega pero suponemos que vendrá luego. --- Explicó Lily levantándose del sofá.

---Que extraño ella suele ser más puntual que yo. --- Hizo una mueca y tomó asiento en uno de los sofás de la sala.

---No me preocupa, ella es muy aplicada quizás solo se durmió, a todos nos suele pasar. Lo bueno es que al menos tenemos a una. --- La mujer guiñó el ojo. ---¿Vas a querer té? --- Preguntó levantando la tetera.

---Oh no, gracias. --- Ella sonrió y negó con la mano.

La mujer asintió con la cabeza y volvió a tomar asiento en el sofá junto a su esposo, quien estaba leyendo el periódico.

---Papi, los vamos a extrañar mucho. --- Habló el más pequeño de todos, causando miradas de ternura en todos en la sala.

Los niños se encontraban concentrados desayunando y se conmovieron con las palabras de Charlie.

---Ay cariño, tu madre y yo también lo haremos. Pero siempre vamos a hacer videollamada, es más, si quieres hoy por la noche a penas lleguemos podemos hacer videollamada. --- Propuso el hombre.

La cara del niño se iluminó.

---¡Si! --- Respondió el y la mayor rodó los ojos, no había cosa que odiara más que una videollamada pero haría de todo por su hermanito.

[...]

Los padres se habían ido y Nina aún no llegaba, así que Vicky estaba ansiosa por hacer de las suyas y darles algo de diversión a los chicos.

Ellos estaban en sus mundos: Lavinia viendo desfiles de modas en su tablet en su habitación, Naomi a punto de pintarse el cabello de violeta, Jasper haciendo una maqueta de los planetas para decorar su habitación y Charlie bailando al ritmo de una canción infantil en su cuarto.

---¡Niños! --- Los llamó con un grito desde el piso de abajo. ---¿Quien quiere ir a una tienda de tatuajes?

Naomi fue la primera en reaccionar y con el cabello completamente lleno de tintura fresca baja las escaleras.