-Pesadillas en Alta Mar-

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"Ace no podía hacer nada más que mirar su reflejo distorsionado en el agua salada, y no podía verse. Llevaba días lejos de Luffy, de su hermanito.

Su respiración temblaba, y sus ojos estaban llenos de lágrimas que no caían. Se sentía como si necesitara regresar corriendo a los brazos de Luffy y quedarse al lado de su hermano, pero sabía que no podía. Tenía que dejar su dependencia, tenía que crecer.

Aunque, mirando su reflejo tan distorsionado en su mente, solo veía un monstruo. Ace se acercaba cada vez más a la orilla, hipnotizado por su propia imagen. Cada vez más cerca, estiró su mano hacia el mar. Un ruido comenzó a atacar sus oídos, y su corazón se aceleró.

¿Y si se lanza? ¿Y si solo acaba con este sufrimiento? ¿Y si por fin es libre? ¿Acabar con todo es válido? ¿Puede solo tirarse y dejar que los animales comieran su carne y así tal vez serviría de algo? ¿Acabar? ¿Acabar? ¡Ser-"

Antes de que pudiera caer, un grito lo hizo levantar la vista. Alguien gritaba desde la isla que estaba en frente de él, en la lejanía.

¿Qué mierda? - Ace comenzó a dirigirse hacia esa isla. Cuando llegó, la isla le dio miedo, era silenciosa y eso significaba que lo dejaba solo con su mente.

Ace escuchó el ruido otra vez, caminó y corrió todo lo que pudo. Era una isla desierta, no tendría comida hasta la siguiente isla, así que si encontraba un animal o algo para comer...

Estaba muerto de hambre. A veces ser un D no era lo más beneficioso. Miró el piso un poco y vio una fruta naranja en el suelo. Se pasó la lengua por los labios y la tomó en sus manos, la olió y no tenía olor, así que la abrió la boca y mordió. El sabor era asqueroso, pero se lo tragó igual. Sus ojos lloraban y chilló cuando vio fuego en sus manos.

¿No quema? - Ace puso sus manos en el piso para ir hacia adelante, pero el fuego de sus manos comenzó a prender en fuego el lugar. Ace se asustó, necesitaba salir de aquí. Comenzó a correr con el fuego detrás hacia su barca. Cuando se dio contra el suelo, se dio la vuelta para ver lo que lo había hecho caer.

Era un chico, de cabello azul y máscara. Por el miedo del fuego, Ace tomó al hombre y salió corriendo. Lo lanzó a la barca y se subió él mismo para salir al mar otra vez.

Uff, de lo que nos salvamos, ¿oye, estás bien? - Ace se dio la vuelta para ver al hombre que parecía estar inconsciente. Ace levantó su mano hacia el peliazul y lo sacudió, pero no abrió los ojos. Ace nervioso puso lentamente su mano en el corazón y no había pulso.

Estás muerto... - Ace miró bien el cuerpo, estaba vestido como un noble. Las zonas internas de su ropa estaban arrancadas y llenas de sangre, y había marcas moradas en sus labios, ojos y garganta. Era obvio que era un noble.

¿Cómo te llamabas? - Ace pasó sus manos por el brazo del muerto y encontró una pulsera, blanca con roja, un nombre en ella... Deuce.

Bueno, Ace no podía lanzarlo al mar. Necesitaba compañía, aunque fuera un muerto. No estaba solo en el mar.

Entonces, mientras Ace comenzaba a avanzar en el camino, empezó a hablar como un loco con el cadáver.

Y entonces, Luffy y Sabo se pusieron a mi lado mientras tenía fiebre. ¿Acaso no son los mejores, Deuce?... ¡JAJAJAJA! Sí, yo dije lo mismo que tú, Deuce, ellos eran geniales - Ace miró la pulsera en la mano del muerto y levantó su mano para retirarla del cuerpo.

Eres mi mejor amigo, Deuce. ¿No te molesta que tenga esto para recordarte, amigo? ¿Una pulsera de mejores amigos? ¿Tú y yo para siempre? - Ace se puso la pulsera en la muñeca y habló cada vez más, días y días, hasta que se dio cuenta de que el cadáver tenía moscas, y el hambre hacía que su estómago ardiera.

Estoy tan hambriento, Deuce... - Ace miró el cuerpo de su "amigo", no se suponía que sintiera dolor. - Deuce... déjame tomarte, déjame tenerte en mí... así serás parte de mí para siempre - Ace sacó su cuchilla y, llenándose de sangre putrefacta, comenzó a partir los miembros de Deuce. Ace tomó la carne en sus manos, y las puras ansias por comer lo hicieron prender fuego en sus manos sin entender para cocinar la carne. Abrió su boca y dio un mordisco. Deuce era delicioso. Amaba cómo los huevos de las moscas muertas explotaban dentro de la carne de Deuce.

Era como cuando comió un tigre con Luffy, pero se les había pasado el tiempo para comerlo.

Gracias, Deuce, eres delicioso - Ace levantó la cabeza de Deuce, que no tenía ojo y la boca estaba abierta. Ace sentía cómo su corazón latía con todo. Era tan emocionante. Él también quería ser parte de eso. Él también quería estar muerto.

Oh, Deuce, te amo tanto, mi mejor amigo - Ace abrazó la cabeza. Cuando Ace llegó a la isla, tuvo que lanzar el cuerpo al mar o los aldeanos no lo querrían. Lanzó el cuerpo de Deuce y se encaminó a una cantina.

Hola... soy Ace. Estoy buscando dónde pasar la noche y comprar un bote - Ace miró a una mujer que lo vio todo, herido y lleno de sangre.

Mi amor, ¿qué pasó? Vamos, ven, ven- Ace siguió a la mujer y entraron en su casa. Ella le prestó su baño, le proporcionó ropa y le asignó una habitación. Ace no podía creer su suerte; esa señora era realmente genial. Mañana podría comprar un barco y aspirar a convertirse en un gran pirata para un día encontrarse con Luffy. Cuando Luffy creciera y se hiciera fuerte, Ace podría poner fin a su sufrimiento, y Luffy podría seguir adelante sin él, siendo libre como el viento que surca las olas del mar.

Ace cerró los ojos; el sueño era un respiro de la vida, una muerte temporal.

Bohemio[TERMINADA][Corregido]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora