Capítulo 7: Baile de otoño

2.4K 84 28
                                    

Saber quién era no cambió las cosas entre nosotros. Al contrario; afianzó nuestra relación. Comenzamos a juntarnos seguido después de la escuela. Íbamos a la biblioteca a estudiar. A veces Lisa o Ruby se nos unían. Todos los días caminábamos juntos de vuelta a casa.

Él se había integrado perfectamente a mi grupo de amigas, y generalmente andaba con nosotras. Recibía su buena cuota de burlas e insultos de parte de los bravucones de la escuela por esto. Se lo tomaba bastante bien a pesar de todo; no le importaba realmente lo que pensaran de él.

El otoño se acercaba, lo que significaba que el comité principal del colegio ya había puesto manos a la obra y estaba organizando el baile. Habían carteles colgados por todas partes, en los cuales incitaban a los estudiantes a encontrar pareja. Sólo teníamos una semana para prepararnos. Mis amigas y yo teníamos un convenio entre nosotras desde hacía años: si había al menos una de nosotras que no hubiera recibido invitación de alguien, íbamos todas juntas sin pareja. El año pasado todas estuvimos acompañadas. Un chico un año menor que yo llamado Adam me había invitado. Nunca había hablado con él antes de eso así que fue un poco incómodo. No volvimos a hablar.

Era el tercer período, y teníamos un pequeño receso de unos diez minutos. Mis amigos y yo salimos al campus y nos sentamos en el pasto, al lado de un gran árbol.

- Se los ve muy entusiasmados a todos con el tema del baile. Nunca fui a uno. - Comentó Asa, con el más británico de sus acentos.

- ¿Nunca fuiste a uno? ¿A caso vivías en el polo norte o algo parecido? - Dijo Rosemary, riendo.

- No es la gran cosa, pero tiene todo un protocolo. Puedes ir solo o invitar a alguien como pareja. Te vistes elegante, vas a buscar a tu acompañante a la casa. A veces se alquilan limusinas pero nadie lo hace realmente. Luego se sacan fotos juntos y bailas. Al final de la fiesta se hace una entrega de premios. - Expliqué.

- Es un poco triste ir solo. La mayoría prefiere quedarse en casa a no tener pareja. - Comentó Lisa.

- Aunque también te puedes juntar con otra gente que haya ido sola ahí mismo. - Corregí.

Luego le explicamos acerca del arreglo que teníamos entre nuestro grupo de amigas. Ruby tenía la espalda apoyada contra el tronco del gran roble y se había limitado a jugar con su teléfono esos diez minutos. De vez en cuando comentaba algo intrascendente.

- Nunca hicimos esto en mi escuela en Inglaterra. Suena como demasiado trabajo. - Señaló Asa.

- ¿Estás loco? Es super divertido. - Discrepó Ruby, por primera vez participando realmente de la conversación, con tono ofendido.

Antes de que alguien contestara, Lisa tomó iniciativa y se levantó. Los demás la seguimos y nos dividimos para ir cada uno a su clase correspondiente. Antes de ir a la mía, pasé por mi casillero a recoger los libros de matemática.

- Oye, disculpa, ¿de verdad te gusta Radiohead?

Me sobresalté un poco; no me había fijado que había alguien cerca mío. A mi derecha había un chico bastante más alto que yo, rubio, con ojos casi azules y delgado. Su flequillo, llevado hacia el costado, caía irregularmente sobre su frente. Estaba a un par de casilleros alejado de mí, y él también estaba sacando algunos libros. Me pareció nunca haberlo visto en el colegio.

- ¿Cómo?

Él señaló a mi casillero, levantando las cejas: tenía un poster de ellos pegado en la puerta. Ni siquiera lo recordaba.

- Ah... sí. - contesté titubeante.

- Son geniales. Fui a su concierto hace un año.

- ¿En serio? ¡Yo también estuve! Fue uno de los mejores conciertos de mi vida...

El timbre sonó. Él se volteó para ver la campara, y luego de nuevo hacia mí. Los pasillos se empezaban a desagotar a la velocidad de la luz.

- Bien, chica sin nombre, ha sido un gusto hablar contigo - Dijo, haciendo una pequeña reverencia. - Nos vemos. - Rió.

- Nos vemos. - Le sonreí, cerrando mi casillero.

----------------------------------------------------

Más tarde, las chicas y yo hicimos una videollamada grupal por skype. Éramos sólo nosotras. Estuvimos un rato hablando de cosas estúpidas que encontrábamos en internet, y pasándonos enlaces de ropa bonita. A veces simplemente nos quedábamos en silencio. Cada una estaba tan involucrada en lo que sea que estuvieran haciendo, que no importaba.

- ¿Alguien ya las invitó al baile? - Preguntó Ruby.

- Bueno, yo supongo que iré con Chase, si es que aún somos novios... - Recordó Lisa.

- ¿Todavía no te lo preguntó?

- No, pero creo que es porque no se acuerda. Eso espero.

- Nadie me invitó hasta ahora. - Comentó Rosemary, y yo la seguí. Era extraño que nadie hubiera invitado a Rose; era la única que todos los años conseguía pareja sin falta.

- Aún hay tiempo, no se preocupen. - Dijo Lisa, dándonos ánimo. - ¿Y tú, Ruby?

- Bueno, de hecho sí.

Se escuchó un grito de emoción, pero no estoy segura quién fue la que lo provocó.

- ¿¡Quién!? - Preguntó Lisa, casi histérica.

Tomó aire y dijo con tono alegre:

- Fue Asa.

Cosas del destino (Asa Butterfield fan ficción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora