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Doyeon no tiene la culpa, sigue esperando recibir el amor que ella da a su alfa.

Pero él la ve con normalidad, como si fuera algo común hacerlo, cuando se conocieron no vió amor en sus ojos, solo sorpresa. ¿Cómo no sospechar de Minho?. Si cuando el pelinegro le dirige la mirada, hay ternura en el reflejo de sus pupilas, tanta que quisiera desaparecer de entre los dos.

-Hasta mañana Hyun - ella besa su mejilla rapidamente y se voltea para ingresar a su jardín. Él se queda quieto, mirando sus zapatillas y sus labios tiemblan.

-Doyeon ... yo, tengo que decirte algo - susurra - perdóname si te hago sentir mal.

Ella parece confundida, lo mira extrañada, pero resopla y hace el ademán para que prosiga.

- Intenté dejarme llevar por el lazo que tenemos - la mandibula de Doyeon se tensa - pero no ... siento algo especial hacia a ti, estuve trabajando en ello.

- ¿Estás, seguro?, ¿quieres rendirte conmigo? - le miran con culpabilidad, el pelinegro baja su cabeza y hace una reverencia como muestra de remordimiento - sin mí, puedes morirte, necesitas quedarte conmigo, si yo muero, tú también, estamos vinculados de por vida, en todas las vidas - no lo dijo como manipulación, su tono fue usado tan suave como si eso fuera un recordatorio - inténtalo una vez más Hyunjin, me preocupas tú.

- Me gusta Minho - el alfa dentro suyo se oponía, quería quedarse con ella, su instinto animal no era capaz de enamorarse, solo aceptaba a una persona y se volvía necio a otra.

Pero, Hyunjin si quería hacerlo, quería saber más sobre las aquellas cosquillas que provocaba Minho en su vientre cuando besaba su frente, era su cuerpo el que reaccionaba solo. Era Minho el que le provocaba un ligero temblor con sus abrazos.

- Él no es tu alma gemela Hyunjin, esa soy yo - ella trataba de no llorar, pero a nadie le gustaba ser cambiada por otra persona - tu tigre me quiere a mí. ¡Lo sabemos!, no entiendo porqué arriesgarte, ¡podemos morir si no estamos juntos!

"Tiene razón y sin embargo ..."

¿Qué decirle?, si todo lo dicho no era una mentira.

- Estoy cansado, de mis vidas pasadas, de esta y las siguientes - ella jugaba con sus dedos temblorosos para escucharle - Pensaba que era mi trabajo de medio tiempo, la preparatoria y los proyectos, mis pocas horas de sueño y que a veces no tenía tiempo para comer - admite por fin - es cansado repetir el mismo patrón.

Suspira exhausto, la situación parecía complicada, pero lo dijo.

- Ojalá hubiera sabido que no eras como imaginé a mi destinado.

Hyunjin se lamentó en sus adentros.

- Nunca creí en las almas gemelas - le miran mal - solo en mis sentimientos - Doyeon seca sus lágrimas con un pañuelo de su bolsillo.

- Te daré una oportunidad - el alfa creyó haber sido bastante claro, pero debía ser comprensivo porque ella aún estaba con dolor - no me malinterpretes, me alejaré de tí - este asintió condescendiente - pero, si vienes a mí por que lo de ustedes no funcionó, no te dejaré ir jamás aunque me ruegues, dudo que mi tigre te suelte de nuevo, ahora vete antes de que lo impida.

Hizo caso, ella se encerró para no ir tras de él.

Se alejó, su tigre se molestó, pero iba a ignorarlo, porque por una vez en su vida quería sentir algo por su propia cuenta.

A lo mejor era otro comienzo.

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"CORTEJANDO A UN ALFA" → Hyunho Donde viven las historias. Descúbrelo ahora