—¡Buenos días, Natsuki!
Saludé al profesor Gojo con la mano mientras amarraba mi cabello.
—¡Hoy practicaremos con los de segundo! —declaró emocionado.
—¿De verdad? —pregunté con curiosidad—. Que bien, tiene mucho que no veo a Maki.
Incluso después de todos estos años siempre me había gustado lo entusiasta y extrovertido que era Gojo.
—¡Andando!
Cuando llegamos al patio, ya estaban ahí, Maki, Inumaki y Panda.
—¡Hola, chicos!
—¡Natsuki! —saludó Panda.
—¿Qué tanto estuviste haciendo? —me preguntó divertida Maki—. Te estamos esperando desde hace rato.
Toge me saludó con la mano y le sonreí a modo de respuesta.
—Perdón, ayer llegué de una misión y estaba muy cansada —me excusé—. ¿Y Yuta?
—En el extranjero —respondió Maki—. Veo que trajiste al idiota ese.
—¡Perdón! —preguntó Gojo.
—Tengo entrenamiento con Gojo —expliqué—. Hoy planeo divertirme.
—Ya veremos si me vences pequeña Natsuki —intervino mi maestro—. Empecemos con que dejes libre más de tu energía maldita.
Todos mis amigos me apoyaron y me preparé para enfrentarme a mi profesor.
—No me vayan a atacar por favor —les pedí de broma.
—¡Ya conocemos tu energía maldita! —gritó Panda—. ¡Vamos Natsuki!
Respiré hondo y relajé todo mi cuerpo, rápidamente sentí como se disparaba con fuerza toda la energía maldita que tenía.
—¡Muy bien! ¡Hoy practicaremos tu extensión de dominio! —me dijo.
—¡De acuerdo!
La extensión de dominio era la parte que más había desarrollado en los últimos años, y el último entrenamiento había casi logrado superar el dominio de mi maestro.
Esta vez estaba decidida a superarlo.
—Extensión de dominio —junté mi dedo pulgar con el anular—. Vacío infinito.
Por el rabillo del ojo vi cómo mis amigos desaparecieron en cuanto aparecieron ambos dominios.
Se podía sentir el inmenso poder que tenía mi maestro, era ensordecedor, te consumía y obligaba a aumentar tu propio poder, te presionaba a ser mejor y más fuerte.
—Vamos, Natsuki —me impulsó—. Quiero que esta vez lo logres.
Asentí con firmeza.
Lo único en lo que pensé fue en el apoyo que mi profesor tenía en mi, en los momentos con mis amigos y lo que estaba por venir.
Sólo expande tu dominio, si lo logras una vez el resto será más sencillo.
—Tu mente en blanco —dijo.
Desaparecí todo pensamiento de mi mente, visualicé este mismo ambiente de calma y serenidad y lo proyecté en mi cerebro, transmití todo eso a todo mi cuerpo.
Y cuando abrí los ojos mi dominio había absorbido al de Gojo, me sentía liviana y mi energía maldita recorría todo mi cuerpo, desactivé mi dominio y en cuanto la escuela comenzó a aparecer escuché los gritos de aliento de mis amigos.

ESTÁS LEYENDO
Entre rituales | Megumi Fushiguro
FanfictionEn un mundo donde los hechiceros protegen las vidas de los demás, está siempre esa incertidumbre si lograrás salvar aquello que más amas, pero aquí no es ninguna opción, la única solución es hacerlo. Natsuki sabe la carga que lleva sobre sus hombros...