Entre rituales | Megumi Fushiguro

Capítulo 6

—¡Estás lista! —dijo Nobara—. Te ves muy a la moda.

Nobara había escogido por mí un vestido azul marino, con algunos toques dorados, lo había visto en una tienda y me dijo que me se me vería bien, así que en la mañana fuimos a comprarlo.

—¿Te sientes nerviosa? —preguntó—. ¿Necesitas un discurso motivación al de lo maravillosa que eres?

Me reí.

—Estoy bien, muchas gracias —respondí—. En realidad, me salvaste, no sabía que ponerme.

—Para estamos las amigas —dijo segura—. Si te hace algo lo mato.

—No creo que vaya a pasar algo malo pero cualquier cosa te diré.

—Eso es obvio, te estaré esperando aquí para que me cuentes todo con lujo de detalle...

Alguien tocó la puerta.

Nobara corrió a abrir la puerta y se encontró a Megumi.

—Llegas a tiempo —dijo—. De acuerdo, sumas un punto.

Él lo fulminó con la mirada.

—Hola Megumi —saludé.

Pareció que le faltó el habla.

—Te ves... te ves muy linda —dijo en voz baja.

Lo miré nerviosa y sonreí.

—Tú también te ves muy bien —respondí.

—¿Nos vamos?

Asentí.

—Te veo luego —me despedí

—¡Diviértete!

(...)

Cuando llegamos al parque caminamos un poco, aún se sentía un poco de nervios en el ambiente, pero no era incómodo, los dos queríamos hablar, pero lo sabíamos que decir.

—Entonces... ¿el profesor Gojo y tu son familia? —preguntó.

—No, cuando se manifestó mi técnica ritual, se hicieron muchos análisis para ver si tenía parentesco con el clan Gojo —respondí—. Tanto mi clan como el de Gojo, son totalmente aparte, simplemente yo... nací con esta técnica.

Lo vi suspirar aliviado.

—Me habría preocupado si fueras pariente de su irritante personalidad.

Eso me hizo reír.

—Somos muy diferentes, en muchos aspectos, sus ojos son azules, los míos son rojos —expliqué—. Pero él me ha ayudado mucho a mejorar mi técnica ritual.

—¿Tu clan no te ayudó en eso?

Apreté un poco los puños.

¿Será que...?

—Cuando era niña... y cómo está hechicería solo se daba en el clan Gojo, mi clan me explotó y torturó para que perfeccionara la técnica —le conté—. Desde los cuatro años me obligaron a practicar mi hechicería, como sabes hay muchas ramas a perfeccionar.

Pude notar como Megumi me ponía especial atención, con un semblante impasible, pero con un dejo de preocupación.

—Al cumplir los siete años, me...

No había hablado de mi pasado con nadie, los únicos que sabían todo eso, era Gojo, Shoko, Maki y los demás, y el director de la academia. Habría preferido no contarle nada sobre lo que viví en mi clan, pero pensé que podría contarle poco a poco como fue que la carga que he llevado por años con el tiempo se fue haciendo menos pesada.