Capítulo 17

911 86 6
                                    

—¡Natsuki!

—Hola Nobara —saludé—. Creo que habías...

—Kugisaki, deja a de apoderarte de mi novia.

—¡Fushiguro hay una tienda de motocicletas a la que quiero que vayamos!

Y ambos nos separaron antes de que pudiéramos decir otra cosa.

—Finalmente estás separada de Fushiguro —suspiró—. ¡Iremos de compras!

Me reí.

—Vamos, el otro día vi un par de tacones que me gustaron.

Comenzamos a pasear por todo el centro comercial, Nobara no paraba de probarse ropa costosa, preguntándome con que zapatos debería ponérselo.

Incluso supe que le gustaba la joyería dorada en lugar de la plateada; era fanática de los brazaletes discretos con un toque de pedrería en diamante.

—A ti se te ve mejor la plateada —dijo—. Fushiguro supo escoger ese collar.

—Es precioso —concedí.

—Por cierto, ¿cuándo es tu cumpleaños? —quid saber—. Quiero asegurarme de tener tiempo para comprar un regalo elegante.

Recordaba las fiestas de cumpleaños que Gojo me hacía, siempre había muchos dulces, y Shoko y Nanami eran los que se encargaban básicamente de la organización.

—El trece de octubre —respondí—. Y no hace falta que me compres algo...

—No digas más, ignoraré cualquier frase que tenga que ver con que no te compre algo —me interrumpió—. ¿Fushiguro lo sabe?

—Creo que si se lo dije —traté de recordar—. Con que estén ustedes me basta.

Cómo vi que estábamos por acabar las compras, le mandé mensaje a Gojo.

Acabamos como en media hora.

¡Si! Les mandaré a Ijichi.

—Vayamos con los chicos —declaró mi amiga.

(...)

—¿Qué compraste? —me preguntó Megumi.

—Algunas faldas —respondí—. Y unos pares de zapatos.

Detrás de nosotros Nobara y Yuji estaban susurrando.

—¿Y ahora que les pasa a ustedes dos? —preguntó en ese típico tono irritado.

—Fushiguro, ¿sabías que el cumpleaños de Natsuki es dentro de un mes? —dijo Yuji.

—¿Cómo no voy a saber eso? —dijo extrañado—. Ya lo sabía.

—¡Vamos a hacer una fiesta sorpresa! —gritó Yuji.

—¡Idiota! —lo regañó Nobara—. ¡Acabas de decir la palabra clave!

No pude evitar reírme.

—¡Ahora ya no será sorpresa, Itadori!

—¡Perdón! ¡Olvida lo que dije Natsuki!

—¡Cómo le puedes decir eso! —volvió a gritar Nobara.

—Idiotas —murmuró Megumi.

—Déjalos, se divierten —le dije—. Quisiera que no gastaran, pero si lo quieren hacer... los dejaré.

En ese momento llegó Ijichi para recogernos.

—¿A dónde vamos? —preguntó Megumi.

—Gojo dijo que nos llevaría a la playa —respondí.

Entre rituales | Megumi FushiguroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora