Capítulo 29

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20 de mayo 2020

—¡LIVVIEEEEE! —grita Pablo con sus casi cinco años.

—¡En mi habitación! —le contesta ella desde su escritorio donde está haciendo unos deberes.

—¡Mila, milah! —Pablo entra corriendo y se sube a las piernas de su hermana.

Le está enseñando el primer diente de leche que se le ha caído.

—¡Madre mía! —exclama su hermana con la voz que se utiliza con los niños pequeños—. ¿De quién es eso?

—Es mío, tonta. ¿De quién si no?

—¿Acabas de llamarme tonta, pascal?

Pablo niega repetidas veces, con miedo de haber cabreado a su hermana.

—¿Se lo has dicho a los papás? —pregunta Olivia.

—Sih. Papi dice que está noche va a venir un amigo de Papá Noel. Un ratoncito mu mono que se va a llevar el diente y me va a dejar dinelo —contesta triste.

—¿Y eso tiene algo de malo?

—Según papi, si no eshtoy dolmido no vene. ¡Pelo yo quielo verlo!

A Olivia siempre le ha gustado la inocencia de su hermano. Sin acordarse de que antes de que él naciera, ella era igual.

—Si en Navidad hay que elegir entre regalos o ver a Papá Noel, ¿qué prefieres?

—¡Regaloooossss! Muchos juguetes y nada ropa. ¡Tengo que hace mi calta!

—¿Ya? ¡Pero si estamos en mayo!

—¡El Polo Norte está muy lejos! Hay que coger una nave espacial y todo.

—Bueno, eso da igual. Lo que pasa es que al igual que en Navidad, hoy también tienes que elegir.

—¡Jopeeeee!

25 de marzo 2022

Están todos sentados en su mesa del comedor comiendo la lasaña que con tanto cariño Isabel ha preparado.

—¿Puedo ir está noche a una fiesta? —pregunta muy rápido Olivia.

—Habíamos dicho de ver la película de la semana como siempre Liv —le contesta su madre.

—Ya lo sé —contesta.

En realidad, no le hace mucha ilusión la fiesta. Si va, es porque el chico que le gusta va también y otra amiga, Paula.

María ya le ha dicho que ella no va, más que nada porque encuentra a esta chica un poco manipuladora. Desgraciadamente, Olivia todavía no se ha dado cuenta. Lo que había llevado a alguna que otra pelea entre ellas.

—Estamos en las fiestas de primavera y va a ir todo el mundo —les suplica—. Por favor, dejarme ir. Prometo que haremos el día de cine mañana, incluso ayudaré en todo lo que queráis.

Olivia nunca había antepuesto a su familia sobre nada. No era como otras adolescentes, a ella le encantaba pasar tiempo con su familia.

Pero está amiga, Paula, le dijo que si no venía, nunca estaría con el chico que le gustaba y se convertiría en una marginada. Puede que María tenga razón después de todo.

Sus padres se comunican como siempre hacen por miradas. Sobran las palabras entre ellos, solo con eso, son capaces de entenderse.

—Podríamos pensarlo —dice finalmente Mateo

—¿En serio?

—En serio —le contesta su madre—. Mañana habrá sesión de cine y no nos sirven excusas —la señala con el tenedor.

Un añoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora