-Tuve un sueño raro. -Hablé para romper el incómodo silencio que se formó al sentarnos a desayunar algo.
Cellbit ha estado muy callado y eso comenzaba a preocuparme ya que suele molestar haciéndome preguntas privadas, hablando de sus días pasados como perro vagabundo, o solo alegar que le gusto si es que me le quedo mirando.
-¿Ah sí? ¿Qué soñaste?
-Que durante nuestra salida en la discoteca, veía a un viejo amigo y tú peleabas con él con tal de protegerme porque habíamos peleado.
-Eso suena a algo que yo haría.
-Se sentía tan real. Al final me sacaste de ahí, y luego yo...-Mis mejillas comenzaron a teñirse de rojo al recordarlo, por poco decía que en mi "sueño" aprovechaba que lo tenía abrazado para besarle el cuello. Claro que no le daría el gusto a ese perro travieso contándole sobre eso.
-¿Tú...qué?
-Vomité sobre ti. -Mentí.
Él estalló en carcajadas y se burló de mi rostro totalmente ruborizado. Pero yo me quedé pensando en lo real que se sentía aquél sueño. Porque mi subconsciente de ninguna manera se imaginaría a un Spreen tan cambiado, y porque realmente sí salimos anoche de fiesta con los chicos. ¿Pero por qué se conocían él y Forever?
Estas preguntas seguían rondando en mi mente y Cellbit no parecía mencionar nada de lo que sucedió allá. Bueno o malo, habría algo que comentar, ¿no?-Cellbit, ¿has estado borracho antes?
-Hm, no. Al menos en la discoteca ayer siento que no bebí tanto.
-Entonces tienes la memoria más fresca. ¿Pasó algo anoche que me haya perdido?
-No que yo sepa. Hm...-Comenzó a rascar su nuca, eso para mí era seña de nerviosismo.- Yo por un largo rato estuve en el baño y tardé porque un desquiciado no me dejaba salir. Insistía en que me parecía a su ligue y quería pasarse de listo. Hasta que no fue la persona indicada, me dejó ir. Ni nos parecíamos, así que supongo estaba muy borracho el tipo.
-Oh...
-Roier, ¿no recuerdas nada?
-No, lo último que tengo claro es que estuve bailando con Forever y contigo, varias personas me hablaron. Regresamos a la mesa y luego nada.
-Ya veo.
-Así que, supongo sí me emborraché anoche.
-Creo que no tienes mucha tolerancia al alcohol.
-Quiero aprender a tomar. ¿Me ayudarías?
-Roier, estás loco si piensas que beberé contigo.
-Ok, yo soy el loco por aceptar.
Solté una risita y lo obligué a hacer un brindis conmigo. En esta ocasión solo busqué algunas bebidas que tuvieran vodka. Solo poquitas, unas 25 botellitas de Skyy Blue*.
Las primeras dos las tomé despacio para acostumbrarme a su sabor, había decidido por la variante de cítricos. Cellbit en cambio escogió las de manzana verde.
Nos encontrábamos sentados en el suelo de lo que era la sala y con música alternativa de fondo. No pasaban de las 9 pm y si llegaba a pegarnos el alcohol, todavía teníamos la tarde del lunes para recuperarnos y trabajar sin problema. Estaba todo bien calculado.-Roier, mencionaste en el trabajo que tuviste una pareja. ¿Cómo fue?
Cellbit intentó no parecer curioso esta vez, pero esa era una pregunta muy directa y no se la quería responder. Y lamentablemente no tenía más de qué hablar para evitar ese tema, así que solté un suspiro y decidí responderle al fin.
-Empezó cuando tenía 16 años. Éramos algo como mejores amigos porque lo conocía hace bastante tiempo y no pude evitar enamorarme de él. Fue mi primero en todo... -Di un largo trago a mi cuarta botella y abrí otra.
"Él no se veía interesado en mí, lo creí imposible por muchísimo tiempo. Pero un día, un San Valentín para ser exactos, una compañera de salón se me confesó y él apareció diciéndole que era fea y se buscara a alguien más porque yo le pertenecía. Hasta ese momento pensé que eran celos porque si tuviera una novia, ya no pasaría tiempo con él. Después, una tarde que hacíamos tarea en su habitación me robó mi primer beso. Fue entonces que se confesó diciendo que sentía cosas extrañas por mí y que si yo deseaba, podíamos ser algo más.
Claro que dije que sí.
Cuando cumplimos los 18 años, teníamos casi dos años de relación a escondidas y decidimos revelarlo a nuestras familias. Ambas ya estaban acostumbradas a nuestra amistad, pero un noviazgo lo vieron como lo más impuro del mundo. Que no tendríamos la bendición de ellos ni de Dios. Así que no lo pensamos dos veces y nos fugamos.
Primero vivimos un tiempo en casa de un amigo en común en lo que buscábamos trabajo y nos hacíamos de una vivienda, así fue como llegué aquí. Y por casi 2 años más estuvimos bien. No hablábamos con nuestras familias porque seguían sin aprobarlo, pero no nos importaba.
O eso creí yo.
Debo mencionar que él venía de una posición económica muy buena, nada le faltó nunca y su familia era de respetarse.
Él recibió una llamada de ellos un día, y me lo comentó. Le habían propuesto volver pues su padre se iba a jubilar y ya estaban en trámites de testamento/herencia y esas cosas. Él como único hijo debía responder casándose con una prometida que le habían conseguido. Dijo que no me preocupara por ello.
Pero luego...él solo desapareció. Sus cosas ya no estaban en la casa, solo dejó unos cambios de ropa. Eso me dio una ligera esperanza de que volvería, que los iba a encarar y decirles que era feliz conmigo. Pero pasaron los meses y no regresó. Los amigos en común tampoco lograban dar con él. Y a los 10 meses de esperarlo acepté que no iba a volver."
![](https://img.wattpad.com/cover/351697407-288-k966425.jpg)
ESTÁS LEYENDO
¡¿Y MI MASCOTA?! | Guapodúo/Cellboier
FanficHistoria creada una noche con insomnio. ¡Espero que les guste!:D ❣️Cellbit x Roier (AU/Hybrid) ❣️Alert! +18 ❣️La imagen no me pertenece. Créditos en la misma.