Capítulo 18

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“1er Paso: Estar libre el dichoso día del plan”

–¡Listo, porque no tengo nada mejor que hacer!

“2do Paso: Conseguir un outfit chingón”

–Por supuesto que llevaré mi poderosísimo jersey del "Hombre Maraña". –Sonreí orgulloso de mi propia idea.

“3er Paso: Convencer al objetivo de que me acompañe a la trampa”

–¡Cellbit! ¿Me acompañas mañana a surtir unas cosas por la noche?

–Claro. –Respondió él mientras agitaba con una cucharilla el café que se estaba preparando esa tarde.– ¿Pero en la noche?

–Es el mejor tiempo para "ofertas y regalos".

–De acuerdo...

Por más que intentaba no sonar sospechoso, no podía evitar sonreír de manera extraña por cada paso que iba completando. Era una mezcla entre risa y satisfacción de que todo estuviera resultando tan fácil. Me di una cachetada mental, debía enfocarme solamente en mi plan y no perder más tiempo.
Esa noche debíamos completar el medio turno, así que por la madrugada ya estaríamos saliendo y regresaríamos en poco tiempo a casa. Forever hizo su intento de convencernos para ir de after a unas fiestas que tenía programadas esa misma noche, me sorprendió bastante que el muchacho tuviera tanta energía para irse de fiesta en una madrugada y después del trabajo. Le dimos un No por respuesta y él hizo un puchero.
Como yo ya estaba convencido de que con Spreen no sucedería nada más, me acerqué sutilmente a Forever mientras los demás estaban concentrados trabajando en sus áreas.

–Oye, Forever. ¿Puedo hacerte una pregunta?

–Dime, cariño.

–Ese día de la discoteca, me reencontré con un viejo amigo y al parecer es amigo en común contigo. ¿Lo conoces desde hace tiempo?

–¿A quién, a Spreen? –Asentí varias veces.– Realmente no tengo mucho tiempo de conocerlo, creo que apenas será un año. Fue muy complicado aprender a llevarme con él, era el hijo de mi ex jefe (yo trabajaba en una oficina). Me lo topé muchas veces en la oficina y siempre iba con un mal genio. Su interacción con los chicos era limitada, con las mujeres muy forzada. Supuse que era gay y que sus padres lo veían mal por su orientación sexual. Un día me atreví a invitarlo a una fiesta ese mismo día y él aceptó, para entonces estar casi toda la noche contándome de sus problemas. Que tuvo una pareja pero sus padres lo arruinaron teniendo que abandonarlo, pobre chico. Decía que era urgente para ellos que se buscara una novia pero que ninguna le gustaba y pidió mi ayuda para dejar de verlas "tan feas". Con pesar, le comenté de una persona que podía venderle sustancias y hacer de todo más sencillo. Me sorprendió que accediera con tal de calmar las aguas en su casa. Así fue que se hizo algo promiscuo por muchos meses y me preocupé por él, pero si le decía alguna palabra al respecto él solo se molestaba y contestaba que no era de mi incumbencia.

Conforme Forever me seguía contando a detalle, los escenarios hicieron click con la versión que Cellbit me dijo tiempo atrás. Eso lograba explicar por qué su cambio de actitud en casa cuando Cellbit seguía viviendo ahí, por qué era que llevaba a muchas personas. Quizá la sustancia era demasiado fuerte como para hacerle recordar que estaba siendo "infiel" a sus recuerdos, pero a la vez tan adictiva que iba por ello casi siempre. Quizá la usaba porque era lo único para callar a sus padres.

Cuando a Spreen le dejaron de vender la droga, cayó en la locura y comenzó a insultar a todo mundo, hasta a ese ex novio suyo que tanto adoraba. Y dejó de asistir a fiestas y discotecas por unos meses más. Fue hace poco que volvimos a reencontrarnos y se veía como una persona diferente. Me contó que había sido directo con sus padres negándoles querer seguir con el tema de la herencia y trabajo, que decidió irse a vivir solo y estaba frecuentando a un chico que le agradaba. Y me alegré por ello tanto que lo invité a la discoteca esa vez, y que si le parecía buena idea, llevara a su ligue también.

–Oh...

Esa parte de la historia Spreen me la omitió cuando discutíamos en mi hogar. Desvió tanta su atención con el tema del perro que a lo mejor lo había olvidado. O lo ocultó a propósito.
No me molestaba realmente, si yo quise seguir adelante muchas veces me hubiera emocionado porque Spreen finalmente lo hiciera por su bien y no por el de sus padres.
Entonces no comprendía por qué ahora le estaba mintiendo a su ligue si pretendía hacer que regresáramos.
"Pobre chico" Resonaron las palabras en mi mente.

–¿Crees que vuelvan a ir a nuestra siguiente fiesta?

–Si quieres lo invito. Sería bueno para ambos que se pongan al día y retomen su amistad, ¿no?

–Sí...la amistad.

Pd: Ya llegué yo a querer defender el lado de la toxicidad, con permisoOoOo 🙇

¡¿Y MI MASCOTA?! | Guapodúo/CellboierDonde viven las historias. Descúbrelo ahora