Capitulo 27

3.7K 411 62
                                    

Debí suponer que estabas aquí.

–¿Qué diablos estás haciendo Spreen? ¿Qué pediste por teléfono? –Traté de no sonar asustado, era muy mala situación estar los dos solos en los baños.

Solo algo que necesito. Después del espectáculo que hiciste en la pista de baile, creí que sería necesario.

–No es droga, ¿verdad?

–Qué iluso eres Roier. –Comenzó a caminar hacia mí y yo tragué saliva, me sentía atrapado y que no tendría fácil escapatoria.– Verás, te pedí volver de buena manera. Tengo una mejor casa, tengo un trabajo estable y dinero, no te iba a faltar nada más. Pero me bateaste y ya veo el por qué. ¿De verdad tiraste todo nuestro tiempo a la basura?

Tú fuiste el primero. –Spreen frunció el ceño en respuesta.– No dijiste nada, solo te largaste con tus "papis" como siempre y fuiste un cobarde.

Lo planeé todo para robarles y así vivir juntos sin más preocupaciones. –Estaba tan cerca que pudo acariciar mi mejilla, eso me enojó aún más.

–¿Y las drogas y los acostones también lo planeaste?

–¿C-Cómo sabes...? –Él se alejó un par de pasos.

Eso qué importa. Me enoja más el hecho de que volviste a mentir ese día en mi casa, diciendo que me amabas y que no había nadie más...

–¡Y no lo hay! Solo fueron acostones como tú dijiste.

–Estás enfermo. No quieras excusarte por tus adicciones, de alguna manera fuiste consciente de lo que hacías y te importó poco. Pensaste que no me daría cuenta, que yo seguiría esperando por ti pero no. Yo tengo a alguien más y es mucho mejor persona que tú.

–¡Eres un..! –Spreen estaba listo para soltarme un puñetazo, sin embargo alguien más lo detuvo a tiempo.

Será mejor que te vayas, Spreen. O te daré una paliza a cambio. –Cellbit se mostró imponente, las orejas en su cabeza comenzaban a aparecer y sus colmillos cambiaron de forma.

Cellbit...cálmate. –Traté de alejarlo un poco y que se concentrara en su apariencia.

¡Estás con un monstruo! –Spreen la cagó hablando en voz alta sin importarle si la gente afuera escuchara. Sabía que con él todo esto se saldría de control.

¡Cállate! Él no es un monstruo

–Roier, eso no es normal. ¡Míralo, es una bestia! –Siguió señalando al castaño, quien hacía un inmenso esfuerzo para no gruñirle o ladrar.

¡Te dije que te callaras! –Perdí la paciencia y le pegué con mi puño en la mejilla, obligándolo a alejarse de nosotros. Él me miró sumamente enojado y eso no me debilitó, en cambio sentía mi enojo aumentar.– Que sea la última que vez que te refieres así. Así que lárgate ahora maldito drogadicto, o te parto tu madre.

Spreen se pasó la mano por su boca limpiando el rastro de sangre que comenzaba a aparecer, le había partido el labio también. No dejaba de mirar a Cellbit atento a cualquier otro cambio físico que no pudiera controlar. Pero me puse entre ellos dos cubriéndolo con mi cuerpo y amenacé con tirarle otro golpe, solo así él decidió mejor salir del baño. Claro que no lo dejaría ir tan fácil, no sabía si iría de soplón a contarle a más gente sobre lo que vio. Pero mi prioridad era que Cellbit se calmara, su transformación podía arruinar su vestimenta y alterar a todo el mundo afuera. Así que tomé su rostro con mis manos y lo obligué a mirarme. Comenzaba a notarse asustado.

Cellbit, calma...Estás conmigo, fuiste un completo héroe. –Le sonreí.

Casi lo arruino...No quería perder el control pero, pudo haberte golpeado y yo estaría afuera sin saber qué pasaba. Mi olfato me alertó de que algo andaba mal.

–Y te lo agradezco bastante, no sé qué hubiera pasado. Traté de encararlo y hacerle entender que todo había acabado. Te daré los detalles luego, hay que controlarnos y salir de aquí. –Cellbit me sujetó de la mano pero me obligó a permanecer a su lado, lo miré confundido. Fue entonces que se acercó a mi rostro y me besó una vez más. De no haber sido casi pillados, esta situación se volvería más excitante, pero me preocupaba lo que el idiota de Spreen hiciera.– Tenemos que irnos.

Está bien pero, ¿podemos continuar en casa?

Cuando salimos de los sanitarios todo estaba en orden, o eso quería decir porque fue casi lo contrario. Spreen estaba como loco tratando de convencer a los invitados de la fiesta que me había visto con un monstruo con orejas. Claro que yo me había preparado para esto, en el camino le quité las orejas cafés a un tipo con disfraz y se las coloqué a Cellbit para disimular. Nos hicimos los ofendidos y acusamos a Spreen de volver a consumir drogas, que estaba muy paranoico imaginándose cosas por el vicio. Forever me creyó de inmediato pues ya lo había visto así una vez, así que amablemente le pidió a los guardias que lo sacaran para no seguir perturbando en el lugar.
En ese momento que fue echado, una de las personas de su grupito se fue apresurado con él, supuse era el "ligue" que mencionó Forever días atrás.
Pobre chico, pensé. No sabía que estaba intentando salir con un loco manipulador y obsesionado con su ex pareja y amigo.

Al final la fiesta continuó sin interrupciones y Cellbit fue feliz de pegarle a la piñata con forma de calabaza, logrando romperla y que de ella salieran dulces preparados con alcohol. Yo traté de tomar gran cantidad sin parecer avorazado.



Pd: Guapitos/Gatinhos, esta historia ya está por acabar así que disfruten lo que queda 👉👈

¡¿Y MI MASCOTA?! | Guapodúo/CellboierDonde viven las historias. Descúbrelo ahora