13. Ours will be eternal

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13. Ours will be eternal

Yo, Kim... Nunca en la vida había caído tan bajo, o más bien, nunca en todos mis años existiendo. Me desplomé en el sofá del estudio mientras pensaba como diablos abrir el libro para Porchay, todos necesitamos conocer el verdadero poder que guardaba esa criaturita... y nadie de los que estaba aquí había lidiado alguna vez con un mitad ángel, lo que resultaba desfavorecedor.

Ya no tenía solución, el que amara a Porchay era algo que no podía deshacer aunque quisiera y ese el problema, no quiero hacerlo. Incluso si alguien me dijera que había una solución, que podíamos deshacer el lazo que él y yo teníamos, no querría hacerlo, estar cerca de él se sentía bien, incluso cuando Jael decía todo lo contrario, tocar y besar a Porchay se sentía como... un intenso poder creciendo entre nosotros.

Como si con cada día que pasara cerca de él, ese lazo intensificara más las cosas que comenzaba a sentir... era, incluso para mí, algo abrumador.

– ¿Un millón de almas por adivinar en qué estás pensando? – preguntó Jael entrando al estudio

Puse los ojos en blanco – ¿En qué?

– Porchay – dijo simplemente

– Un millón de almas son tuyas desde ahora – repliqué tirando mi cabeza hacia atrás sobre el espaldar del sofá

Jael soltó una risa – Cuidado, Kim... sabes perfectamente que pasaría si un humano llega a enamorarte –

Exhalé sonriendo vagamente, creo que ya era muy tarde para preocuparme por eso.

– Mierda... – Jael se sentó a mi lado – ¿Te enamoraste del ángel? Porque una cosa es que te sientas atraído hacia él por el lazo, otra muy diferente es el amor.

– ¿Crees que no lo sé? – gruñí –

– Entonces, estás perdido... que un humano, incluso un mitad ángel, tenga nuestro corazón... sabes que es el talón de Aquiles de un demonio, Kim –

Lo miré – ¿Estás reprochándome algo? Se bien que mantienes entre las piernas del otro humano – repliqué – Y no lo niegues, puedo oler tu aroma en él.

Jael relajó los hombros – Bueno, sí. Pero es sexo, Kim, no amor –

– Jael, nunca te follas a un humano más de una vez – le recordé – ¿Por qué él sería diferente? Es igual a todos los demás.

Jael miró hacia el buco de libros – No hay nada especial en él, solo me gusta –

Sonreí y me coloqué de pie.

– Por supuesto que te gusta. Porchay es un mitad ángel, no un humano común, el problema tuyo es que Macao si lo es, y cuando muera...

Jael me miró, vi que algo estaba creciendo en su interior.

– Tu no vas a llevarte su alma, Kim

– ¿No? Te recuerdo que lo reviví y ese es el precio, ¿o vas a pagarlo tu? – pregunté acercándome a él

Me miró desde el asiento – ¿Qué quieres?

Jael, que patético... ese humano no vale la pena, ese humano es débil, es molesto... y pensándolo bien, si me lo quedo, lo alejaré de Porchay, es harto de que su aroma este encima de mi ángel todo el tiempo. Es casi nauseabundo.

– Pensándolo bien... creo que no haré tratos contigo sobre su alma, es mía – alcé las cejas y me giré

No vi el momento en que me tomó por la nuca y me estampó contra la pared, solté una risa... esto sería tan divertido.

A CANDLE TO THE DEVIL - KIMCHAYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora