VIGÉSIMA NOTA

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Me gustas. Akutagawa esto es...

El pelinegro seguía procesando cuidadosamente las palabras del albino, quien ni siquiera lo volteó a verlo dejando que su mirada apagada todavía recorra el horizonte.

-Ehh, eso... Eso quiere decir como amistad, ¿sí?- preguntó un poco nervioso, viendo el rostro del chico para asegurarse de que no fuera una broma.

-Quiero decir en sentido romántico.- confesó cubriendo su boca con su mano de forma apenada.

En la mente de Akutagawa llegó un nuevo amanecer. Los dinosaurios presenciaron cómo la palabra amor se levantaba de forma impotente a la vez que dos volcanes hacían erupción.

Me gustas, Akutagawa.

-¿Akutagawa?

Se había quedado completamente quieto.

Cuando Akutagawa está aparentemente tranquilo como la superficie ondulante de un lago o el verano en una montaña, de hecho, muy profundo dentro de él está siendo muy ruidoso.

En su mente varias personalidades se habían reunido en una especie de sala de conferencia. ¿La razón? Despedir el lado puro de Akutagawa.

Sí, sorprendentemente tenía uno.

-¡Esto es malo! ¡Oye!

-¡Es en serio! ¡En serio!

-¡Ahora!- gritó su lado ansioso.

-Estoy intentando graduarme de algo sin permiso.- chilló su lado puro.

-¡No entres en pánico!- su lado cuidadoso tomó de la camisa al puro.- ¡Voy a decir lo que sea sin permiso!

-Así es. Todos siéntense.- habló el lado egoísta.- Quiero hablar contigo sobre eso.

Todos guardaron silencio cuando el lado sereno tosió ligeramente, ganando la atención de todos y evitando más peleas entre las personalidades.

-Señores, antes que nada, miren esto. Son recuerdos de éste año.- comenzó con su presentación

En el video se mostraba a Chuuya y Dazai hablando en uno de los descansos de la práctica, cuando todavía eran solo tres miembros hace seis meses.

-Una vez entré a una banda donde el baterista fue expulsado.- comentó Dazai.

-¡Eh! ¿Por qué?

-Al parecer salía con la vocalista.

-Ah, ya veo. ¿Los otros miembros no sabían que salían en secreto?

-Sí.

-Está bien. Los romances dentro de la banda están prohibidos. Es ley de hierro en cualquier lugar.

-Eso es correcto. Los romances en las bandas no funcionan bien.

-Aún así, a pesar de que el baterista estuvo en la banda desde un principio. Fue una lástima.

-No. ¿Es en serio?- se escuchó la voz de Akutagawa.- Incluso pensar en quedarse en la banda es molesto. Piénsenlo, es demasiado. Es molesto traer una discusión estúpida al estudio. Una disputa entre pareja es un dolor de cabeza y marchita la música. ¡Definitivamente me opondría!

Con eso el video finalizó y las personalidades se quedaron en completo silencio. Incluso el cartel de despedida se había despegado y caído al suelo.

Akutagawa solo pudo regresar a la realidad gracias a que Atsushi comenzó a llamarlo nuevamente.

-Akutagawa, ¿estás vivo?

¡MIERDA!

...

Y así es como ambos chicos llegaron a casa de Chuuya. Atsushi estaba tranquilo mientras que Akutagawa era un manojo de nervios.

El pelinaranja estaba sentado frente a ambos jóvenes, siendo Akutagawa quien hizo toda la plática y le explicó sobre lo que acababa de suceder.

-Absolutamente no.- dijo Chuuya con una cara que decía claramente "¿que pendejada acaban de hacer?"- Espera, lo que quiero decir... ¿Ustedes están saliendo? Aún no están saliendo, ¿verdad?

-Todavía no. Solo me acabo de confesar.- respondió Atsushi de lo más casual avergonzando todavía más a Akutagawa.

-¿Y Dazai lo sabe?

-Probablemente lo sabe.

-Me dí cuenta antes del concierto.

"Ese bastardo. Fue más incómodo de lo que imaginé. Su apuesta realmente fue más peligrosa." pensó con molestía.

-Akutagawa, tu estabas hablando de cosas como "el amor en la banda está muerto".

El mencionado sintió que esas palabras se le clavaron en el corazón.

-Por favor perdóneme. Daré lo mejor.- comentó en un hilo de voz.

-¡¿Hablas en serio?!

Atsushi vió sorprendido a Akutagawa, quien se levantó de su asiento e hizo una reverencia para declarar que estaba siendo sincero.

-Por favor perdóneme. ¡De verdad lo siento! Probablemente... Creo que le molesta en lo absoluto.

Chuuya vió al chico y se golpeó la frente al intentar llegar a una decisión.

Atsushi se levantó igualmente de su asiento preocupado hasta que escucharon hablar nuevamente al pelinaranja.

-¡De acuerdo chicos! De todas formas, éstas cosas son un asunto popular en las bandas. Buena suerte. Tengan cuidado.

Akutagawa se paró de forma recta.

-Si no hacen lo suficiente, los arrojaré para que duerman con los peces. ¿Entendido?

Los chicos no dijeron nada, solo se acercaron a Chuuya por ambos lados antes de envolverlo en un abrazo.

-¡Ya entendí! ¡Déjenme! Ustedes dirán en twitter que van a salir.

-¡Sí!

-¡Pero ya déjenme!

...

Y así como fueron con Chuuya era hora de ir con Dazai.

Éste sólo les había abierto la puerta y le explicaron ahí mismo sobre el asunto.

-Oh... ¿Felicidades?

-¿Solo eso, Dazai-san?

-No me quejo de ganar una apuesta.- sonrió de forma ladina.- Chibi dijo que estaba bien, ¿verdad? Yo lo sabía y los hice caminar por la cuerda floja en el show. Fue un poco problemático, pero se las arreglaron de todos modos.

Rió un poco al ver la cara roja de ambos.

-Los discos compactos de los que hablamos te los voy a dar ahora. Esperen aquí.- cerró la puerta dejando a los dos afuera.

-Una cosa. Dazai-san siempre está quejándose de no tener dinero, intenta matarse todo el tiempo, y es flojo en ciertos aspectos. Pero su casa es bastante y elegante, ¿no?- comentó Atsushi.

-Dazai-san es dueño de una casa.- respondió de forma simple Akutagawa.

El mencionado llegó un minuto después para abrir la puerta con una caja.

-Cuidado, está pesada.

Atsushi intentó tomarla, confirmando que, en efecto, estaba demasiado pesada. Akutagawa le ayudó a equilibrarlo y después de despedirse del de vendas se dirigieron a la casa del pelinegro.

-Maldición. ¿Por qué Dazai-san en lugar de esto no lo envió por mensajería?- se quejó Akutagawa sosteniendo la caja.

-¿Quieres cambiar en el próximo poste de electricidad?

-... No. Haré lo mejor que pueda.

Atsushi sonrió de forma tierna y sus ojos brillaron de forma cálida.

-Gracias... Oye, ¿te animo con una canción?

-¿Qué?

-Como en los festivales deportivos.

-... Me gustaría.

Los tiempos a su lado eran sin duda los mejores.

Una Historia De InviernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora