Capítulo XII

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Goku se había quedado pensando mucho en lo que el muchacho del futuro le dijo antes de irse.

"No tengas miedo a decir lo que sientes"

Lamentablemente sí tenía miedo a decirlo.

Tenía miedo a la reacción de todos, de todo aquel que se enterara de lo que sentía y pasaba por su cabeza.

Miedo a ser rechazado por ello, cuando no era culpa suya, él no mandaba a su corazón. No tenía el control de ello.

Sabía totalmente que estaba mal, que eso no debía haber siquiera cruzado su mente. Pero ocurrió y ya no había marcha atrás.

Ese sentimiento de querer estar cerca de Vegeta, de querer siempre tenerlo a su lado era lo que le estaba causando problemas. Con ayuda de Kaiosama pudo entender que eso era lo que llamaban cariño, el preocuparse por él, por estar feliz viéndolo aunque sea cinco minutos.

Pero también este le advirtió que eso era moralmente mal visto. Estaba casado y esos sentimientos sólo debía tenerlos con esa persona con la que se casó.

Por eso es que aquella vez que Milk mencionó lo de las promesas, su humor cambió bastante porque ya entendía que estaba traicionando su confianza y también que estaba rompiendo aquella promesa que le hizo en el altar.

Debía decírselo ya. Debía hacerlo o cometería una falta aún más grave.

El problema era que no sabía como iniciar esa conversación, no tenía ni idea de qué decirle y cómo hacerlo.

Las palabras de su hijo seguían dándole vueltas y no lo dejaban pensar con claridad. Se repetían como disco rayado.

Sí, no debía tener miedo... pero era prácticamente inevitable que lo sintiera.

Ahora mismo estaba en su habitación, tirado en la cama, mirando el techo perdido en sus pensamientos.

Respiró profundo y luego dejó salir el aire de sus pulmones.

En su cabeza simulaba una conversación. El cómo podría empezar a hablar, pero nada le convencía totalmente.

—¿Por qué esto es tan difícil?—Toma una de las almohadas y la pone sobre su rostro, frustrado por toda su situación.

—¿De qué hablas, Goku?

Oh no...

—Oh, Milk...—Se quita la almohada de encima—no te oí entrar.

—Goku...—va y se sienta en la cama, mirando hacia el saiyan—¿Qué te sucede? Has estado actuando extraño últimamente y... realmente me preocupa.

Goku se sienta también, conectó sus ojos con los de Milk algunos segundos y luego bajó la mirada.

—Perdóname.

—¿Por qué?

—Porque hice algo que... algo de lo que me avergüenzo mucho.

—¿Avergonzarte? Que... raro que digas eso—Dijo, riendo un poco nerviosa. No tenía ni la más mínima idea de lo que fuera que le pasaba a Goku.

—Es que... no es cualquier cosa. Es algo que no debí hacer y... tengo que decírtelo porque debes saber la verdad.

—Me estás asustando, ¿Qué ocurrió?

La respiración del saiyan se aceleraba.

Era ahora o nunca. Ya no había marcha atrás.

—Milk... rompí...

—¿Rompiste... algo de la casa?—Goku niega con la cabeza—¿Ropa?—Este vuelve a negar—¿Algún adorno...?

—No es nada material...—Después de tanto tiempo, sentía que un nudo se formaba en su garganta, haciéndole difícil la tarea de siquiera tragar saliva—Rompí... mi promesa.

—¿Lo de llevar a Gohan a pescar?

—No... a Gohan le dije que cuando todo se calme iríamos. Yo...

La espera se le hacía tan larga a Milk. Le carcomía saber a qué promesa se refería y la respuesta le daba miedo.

Minutos pasaron hasta que Goku parecía querer hablar nuevamente.

—Yo... siento cosas por otra persona.

Soltó la bomba.

—¿Qué...?

—Yo creí que te amaba como lo hacías tú... pero no fue así. Me sentía muy confundido estos últimos meses, ahora ya entiendo lo que me estaba ocurriendo. Y perdóname por todo, yo te quiero, pero ese sentimiento es más fuerte por...

—Vegeta... ¿Verdad? Lo sé, porque solías hablar demasiado de él, pero creí que era por una simple amistad.

Los ojos de la pelinegra se inundaban de lágrimas.

—Milk... Yo, de verdad lo lamento, no quería que esto pasara pero yo no pude evitarlo. Y... no sabía qué hacer, no sé nada de sentimentalismo y tampoco sobre como poder actuar. Tenía miedo de decírtelo y de que... ese sentimiento por Vegeta se hiciera aún mayor... y mi miedo se cumplió, quiero mucho a Vegeta. Y estaba tan perdido que no me daba cuenta de que estaba muy mal todo esto y que lo estaba empeorando.

Mantenía su mirada abajo, no quería siquiera verla, sabía que estaba llorando, la escuchaba. No soportaría verla así por su culpa.

—Pensé que era cosa del celo de Vegeta, que el efecto se pasaría y volvería a la normalidad, pero ya me di cuenta de que no era eso... era yo quien no quería estar lejos de él. Rompí mi promesa, te decepcioné a ti y a mi abuelo, que siempre me repetía que debía cumplirlas cueste lo que cueste. Pero esta no pude... Porque mi corazón me dice que debo estar con él y ya no causarte más problemas a ti.

—Goku...

—Odiame si quieres, no te preocupes. Yo te comprendo muy bien, te hice daño y no merezco que me trates bien después de esto.

—No puedo odiarte... Tú me has hecho muy feliz y no podría. Y... estuvo mal, pero no puedo culparte, no eres de la tierra, no sabes las cosas que se practican aquí, todo lo has ido descubriendo de a poco, todo te resulta muy extraño a veces y... si Vegeta te enseñó a querer y estás seguro de lo que sientes por él... está bien...

Goku levanta la mirada, viendo una sonrisa en ese rostro que estaba empapado por las lágrimas.

—Si ahora estás seguro de que lo quieres, que estar con él es lo que quieres... yo no puedo hacer nada para evitarlo. Descubriste tus propios sentimientos y si no eran correspondientes a mí... no importa, porque yo quiero que seas feliz y si no lo eres a mi lado, debes ir con él.

Milk amaba a Goku... tanto, que estaba dispuesta a dejarlo libre para que este pueda iniciar una nueva vida con quien él quisiera.

—Si te acepta, Vegeta será afortunado de tenerte a ti... porque no eres alguien malo, todo lo contrario, eres un gran hombre. Fuiste sincero conmigo, alguien bueno, quizás no muy cariñoso, pero lo suficiente para tener un matrimonio más o menos normal... y eso te lo agradezco. Ahora... ¿Cómo se lo decimos a Gohan?

—No lo sé...—Piensa unos momentos y luego vuelve a hablar—Milk... gracias. Fuiste una maravillosa esposa. Te agradezco todo lo que hiciste por mí y por soportar todas mis tonterías.

Da una débil sonrisa, algo más aliviado por todo.

Aún quedaba la espinita, pero al menos, dolía menos que cuando estaba reprimiéndose de hablar.

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"Insecto" 《Goku x Vegeta》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora