"Insecto" 《Goku x Vegeta》

Capítulo XXI

Luego de eso, Vegeta le ofreció un plato de comida a Raditz, quien no pudo negarse.

Aunque al levantarse Vegeta y dejar las cosas en el fregadero, para luego caminar hacia la sala con Goku, notó algo muy... raro en él.

No quiso comentarlo, pues no quería ofenderlo.

Su pancita se veía muy grande y por como vio que Goku lo trataba con mucho cuidado... entendió que estaban esperando un hijo.

Siguió comiendo, sabía que ambos estaban hablando, pero no oía de qué exactamente.

Giró un poco y los vio a ambos sentados en el sofá, Vegeta teniendo apoyada su cabeza al hombro de su hermano.

Vio como Goku sostenía arriba una de las manos del príncipe, quitándole el guante. Luego hizo lo mismo con su otra mano.

—Me gusta más sentir sólo tus manos... sin los guantes...

Vegeta sólo sonríe ante ese comentario.

—No entiendo cómo este tonto pudo enamorar al príncipe. Yo no pude acercarme a él ni un poquito.

De más joven, le atraía Vegeta físicamente, pero este nunca le dio luz verde a nada. Nunca dejó que se le acercara demasiado, además de sólo hablar sobre misiones y cosas así.

Voltea de nuevo hacia su plato, dando el último sorbo a su sopa.

—¿Qué de especial le vio?—Deja el tazón sobre la mesa al acabar—¿Realmente vio algo en él?

—Muchas preguntas, ¿no?—Vegeta caminaba hacia la mesa y oyó lo que decía—Hay cosas que... no tienen ninguna explicación. Hay cosas que yo veo en él y que quizás nadie más vea—Pasa por su lado y va hacia la alacena, sacando un vaso de allí para luego servirse agua—Eso es lo que lo hace especial.

—Príncipe...

—Este planeta cambia mucho a la gente. Tú seguramente no serás la excepción. O quizás no sea el planeta en sí... quizás es... quien vive aquí el que cambia a la gente. Y otra cosa, no te pongas celoso, yo no te di motivos para que anduvieras tras de mí.

—¡¿Eh?!—Una gota de sudor cayó por su sien—¿Usted lo supo?

—Ya te lo dije, cuando tú vas, yo fui y volví tres veces. Y espero que cuando nazca mi hijo no pienses en secuestrarlo.

—¡Por supuesto que no!

—Los antecedentes hablan—Le da una última mirada y vuelve con Goku, quien parecía tener bastante sueño.

—Uy, eso de secuestrar al niño llorón me perseguirá hasta la muerte.

—¿Ya tienes sueño?

—Sí...—Bosteza y vuelve a mirar a Vegeta—Estuve buscando las esferas todo el día.

—¿Cuando fuiste a pedir el radar viste a Trunks?

—Sí, estaba con Bulma, lo tenía en sus brazos. Tiene la misma mirada que tú—Ríe al recordar esa expresión del pelilila, que parecía estar enojado con el mundo, igual que su padre—Siempre parece estar enojado.

—Hmp, con tontos como tú cualquiera vive enojado—Recibe un beso en la mejilla—Con eso no harás que cambie de opinión.

—Podría hacer muchas cosas más pero mi hermano está aquí—Le susurra al oído.

Es apartado por Vegeta al instante.

—No seas vulgar, insecto.

—Vamos, amor, nos conocemos casi que hasta el alma.