REINA OSCURA ¿Dónde te escondes? ✔️

🔺35. NO DIGAS NADA🔻

No existía nada en el mundo que me provocará más estrés y frustración que este momento. Mi padre tenía la mandíbula tensa, mientras que mi padrino sonreía divertido.

¡¿De qué hablaban?!

― ¿Qué es lo que te da gracia? ―pregunto mi padre.

―Que la persona responsable de las bombas, la persona que quiere verlos muertos, no se trate de nadie más ni nadie menos que de tu sobrino...

Alguien toca mi hombro y yo tiemblo haciendo empujar la puerta de la bodega y revelarme ante ellos.

Mi padre y mi padrino me observan sorprendidos, mientras que yo volteo y veo al responsable del sabotaje.

Alfredo...

― ¿Qué hacen todos aquí? ―pregunta él, viendo a los hombres detrás de mí y luego a mí.

― ¿Cómo está tu hermana? ―dice mi padrino cambiando el tema y llevándose con él a su sobrino.

Mi padre y yo quedamos solos.

―Edén... ―Tararea mi nombre tan lento... eso solo significaba molestia―. No te preguntaré sobre qué es lo que acabas de escuchar, así que te diré: No digas nada, sobre todo, a tu madre.

Frunzo las cejas, desconfiando de él, de mi padrino, de todos...

― ¿Tú sabes quién es el responsable de las bombas? ―pregunto viendo sus ojos azules verdosos.

―Edén, no digas nada.

― ¿Qué es lo que me ocultan? ―digo dando un paso al frente―. ¿Por qué no hablan? ¿No creen que sería más sencillo si todos conociéramos la verdad de su pasado? ―el enojo que siento dentro de mí sale poco a poco.

Si él nos hubiese alertado antes, si me hubiese dicho la verdad, yo no tendría que recurrir a la señora Daisy y nada de esto estuviera pasando...

―Te lo explicaré, juro que lo haré, pero no aquí.

― ¡Basta, papá! Siempre me dicen lo mismo y nunca llega el momento de hablar con la verdad.

Él me observa por largos segundos, con determinación. Mi padre, a diferencia de mamá, es más decidido y arriesgado. Algo dentro de mí, me decía que él me diría la verdad, así que espere su declaración viéndolo a los ojos y después, me respondió:

― ¿Quieres que te diga la verdad aquí y ahora? ―me ve con seriedad. Asiento lentamente, sin desviar mi mirada de la suya―. Cierra la puerta.

Obedezco y cierro la puerta de la bodega, lista para escuchar la verdad.

Mi padre me observa y después de un gran suspiro, comienza a narrarme:

―Cuando tu madre y yo éramos más jóvenes, un acosador la molestaba; le enviaba mensajes, regalos y amenazas... Ese infeliz se hacía llamar así mismo como "Ángel Oscuro" y era un completo psicópata asesino. Después de tantas horribles experiencias que Casey y yo superamos juntos, descubrimos su identidad. Por otro lado, Rosalind... ella era mi media hermana, y al igual que el Ángel Oscuro, ella estaba loca. Ambos quedaron enterrados en el pasado y creímos que jamás volveríamos a encontrarnos con su oscuridad, pero... al parecer Rosalind tuvo un hijo. Un hijo que quiere vengarse de nosotros y es el responsable de las bombas.

Lo escucho con atención, tratando de guardar en mi memoria cada detalle de su confesión.

― ¿Por qué querría vengarse de ustedes?

―No lo sé, quizás alguien le hablo sobre nosotros y no le dijo nada bueno.

Asiento con la cabeza lentamente.