Cap 18

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Según subía las escaleras, me empezaba a marear, pero no dejaba de correr. Cada vez se me iba nublando más la vista y al pisar en falso un escalón, caí rodando diez peldaños más abajo.
Me quedé allí, mi cuerpo no recibía mis órdenes, y en mi cabeza solo rondaba una pregunta. Como había hecho eso? No había utilizado varita para incendiar la lámpara y mandar a tomar por culo a Lucius. Pero fue ahí cuando me vino algo a la mente. Cuando quedé en Gryffindor, escuché a Mcgonagall decirle al director: sin duda es ella... Albus. Ellos esperaban algo de mí. Tenía que preguntarles.
Escuché pasos pero mi cuerpo ni siquiera respondió.
Pensé que era Filtch. Por lo menos me llevaría a rastras y así no tendría que caminar yo, pero cuando vi sus ojos vi que no era él.
Me cogió en sus brazos y subió para arriba lo antes posible.
Me recosto en el sofá de la sala común, junto a la chimenea para coger calor
- James...- dije sonriendo
- Que te ha hecho el gilipollas de Malfoy. - vio que tenía un corte en la mejilla y me miró con cara de odio.
- Eso me lo he hecho yo sola, pero ya se que me echó amortentia.
Una sonrisa iluminó su cara.
- Hay que decirle a Regulus que funcionó. Nos hemos pasado días intentando dar con el antídoto. Hace cuánto te has dado cuenta.
- No hace menos de dos horas.
- Por lo menos has podido escapar de ese hijo de puta.
- Si, y he intentado hacerle mucho daño, pero me ha pasado algo.... distinto.
- A que te refieres con eso.
- Iba a violarme y en eso que lo lancé por los aires, sin varita, e incendié una lámpara. Y no lo hice a posta. - me miró confundido- bueno, lo de Lucius si, pero no me había hecho nada la pobre lámpara.
- Ese hijo de la gran puta se merece una paliza de las gordas.
- A ver, James, si se la merece pero ese no es el punto al que quiero llegar.
- Ya sé, ya sé, pero seguro te ha dado unas sustancias estupefacientes, en otras palabras, drogas, para que te imagines todas esas cosas.
- James, lo que vi, era real. Mi túnica está quemada.
- Pues demuéstramelo. - dijo con desconfianza.
- No creo que sea tan fácil.
Me miró directamente a los ojos y me hizo un gesto con la cabeza.
- Está bien, voy a intentarlo. Que hago
- Pues no sé, quema algo.
Me enfoque en un periódico y cerré los ojos. Los abrí y el periódico estaba en llamas.
Mi hermano, estupefacto miró el periódico y luego me miró a mí.
- A que esperas apágalo.
Miré el periódico y no sé cómo se apagó.
- Hay que hablar con Dumbledore. Es alucinante, pero escalofriante. - comenté dándome la vuelta y mirando a mi hermano, el cuál, ilusionado empezó a saltar
- Y ahora que te pasa? - le pregunté.
- Que si tú manejas el fuego, y eres mi hermana, a mi me toca el hielo y seré Elsa. SUÉLTALO, SUÉLTALO.🎶
- Tu eres el que ha ingerido sustancias estupefacientes. Vamos. - nos fuimos a la cama y James me pidió que durmiera con él por miedo a que Lucius volviera.
Llegamos sin hacer ruido y nos metimos en la cama.
Por la mañana, nos quedamos más tiempo.
Gracias a Dios que era sábado, si hubiera sido lunes, me hubiera pegado un tiro y luego me hubiera tirado por la torre de astronomía.
Me dolía todo el cuerpo, y casi no había podido dormir.
James me abrazaba fuertemente y no me dejaba moverme.
A las 10 de la mañana, Sirius se tiró encima nuestro y James lo retiró bruscamente.
- Quítate subnormal que le haces daño.
- Pero que hace Lily aquí
- Es ___, gilipollas
- Ha funcionado?- preguntó Sirius con una sonrisa.
James asintió sin soltarme
- Pero algo ha salido mal, verdad?
- Que va, hay que pegarle a Lucius, pues sí, pero que mi hermana hace magia sin varita, también.
- Como la haya tocado me encargaré yo mismo de pegarle la paliza de su vida. Espera, qué.
James lo miró asintiendo felizmente y yo me volví a echar en la cama.
- Y que hace?
- Hasta lo que sé, incendiar cosas.
- James, eso quiere decir....- empezó a decir Sirius.
- Que podemos incendiar el despacho de Filtch y si revisan nuestras varitas...- continuo James como si se leyeran la mente
- Verán que no hemos sido nosotros.
Saltaron de alegría y me miraron.
- Puedes hacerlo por nosotros, por fii.
- Primero tengo que hablar con Dumbledore.
- Nooo, eso no tendría gracia.- dijo James.
- Mira hoy no. Hoy toca dormir.
- Primero te conviertes en animaga.- dijo Peter.
- Yo sigo sin verlo como una buena idea.- dijo Remus apenado.
Fui hacia él y me senté en su cama abrazándolo.
James y Sirius miraron con mala a cara a Remus pero como a Remus le daba igual que le miraran mal que no pues no me soltó ni me apartó.
- Pues vamos al lío.- James se levantó y empezó a cambiarse.
- Yo me voy a mi habitación a cambiarme.
- Eh, ____. - dijo mi hermano. Me giré para ver qué quería y lo escuché atentamente - si no te importa, vas a empezar a dormir aquí, me da miedo Malfoy.
- A ti lo que te pasa, es que si está tu hermana aquí, significa que Lilyflor estará sola en su habitación y podrás entrar sin problema.- dijo Remus despreocupado entrando al baño.
- No te lo voy a negar. Pero quiero que te quedes aquí. Pero Sirius, ni una mirada.
- Va a ser imposible pero si te quedas más tranquilo diciéndolo pues..
Salí de la habitación y me fui a la mía, Lily no estaba y yo me cambié rápidamente de ropa cuando salí, estaban esperándome a la puerta.
Cogí el frasquito que guardo bajo la cama y me encaminé a la Casa de los Gritos junto a los chicos.
Cuando llegamos, los chicos se transformaron provocándome la risa ya que se colaban entre mis brazos para acariciarlos o jugar con ellos quedando Remus y yo solos en forma humana.
- No tienes porqué tomarlo...
Sirius mordió a Remus en el brazo para que no sea cansino.
Me lo tomé de un trago y eso sabía fatal. Empecé a ver ciertos detalles en mi mente y al final, vi la imagen de un animal.

¿Otra Potter? - Sirius Black y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora