✯𝑭𝒂𝒏𝒇𝒊𝒄𝒔 𝑪𝒉𝒓𝒊𝒔𝒄𝒉𝒆𝒍✯

¿Morgan? No, Morgan James 🍼

Dedicado a RenataMaletta 💞

Christopher

Los persistentes jalones en mi cabello, me sacan de mi estado de somnolencia.

No me hace falta abrir los ojos para asegurarme de que se trata de mi karma jodiendo desde temprano.

—Mhm...—balbucea Milenka luchando por despertarme.

Gruño haciendo que dé un respingo y deje en paz mi cabello.

Latosa.

Abro un ojo y al instante su curiosa mirada grisácea se encuentra con la mía.

Mismo cabello.

Mismos ojos.

Misma actitud de mierda.

Diferente género.

Mi karma en pocas palabras.

—¿Qué? —pregunto haciéndola sonreír.

La mayoría de mis palabras la hacen sonreír.

Nunca me importaron las sonrisas de los demás, eso cambió en cuánto mi tórax se apretaba al ver las sonrisas de Rachel y mis hijos.

Haría lo que fuera por ver esas malditas sonrisas bobaliconas en sus rostros.

Abre y cierra sus manitas mirándome fijamente.

—Háblame Milenka.

Le pido insitándola a que se exprese con las pocas palabras que sabe pronunciar lo que quiere.

—Hmmm... pa.

Es lo único que dice.

Hmmm.

Mhmm.

Y pa.

Solo eso y las dos primeras suenan jodidamente igual.

—¿Dónde está tú madre y tú hermano? —quito las sábanas agradeciendo internamente a Rachel por haberme obligado a vestir un pantalón de pijama.

La rutina de dormir desnudo o en bóxer se acabó en cuánto nacieron los mellizos.

Me giro hacia ella mirando cómo señala la puerta con su dedo regordete.

Asiento y extiende sus brazos hacia mí pidiendo que la alce. Lo hago para así unirnos a su madre y hermano en la cocina.

Música latina suena a medida que nos acercamos, al igual que la risa de Rachel y Owen, Milenka mueve su cabeza bruscamente con el ceño fruncido buscando a los causantes de las sonoras risas.

Mi esposa se encuentra enfrente a la estufa cargando a Owen de medio lado, apoyándolo contra su cadera, mientras se mueve al ritmo de la música. Mi hijo mira con amor y adoración a su madre mientras se aferra a ella.

Milenka emite un chillido que saca a Rachel y a Owen de su burbuja de tranquilidad. Mí mujer nos sonríe mirándonos desde su lugar mientras que a Owen le cambió la expresión de embobado por su madre a una de seriedad por nosotros.