Habían pasado tres días y en esos días Saint no se había presentado a trabajar, tenía muchos problemas, demasiados para él solo.En esos tres días Perth había preguntado por él, pero no recibía una respuesta además de "Tiene problemas personales." Una noche de esas había pedido otro bailarín para un privado, pero no era lo mismo. Claro que no. Tanapon no disfrutó ver a otro chico.
Ahora sería el cuarto día y esperaba que esta vez sí se presentara. Justo estaba por irse al club. Los pensamientos de Perth eran invadidos por el bailarín, hasta que se vio interrumpido por uno de sus hombres.
– Jefe, ¿Me mandó a llamar? –preguntó el hombre pelinegro que al parecer había corrido, por lo agitado que se veía.
– Sí, necesito que me hagas un favor –le dijo mientras se levantaba de la mesa del comedor– Hay una compra pequeña de droga y quiero que la entregues.
Sacó un pequeño maletín donde estaba la droga y se la entregó, junto con un papel que contenía la dirección de entrega.
– A la orden jefe –hizo una reverencia.
– Cuídate.
– Naturalmente jefe.
•|•|•
Nanon llegaba a la escena del crimen donde hace tres días encontraron muertos en 2 departamentos de un edificio, claramente ya se había hecho revisión del lugar, pero Nanon tenía ese don de investigar y estudiar demasiado las escenas. Además, era un policía de alto rango.
Él solo llegó al edificio, ya en el quinto piso justo antes de entrar al departamento número diez se colocó un par de guantes látex, luego quitó la cinta amarilla y entró. Comenzó a observar todo el lugar, los números de la predicción de los sucesos, las siluetas de los muertos dibujadas en el piso. Cerró sus ojos recordando como estaban los cuerpos el día que sucedió, analizó la posición de las siluetas, y recordó que uno de ellos tenía golpes fuertes en la frente y un disparo en la cabeza por el lado de atrás; después fue al departamento trece donde se había encontrado otro cuerpo, este último con 11 balas de USP en su cuerpo.
Nanon caminaba por el departamento revisando todo, bajo la cama, en el armario, los cajones, y en este último encontró varios documentos, expedientes de diferentes personas que anteriormente habían reportado como secuestradas, pero encontró uno que no fue reportado.
[Ohm Pawat] y otro más del gran empresario [Perth Tanapon]
•|•|•
– Ohm, ¿Irás conmigo al club? –preguntó con algo de urgencia, se terminó de perfumar y arregló bien su cabello.
Ohm no parecía muy animado, solo se dejó caer de espaldas en la cama de Perth, abrazando la almohada; definitivamente no le caía bien discutir con Nico.
– No, no iré, ve tú solo –murmuró, levantándose de la cama con pereza para después guiarse hasta su propio cuarto.
Perth no discutió más y salió de su habitación, así como también de su hogar en su lujosa limusina.
Había llegado al club muy temprano tanto que aún estaban preparando las mesas y limpiando el escenario, los bailarines andaban con ropa cotidiana; y no lo habrían dejado entrar a no ser porque pidió hablar con el dueño del lugar, por eso ahora estaba en su oficina sentado en una silla, mirando a aquel hombre fumar.
– El stripper Pete ¿Vino hoy?
– Sí, él vino hoy.
– ¿Está aquí ya? –preguntó, ciertamente sintió una emoción.
– Está en su camerino, el lugar donde da sus privados, pero falta una hora para que el club abra –informó el sujeto.
– Estaría muy, muy agradecido con usted si me deja verlo –decía el pelinegro amablemente sacando una cantidad considerable de dinero de su saco– ¿Me haría el favor? –pidió por fin colocando el dinero en el escritorio del hombre.
– Bien, pero solo tiene media hora para hablar con él, porque debe alistarse para el show –aclaró guardando el dinero en un cajón de su escritorio.
Perth sonrió y salió de la oficina, buscó directamente el bien conocido salón de baile privado de Saint. Estando al frente de la puerta, relamió sus labios y arregló su cabello por última vez.
El stripper estaba desnudo únicamente con una bata, pues dentro de poco debía prepararse para su show, escuchó la puerta de su salón ser tocada y caminó para abrir; cuando abrió la puerta ahí estaba nada más y nada menos que el Sr. Tanapon.
– ¿Qué hace aquí?
– Tu jefe me dijo que podía hablar contigo un momento –respondió. No esperó mucho para meterse al salón y cerrar la puerta.
Saint con resignación se alejó de él.
– ¿De qué quiere hablar?
– De la deuda que tienes conmigo.
Saint vio una sonrisa en el asquerosamente lindo rostro del Sr. Tanapon.
– Sí, sí, sí.. –le irritó tanto escuchar esa respuesta– Ahora en la noche no puedo, tengo mucho trabajo, saldré hasta la madrugada –planteó el bailarín mirándose en el gran espejo del vestidor y sí, Perth lo siguió hasta ahí.
– Hablo de aprovechar el tiempo que hay antes del show.. –decía abrazando a Saint por la espalda mirándolo a través del espejo– Porque si pasan más días antes de mi segunda noche.. –le habló al oído– Yo podría cobrar intereses.
Saint pareció pensar la situación, pero al recordar que él estaba en el club se apartó de Perth y salió del vestidor negando completamente, así que caminó hasta sentarse en el sofá, claro, seguido del pelinegro.
– No hay mucho tiempo –trató de evadir el castaño.
– Para tu mayor beneficio será rápido, saldrás rápido de tu deuda –retó de inmediato sentándose también en el sofá.
– Bien.. –dijo dispuesto a terminar su deuda– Solo déjame hacer algo.
El bailarín tomó su maletín donde tenía sus cosas personales y se metió al baño que era de su uso personal, pues también estaba dentro de su camerino. Cuando entró al baño puso su bolso en una esquina y saco su teléfono de dicho bolso. Marcó rápidamente el número telefónico de otro de sus amigos strippers.
– Hola, ¿Chris está contigo?
– Sí.
– ¿Puedes entretenerlo hasta que el show este por iniciar?
– Sí, puedo hacerlo.
– ¿Cuándo falten cinco minutos podrías traerlo a mi camerino?
– Si, no te preocupes Saint
– Gracias.. escucha, es muy importante que él no venga a mi camerino ahora.
– Está bien, yo me encargo.
Y Saint cortó la llamada, pero justo cuando terminó escuchó la puerta del baño abrirse y cerrarse a la vez, Perth había entrado al reducido espacio y para rematar le puso seguro.
Antes de que Saint protestara algo, Perth lo tomó fuerte de la cintura y estampó sus labios con los suyos haciéndole callar.
Sí, lo harían en el baño.
![](https://img.wattpad.com/cover/340230259-288-k104309.jpg)
ESTÁS LEYENDO
El Mafioso Y El Stripper [Adapt./PinSon]
Fiksi PenggemarSu cuerpo moviéndose al ritmo de la música era algo peligroso para cualquier hombre que lo viese, y el gran mafioso Perth Tanapon no era la excepción, ahí se encontraba babeando por la estrella de el lugar. • Boys Love. • Mafia, Romance. • Adaptació...