★// Te Pertenezco //★ (+18) TERMINADA

Capitulo 5

Daniel

- Cuídate mucho pequeño - Asiento lamiendo el hocico de Mark intentando tranquilizarlo, puedo sentir su excesiva preocupación.

- Gracias por dejarme ir - Suspira con fuerza.

Se que le cuesta y le duele dejarme solo.

- Cuiden del muy bien, si algo le pasa...- Le interrumpo su amenaza.

- Estaré bien, no te preocupes amor - Baja la cabeza cerrando fuertemente los ojos.

- Pue... pueden irse - Me doy la vuelta para correr junto con los otros 5 lobos.

Su aullido de amenaza no se hace esperar, sonrío sin poder evitarlo.

- Te quiere mucho - Dice Raúl, uno de los lobos más fuertes, no necesito preguntar ¿Por qué está aquí? Es obvio que para protegerme.

- Lo sé - Caminamos hasta nuestra área y nos sentamos haciendo un pequeño circulo.

- ¿Como fue posible que te dejara salir? - Ahora habla Cristián, otro lobo muy fuerte de la manada.

Me siento un poco incómodo, tener estos grandes y fuertes lobos frente a mí, me hace sentir muy débil.

- Bueno, digamos que le dije que no me tocara o se me acercara -

- ¡Le has dicho las peores palabras que quiere escuchar un mate! - Bajo mis ojeras.

- Por esa razón se lo dije - Alzo la mirada y observo la hermosa luna resplandeciente.

- Es muy peligroso - Gruñe Cristián

- Yo no quiero estar con las hembras, es muy aburrido -

Debes tener en cuenta que nosotros necesitamos tenerlos a salvo, en especial tú, nuestra manada estará vulnerable si te llegase a pasar algo -

- Pero yo... -

- Este no es tu lugar - Bajo la mirada sintiendo las lágrimas caer.

- Entiendo, pero... -

- ¿Si tu llegas a morir sabes lo que nos pasará a nosotros? - Asiento mirando a Raúl.

- Los mataría a todos sin dudarlo -

_No quiero hacerte sentir mal, pero debes estar con las hembras, no quiero ver morir a mi hembra y mi cachorro -

- Lamento haber sido egoísta - Todos se callan y miran detrás de mí.

- No puede ser, ¡¿Por qué precisamente hoy?! - Raúl se levanta y comienza a gruñir seguido de todos.

- Escóndete - No dejan de mirar detrás de mí.

- ¿Porqué? - Mi nerviosismo es notorio.

- ¡Que te escondas! - Camino hasta un árbol y me escondo detrás de él haciéndome bolita.

- ¡Largo de aquí, si no quieres morir! - Gruñe Raúl furioso.

Respiro profundamente sintiendo el incómodo olor a Rugues.

Alzo mi oreja escuchando el bajo gemido de dolor proveniente de una niña.

Me levanto y corro siguiendo el sonido.

Gracias a la luz de la luna puedo ver a un rogué jalando la pierna de una niña que esta agarrada con fuerza de un árbol intentando no caer.

Sin importarme que sea más grande que yo le muerdo con fuerza su pata trasera.

Un pequeño gemido de dolor sale de él, gracias a eso suelta a la niña.

- ¡Maldito mocoso! - Siento su gran mandíbula morder mi cuello aventándome contra un árbol fuertemente.

Niego desesperado cuando veo como alza sus patas para alcanzar a la niña quien grita llena de miedo, me levanto con mucha dificultad.

Me acerco a él gruñendo, el me mira y se me avienta, con mi poca fuerza nos comenzamos a revolcar en el pasto.

Desafortunadamente me muerde el muslo con mucha fuerza, de nuevo me avienta contra un árbol.

- Eres un débil - Muerde uno de mis costados.

Sin poder seguir soportando chillo desesperado.

- Cállate maldito ruidoso - Siento como mi cuerpo deja de responder.

- ¡DANIEL! - 

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