Acuerdos

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Severus acompañó a su futura esposa en adornar el jardín para los invitados que habría en la tarde, no vendrían muchas personas, pero si estaría parte del Colegio Hogwarts, quien sería Minerva McGonagall, Albus Dumbledore, Remus Lupin, quien es el padrino de su niña, entre otros.

Quedó el jardín precioso lleno de globos, serpentinas y cajas de sorpresas.

Gracias, mi amor- le dijo Madeleine a su príncipe oscuro, quien sería su futuro marido.

¿Gracias, por qué?-le preguntó confundido Snape.

Por haber aparecido en nuestras vidas nuevamente, Lilith es muy feliz contigo- le dijo la bruja- y viéndola a ella feliz, yo soy feliz.

Severus atrajo a su mujer de la cintura y le dijo secretamente en el oído: Mañana nos casamos.

¿Es en serio?-le preguntó-yo...entonces...tendré que ver un vestido rápido para la boda-le dijo nerviosa.

Vístete de cuero negro-le dijo ardiente su futuro esposo-ese será tu vestido, el que tienes de cuero negro, con el que me dejaste loco, en Hogwarts, y tu capa, con eso será más que suficiente,

¿Y qué le diremos a Lilith?-preguntó la bruja.

Que nos amamos y que nos casaremos-le dijo el pelinegro.

¿Sabías tú que ella hoy al cumplir doce años te pedirá pololeo?-le dijo la bruja.

Bueno, le diré que pololearé con ella, mientras me caso con su mamá- le dijo Snape.

Se pondrá celosa-le advirtió la bruja.

¿Así?-le preguntó el pelinegro-¿Y cómo son los celos de mi hija?.

¡Uff!, como los míos y peor- le dijo divertida la bruja.

Tendría que ver esos celos, creo que no será terrible-le dijo el maestro de pociones.

Iba corriendo la tarde y comenzaron a llegar los invitados, llegaron primero los clientes cercanos de Madeleine, quienes vieron a Severus y se asustaron un poco al verlo de tan estricto color negro en sus ropajes.

Es el padre de Lilith-le explicó Madeleine.

¡Oh!, mucho gusto, señor Snape-le dijo una de las clientas.

El gusto es mío- le respondió amablemente el pocionista, quien se quedó hablando con ellas temas interesantes de actualidad.

Llegaron Minerva, Albus y Remus a la fiesta con regalos para la pequeña.

¿Y la hermosa cumpleañera?-preguntó Dumbledore.

La iré a buscar ahora mismo- dijo la bruja, quien se adentró en la casa, mientras Gastón, su elfo, colocaba su piano cerca de la mesa donde estaba el banquete.

¿Y ese piano?-preguntó el pelinegro.

¡Oh, vamos Severus!- dijo Albus- ¿No sabías acaso que tu hija toca el piano en su cumpleaños?.

¿Lilith tocará piano?-se preguntaba el pocionista- Esto si que no me lo pierdo. 

¡Hija!,  ¡baja!, ¡ya llegaron los invitados!-le dijo su madre.

La pequeña abrió la puerta y bajó con un hermoso vestido rojo y negro, panties blancas y zapatos de charol con correa.

¿Me veo linda mami?-le preguntó la niña.

Por supuesto, hija, tú eres la niña más linda de toda la fiesta-le dijo su mamá.

¿Le gustará a papi?-le volvió a preguntar a ella.

Nuestro Dulce SecretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora