Después de la muerte de Sirius, Harry es enviado de vuelta con sus tíos.
Encerrado en si mismo, sin hablar con nadie, pasa su decimosexto cumpleaños solo, o eso es lo que el cree hasta que el ente se revela ante él.
Una propuesta interesante por par...
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—¿Y tienes que hacerlo con ese estúpido aspecto? —Azrael suspira con pesadez. Parece cansarse con tan solo mirar a la mujer.
—¿Qué tiene de malo este aspecto? —pregunta la fémina mirándose de arriba abajo.
—Ninguno —susurra Harry sin poder evitarlo.
Aunque sea completamente gay, no es ciego. Naelka es una de las mujeres más hermosas que ha visto nunca, por no decir la más hermosa. Es casi igual de alta que Azrael, tiene el cabello completamente rizado de un rubio casi blanco precioso que le llega hasta la mitad de la espalda. Sus ojos son de un gris muy clarito, casi blancos. Tiene una nariz, pómulos y labios perfectos. Y viste un largo y simple vestido color crema que le queda como un guante.
Tanto Azrael como Naelka le miran, uno como si hubiera chupado algo agrío y la otra con una sonrisa de oreja a oreja.
—¿Ves? Al pequeño mago le parezco atractiva —cuando la mujer parece querer dar un paso en dirección al moreno, Naruto rodea la cintura de Harry con uno de sus brazos y tira de el con suavidad hacia su pecho. La acción del ninja hace que la mujer sonría traviesamente, pero, antes de que pueda decir nada, Azrael la interrumpe.
—Sabes muy bien a que me refiero. No estoy diciendo que te veas mal —replica el ente cruzándose de brazos.
—Entonces, ¿me veo bien? —la mujer no deja pasar el pequeño desliz del ente, pero Azrael no está para bromas y Naelka lo nota en seguida—. Vale, vale —alza sus manos hasta la altura de sus hombros y suspira—. Perdí una apuesta contra Zhao, y ya sabes bien como es ese cabrón —Azrael asiente. Conoce demasiado bien a su hermano más pequeño—. Tengo que estar así un mes entero.
—Me la suda, si necesitas tratar algo conmigo lo haces siendo tu o vuelves en un mes. Tú decides —Harry no entiende el rechazo que su padre muestra ante la mujer. Ni con Tom, al cual parece que odia, trata tan mal como a esta mujer.
—Imbécil —Naelka le saca la lengua infantilmente a Azrael y con un rápido destello de luz, los rasgos femeninos de la mujer cambian a unos masculinos, el cabello le mengua hasta la altura de los hombros y pasa de aquel rubio casi blanco a un blanco que casi resplandece. Harry tiene que entrecerrar un poco los ojos al mirarle— ¿Contento?
Azrael asiente secamente.
—¿Qué haces aquí?
—Ya te lo he dicho, estoy arreglando tu desastre. ¿Sabes la de alteraciones que has provocado en el tiempo estos últimos meses?
—Algo puedo imaginarme.
—Te equivocas, no puedes hacerte ni una pequeña idea de toda la mierda que tengo que arreglar por tu culpa —Naelka chasquea su lengua, molesto—. Has cambiado el destino entero de dos mundos Azrael, has cortado los hilos del destino de millones de personas y has rescrito por completo la historia y vida de esos mundos.
