De Fuego y Cenizas

21

𝐄𝐋 𝐁𝐀𝐈𝐋𝐄 𝐑𝐄𝐀𝐋 𝐈

Vanessa observaba desde su posición cómo todos en la fiesta se entregaban al ritmo de la música. Mientras su mirada se deslizaba por la sala, notó a Aegon disfrutando de un baile animado con una botella de vino en la mano.

Sus ojos se posaron en Daemon, quien sacó a bailar a Rhaenyra. La pareja bailaba con gracia. Mientras tanto, Daeron y Helaena se movían al ritmo de la música, ella lucia feliz y a Vanessa le encantaba ver a su prima de tal manera.

Vanessa empezo a conversar con la reina Alicent, el rey era incapaz de sacar a bailar a la reina por su estado, parecia que si se levantaba a bailar despertaría al lado de los dioses.Su tranquilidad fue interrumpida cuando Vanessa sintió la presencia de tres personas a su lado. Volteó con gracia, y allí estaban Aemond, Jacaerys y Rajesh, quienes la miraban con interés.

—Príncipes, ¿Les gustaría unirse a nuestra conversación?—les preguntó Vanessa con su característica elegancia aunque con cierto sarcasmo.

—La verdad no, quería invitar a su alteza a bailar conmigo — preguntó Rajesh sonriente .

—Me tendrá que disculpar mi principe, no puedo — contestó Vanessa.

—Permiteme bailar contigo Vanessa, esta pieza,¿la recuerdas?— preguntó Jacaerys haciendo aluvión a que esa misma canción había sonado el día de su matrimonio.

—Discúlpeme príncipe Jacaerys, no quiero bailar con usted — contestó ella.

Los deseos de Jace por Vanessa aumentaron.

—¿Puedo bailar con su majestad ?— preguntó Aemond.

Vanessa sonrió, quería bailar con Aemond, era su amigo, siempre lo seria pero no quería seguir añadiéndolo en un plan en el cual podría salir perjudicado.

—Perdóneme, esta pieza la tengo reservada para mi prometido, el príncipe Lucerys — añadio Vanessa lo que hizo que Lucerys casi escupiera el vino

—¿Yo?— preguntó Luke—Claro... si...yo soy Lucerys Velaryon, soy su prometido — el castaño se levantó a decir torpemente ya que derramó algo de vino y se acercó donde Vanessa.

La mirada de Aemond se ensombrecio, ¿Porque Vanessa hacia eso ?, no tenia sentido para el.

Los tres caballeros sonrieron cortésmente ante la respuesta de Vanessa, aceptando su elección de bailar con su prometido, el príncipe Lucerys. Vanessa se levantó de su asiento con gracia y giró para mirar al príncipe, ofreciéndole su mano con una sonrisa agradable.

La sorpresa en la sala era palpable cuando el príncipe Lucerys se levantó y sacó a bailar a Vanessa. Los murmullos y las miradas de asombro recorrieron la estancia mientras los dos se dirigían a la pista de baile. Lucerys, aunque tímido, se mostraba atraído por Vanessa. Su elección la halagó, y Vanessa sabía que sería un buen esposo para ella en términos de ser un esposo que la respetaría y trataría bien, reconocía solo mirándolo que el la colmaria de joyas, escucharia su opinion y la veneraria.
No obstante, Vanessa también era consciente de que lo que le ofrecía Lucerys no era lo que ella anhelaba. Si bien ser un príncipe tenía sus ventajas, ella deseaba algo más. Lucerys, como segundo hijo, no heredaría el trono y tendría su propio conjunto de desafíos y responsabilidades. Además, la herencia de Lucerys estaba ligada al mar, y Vanessa despreciaba cómo la sal del mar afectaba su cabello. El recuerdo de la desagradable experiencia en Driftmark solo reforzaba su opinión sobre el lugar.

Driftmark era su pesadilla, no había cosa que más odiara que aquel lugar, preferia heredera piedra de las runas que pasar una noche en aquel lugar.

El príncipe de Dorne despues que transcurrieron dos piezas se acercó con una sonrisa a amblss—¿Me permitiría un momento de su tiempo, con la princesa  Vanessa? Sería un honor compartir una pieza de baile con ella—