Solo Son Frases.

Una Despedida Sin Sentimientos.

–Después de tanto tiempo entendí que te había idealizado, nunca ví el monstruo que eras, yo prefería verlo como un príncipe azul, eras alguien negativo y tóxico y yo siempre trataba de ver lo positivo en ti, siempre creí que eras alguien perfecto y pensaba que yo era el error, pero realmente estaba equivocada, te gusta vivir a bases de mentiras ¿Cuántas no me habrás dicho a mi? ¿Que cosas me habrás ocultado mientras decías que me amabas? ¿También me habrás fallado de esa manera? Son tantas preguntas y siento como la herida vuelve a abrirse, dañastes tanto mi estabilidad emocional, cada noche me decía que merecías a alguien mejor, yo me sentía poca cosa para ti, pero ahora me doy de cuenta que la que realmente necesitaba a alguien mejor, era yo.

–Dicen que es peor vivir engañada que saber la verdad y lo malo es que todo ese tiempo, viví engañada y ahora es que estoy descubriendo la verdad, cuando pensé que había sanado, cuando pensé que había avanzado, sale a la luz, todas tus mentiras, es como si volviera a ese día, ni siquiera tienes una puñetera idea de todo lo que lloré esa noche, esos días, semanas, meses y años, ni siquiera sabes el desgaste físico que tuve, no sabes nada, porque simplemente no te importaba realmente, es una pena que haya malgastado todo de mí en ti, fuistes el peor huracán que puede existir, es por eso que los huracanes tienen nombres, por todo el desastre que dejan y tú dejastes uno en mi.

–No te odio, porque odiar es un sentimiento y gracias a Dios yo no siento nada por ti, te llegué a amar más que a nadie en esta vida, no lo voy a negar, inclusive era capaz de dar mi vida por ti con los ojos vendados, pero ahora, ahora ni un peso daría por ti, porque ya no lo vales, ojalá que puedas cambiar, de verdad, lo deseo de corazón, que puedas llegar a hacer una mejor persona para ti, no buscando la perfección, no, sino que seas feliz siendo imperfecto, porque no tiene nada de malo la imperfección, lo malo es creer ser alguien que realmente no eres; Te agradezco todos esos momentos junto a mi, quizás todo fue a base de mentiras, pero yo realmente creí que era real y con eso quiero recordarte, no con lo malo, sino con lo bueno, aunque haya sido ficticio, espero que encuentres la felicidad, pero una verdadera felicidad, en donde no tengas que mentir para quedar bien con los demás, si no que puedas ser tú con toda libertad. Adiós, Iceberg Amargado.