Un mes después...
Adrien Agreste
Ha pasado un mes y hemos pospuesto el viaje por asuntos de la empresa de Marinette, está en trámite por el cambio de dueño, el padre de Marinette decidió comenzar el traspaso de nombre, ya ni siquiera asiste a la oficina, no tiene que temer y que cumpliremos los tres años en pocos meses.
Por otro lado, Lila es un tema un poco complicado. Últimamente se ha sentido enferma y eso me tiene preocupado, le pedí que fuera a médico y lo último que me dijo que es que iría esta tarde.
Seguimos sin vernos, hablamos por teléfono mínimo una vez al día, ya que la última vez que vino a verme tenía dudas de lo que sentía por ella, cuando mi amor es sincero y está latente por ella. Cuando llega la hora de dormir hablamos más libremente, sobre todo cuando estoy en mi habitación donde tengo más privacidad.
Charlamos por mensajes durante horas, eso la mantiene contenta y segura de que estaremos juntos cuando termine el tiempo de matrimonio. Cada día, mejor dicho, cada noche, hacemos nuestro momento especial.
Marinette, no ha vuelto a salir desde que yo lo hice me refiero a salir buscando sus aventuras, al menos no lo he notado y eso me tiene tranquilo. No porque sienta celos de lo que haga con otra persona, quiere decir que sienta más que cariño por ella, ya estoy claro con eso de lo que siento. Es un tema que quedo aclarado. Solo la veo como una hermana pequeña, a la única que mujer que amo es a Lila.
Lila Rossi
Cada día me siento más cansada de vivir así, me tiene harta no tener qué verlo y quedarme sin hacer nada, aunque por otro lado Adrien me envía dinero a mi cuenta bancaria y no me falta nada.
Por las noches por lo menos sigue siendo mío, sus orgasmos siguen siendo míos y esa esposa que tiene por más que busque no ha logrado enamorarlo. Porque no soy idiota como para no notar que ella está babeando por él. Por eso era mi temor de no verlo, que ella me quite el futuro asegurado que tengo junto a Adrien.
Sobre el señor que acompañe a la cena bueno no todo es mentira o no todo es cierto, porque si es mi vecino de edificio, con respecto a hablar con él lo hago eso es cierto, lo que no le dije es que no solo hablo con él, sino que también voy a su casa y le ayudo con algunas cosas que no puede hacer el solo.
Últimamente me llama por cualquier cosa, no soy tonta como para no notar que quiere algo más que ayuda de mi parte, me he dado cuenta de cómo me mira y por un poco de dinero no me molesta hacerlo feliz, bueno ya lo he hecho, solo que no del todo. Le he dado placer si, eso no lo niego, solo que no hemos tenido sexo, lo he complacido de otras formas en las que solo una mujer puede, creo que entienden a qué me refiero y no tengo que dar detalles de lo que le hago.
Me paga muy bien por mis servicios, dinero que ya no existe obviamente, siempre hay algo nuevo que comprar. Algún bolso de diseñador que no tengo todavía o el lanzamiento de algún maquillaje o cremas antiarrugas, de las que ya tengo una colección con tal de mantenerme bella por siempre. Es una inversión más que gusto, mi cuerpo y mi rostro son los que me van a mantener en el futuro por mi belleza. Es la que mantendrá a Adrien enamorado de mí sin dudar a pesar de tener hijos con tal de que siga a mi lado.
Me he sentido enferma estos últimos días, tengo náuseas y vómitos, sobre todo en las mañanas. No le he dicho a Adrien el detalle de mis síntomas. Solo sabe que no me he sentido bien.
En estos momentos voy en camino al doctor con el que conseguí la hora, no quise pedir con una mujer, por el simple hecho de que creo saber que tengo y necesito solucionar esto, no que me vean como una mujer fría y sin sentimientos,
- Buen señorita Lila, ¿a qué debo su visita? - me pregunta el doctor que está bastante bueno y sexy
- Tengo síntomas de embarazo y necesito no estarlo - digo de forma seria y firme
- Vaya, veo que ya sabe lo que tiene y lo que necesita para resolver su enfermedad - me dice con ironía
- Si necesita dinero se lo doy solo dígame cuento quiere, necesito solucionar esto cuanto antes - respondo cruzando mis brazos
- Solucionarlo es fácil, creo que ni siquiera era necesario venir aquí, podría haber ido directo a la clínica encargada de esos temas - me dice confundido
- Tiene razón, vengo porque necesito que no quede registro medico de lo que voy a hacer - le digo sacando mi billetera
- Entiendo y puedo ayudarla con eso, solo que todo tiene un precio - me dice sonriendo
- Eso lo tengo claro, por eso vengo preparada para cualquier precio - le contesto de forma coqueta
El doctor nota mis intenciones y mi coqueteo, no tengo que decir nada más para que sonría de vuelta y desabroche su bata de médico. Se levanta y me señala la camilla que está detrás de una cortina blanca donde se revisa a sus pacientes, cabe destacar que este doctor es ginecólogo y conoce demasiado bien el sistema reproductivo femenino, por lo que anhelo saber que es capaz de hacer para darle placer a una chica. Es una de las fantasías que he tenido desde hace años. Solo que no se había dado la oportunidad de hacerlo, ya que o eran feos y gordos o no tenían esa mirada de deseo en ellos como este. Por eso no quise desaprovechar esta estupenda oportunidad que no creí que se daría.
Debo decir ¡wow!, este hombre sí que sabe lo que hace, con los dedos me hizo sentir un placer que no había sentido, después no dejo de hacerme temblar con un orgasmo tras otro, hasta que me toco devolver el placer antes de lo que venía.
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Adaptación MLB || Amor después del divorcio || Adrinette
RomansaADAPTACIÓN Mi nombre es Adrien actualmente tengo 29 años, hace tres años me case porque mis padres me obligaron. Siempre he amado a la misma mujer, la que no es ni fue mi esposa. Hoy por fin soy libre y puedo ser feliz al lado del amor de mi vida. T...