20. Marinette ebria

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Adrien Agreste

Ha pasado mucho tiempo desde la ultima vez. Las cosas han cambiado demasiado, Lila se ha ido a estudiar a otro país, gracias a unos favores que tenia sin cobrar. Ella no sabe que la ayude a conseguir ese viaje, es algo que no necesita saber. Solo busco lo mejor para ella.

Ya estoy casado, Marinette es una grandiosa mujer, cada día la conozco un poco mas y temo llegar a sentir algo mas que cariño de hermanos como le dije a ella que sucedería. No quiero que ella se sienta incomoda a mi lado, nos quedan mas de dos años casados aún.

Me gusta mucho su amistad con Alya y Nino. Yo también me he acercado como amigo a Chloe y es una buena chica. Un poco loca, pero quien no tiene locura dentro.

Mis padres nos regalaron una casa, como ya deben saber, con un bebé, un perro. Marinette lo bautizó como Plagg, no es el mejor nombre que puede tener, pero al ver a Marinette enamorada a primera vista del cachorro no pude negarle nada con respecto a su bebé. Estamos viviendo en la casa que mis padres nos dieron, al comienzo pensé en darle la habitación principal a ella, es la mas grande. Sin embargo, al ver el cuarto sentí que era ideal para los dos, no estoy diciendo que seremos un matrimonio verdadero, pero porque no compartir una cama sin tocarnos, no es algo imposible. Además, Marinette es y será como mi hermana menor.

Lo de la fiesta de inauguración de la casa fue idea de Alya, mi esposa no es de hacer cosas así. No me negué porque al fin y al cabo somos una pareja de recién casados y enamorados. Ni siquiera mis amigos saben que esto es un trato, no quiero incumplir el acuerdo y que ambos salgamos perdiendo.

La noche con nuestros amigos fue mejor de lo que espere, solo fuimos nosotros con mis padres. Estos últimos se llevaron a Plagg, ya que iban a la casa de campo. El alcohol no falto en la noche, creo que fue demasiado, mejor dicho.

Al ver a Marinette en estas condiciones deseo que sea mi esposa de verdad, en estos últimos días he notad mas detalles de ella, como que le gusta mucho leer, sobre todo de romance, su panorama favorito es leer en la terraza mientras Plagg juega y corre. A veces me olvido de que no es real y la tomo por la cintura, le tomo la mano y eso ya es algo que me nace hacerlo. Nunca se ha quejado de eso, pero creo que lo mejor es que tome distancia un poco de ella, estoy confundiendo las cosas.

Después de despedir a Nino que llevaba a cuestas a una Alya muy ebria, miro a mi esposa y le digo.

- Vamos a la cama - ella sonríe y me responde algo que no esperaba de ella.

- ¿Me estas proponiendo algo indebido esposito? - la miro con mis ojos mas abiertos de lo normal.

Nunca pensé que el alcohol le soltaría la lengua, se ve tan tierna con sus mejillas sonrojadas que me dan ganas de besarla, pero no puedo hacer eso.

- Tanto como indebido no, total estamos casados - le digo guiñando un ojo.

- No te creo capaz de hacer algo conmigo, dices que soy una hermana para ti, no tienes cara de ser incesto - dice con la lengua enredada.

- No me tientes que no estas en condiciones de hacer nada, vamos a dormir que mañana no recordaras nada - le digo tomándola en brazos como un saco de patatas en mi hombro.

- Ja, tu no estas en condiciones de nada, yo estoy perfecta, incluso si pudiera buscaría algún chico para quitar el calor que tengo - dice suspirando y tratando de sacarse la blusa que trae puesta.

No le contesto mas y cierro la puerta de nuestro cuarto, alguno, bueno solo Nino podía escuchar, ya que el único consciente en estos momentos. Bajo de mi hombro a mi esposa, que se tambalea perdiendo el equilibrio. La tomo de la cintura para que se mantenga firme, pero ella no esta en sus cinco sentidos y cierra los ojos poniendo su rostro a completa disposición del mio.

Sus manos se apoyan en mis hombros, no hay que ser idiota para darse cuenta que piensa que la voy a besar, mi cuerpo quiere hacerlo, lo juro. Mi mente es mas honrada y me dice que no la bese, que nuestro primer beso (que no sea en público) no debe ser así, ella mañana no recordará nada de lo sucedido hoy, no podría vivir sabiendo que me aproveche de ella, no cuando Marinette ha sido tan perfecta como esposa y amiga,

La llevo despacio a la cama, la acuesto muy despacio, ya que mantiene los ojos cerrados. Cuando la veo instalada le quito los zapatos y arropo para que descanse, no vuelve a abrir los ojos así que supongo que se durmió.

Creo que es lo mejor que pudo pasar, no hubiera podido resistir la tentación de besarla y detenerme a no hacer nada más, no cuando es tan hermosa y sexy. Tan inocente y audaz a la vez, cada día voy conociendo una nueva faceta de mi esposa, lo peor es que cada vez que veo una nueva faceta de ella me gusta más, y eso no esta nada bien.

Recuerda a Lila, me digo cuando siento que estoy cayendo en la confusión del amor. Así le he puesto a los sentimientos que me nacen día a día con Marinette, puede que solo sea la rutina de vernos todos los días o el dormir juntos como amigos. Quizás debería irme a otro cuarto, pero que le diré a ella, que excusa usaré para esto, no quiero alejarme de ella y a la misma vez seguir tan cerca de ella.

Carajos estoy cada vez mas confundido.

Llego a buscar a Chloe que continúa dormida, trato de despertarla, pero ella ni cerca de hacerlo. La llevo a la habitación que usará ella y la dejo acostada en la cama con ropa y todo, los zapatos ella se los había quitado mientras bebíamos en la primera planta de la casa.

Salgo y pienso en ir a ver a Marinette, pero esta dormida, no quiero despertarla. Decido bajar a tomar un poco de aire, tengo que calmar mi mente sobre el no beso de hace unos minutos, mantener la mente fría para no cagar la relación que tengo con mi esposa, no perder lo que estamos formando, la amistad y confianza que podemos tener al terminar estos tres años.

Adaptación MLB || Amor después del divorcio || Adrinette Donde viven las historias. Descúbrelo ahora