Adaptación MLB || Amor después del divorcio || Adrinette

62. Comienza el viaje

Adrien Agreste

Al ver a Marinette llegar junto a mi madre, me quede sin palabras, si bien ya sabía lo hermosa que es nunca imaginé que después de ir con mi madre quedaría mas preciosa de lo que podía verse. Este viaje ya no me esta pareciendo tan buena idea, estará rodeada de hombres que querrán estar con ella y no me gusta para nada ese pensamiento.

No se de que me quejo si yo estoy enamorado de Lila y ella tiene derecho a hacer su vida. no puedo ser tan egoísta y pedir que ella no este con otro hombre, no es justo para ella.

Mi madre esta noche dormirá con Marinette por lo que me quedo en mi cuarto de infancia y adolescencia. Me cuesta dormir, al cerrar los ojos solo vienen a mi mente imágenes de Marinette, primero la que aun después de varios días no puedo dejar de pensar, ella en la tina desnuda y ahora se suma la imagen de hoy. Se fusionaron ambas y la veo desnuda como hoy.

He tenido sueños húmedos con ella, despierto excitado por lo que ella esta provocando en mí, me aterra estar con ella a solas, por lo que lo he estado evitando estos días, aunque durante el viaje no podré hacerlo.

En la madrugada me duermo, olvidando por completo que debía llamar a Lila. Despierto alrededor de las seis de la mañana por la alarma de mi celular. Cuando la apago veo llamadas y mensajes de Lila. Veo y esta enojada, no es para menos si hoy me voy y después por al diferencia de horarios no podremos hablar como siempre.

La llamó y no contesta, entonces hago una locura. Me levanto y voy en completo silencio a verla, sin avisarle.

Llego al departamento y como tengo Ilaves entro en silencio. La veo dormida y es hermosa, me recuesto a su lado y la abrazo, ella balbucea dormida y beso su hombro. Mi cuerpo se enciende solo con su olor. Ella siente mi dureza en su trasero y se remueve.

Gira su cuerpo y la beso, sin poder resistirlo, un beso lleva a otro y terminamos haciendo el amor. Mas de una vez, perdí la cuenta de las veces.

- Que hermosa manera de despertar amor -dice agitada

- Lo siento, no podía irme sin verte - digo besando sus mejillas

- Por mi feliz de despertar así a diario - responde sonriendo y abrazandome

Mi celular nos saca de nuestra burbuja, miro y es mi madre

- Dime madre - contesto sonriendo y calmando mi respiración

- Ya vamos en camino al aeropuerto, espero que llegues a tiempo, si no lo haces tomaré  yo tu lugar - dice terminando la llamada

- Amor, porque no dejas que se vayan ellos sin ti -dice Lila acariciando mi estomago

- No puedo, tengo asuntos de trabajo que ver durante este viaje - respondo mintiendo

- Esta bien, te voy a extrañar mucho -me dice besado mis labios

Le devuelvo el beso, pero lo corto cuando ella quiere algo más, debo irme. Me despido de ella y tomo mi auto para ir al aeropuerto. Por suerte mi maleta esta conmigo y no debo ir por ella.

Al llegar al lugar veo a mi madre sola en la sala donde se pueden estar las personas que no viajan, miro alrededor y antes de preguntar ella me dice

- Ya esta dentro, un hombre que toma su mismo vuelo hizo lo que tu debías hacer, le ayudo con su equipaje - dice molesta

- Madre, tenía algo que hacer... -comienzo a decir

- No quiero saberlo, créeme que ambas supimos donde fuiste - responde enojada Suspiro y la abrazo, le pido perdón y me dice

- Solo vete, no te atrevas a hacer algo delante de ella, eres tan ciego que no te has dado cuenta de o que la lastimas con tu actuar - dice ella suspirando

- ¿Lastimarla? De que hablas madre, ella solo me quiere como amigo - digo cansado de que todos me digan que siente algo por mí cuando no es así

- Como digas, te vas a arrepentir tanto cuando abras los ojos, estaré a tu lado escuchando tu lamento con las decisiones que tomaste -dice dejándome solo

Camino y entrego mi tarjeta de embarque, avanzo ansioso por verla. Cuando logro divisarla esta sonriendo a un idiota a su lado. El chico es atractivo y joven, esta demasiado cerca de ella. Apresuro mi paso y le digo

- Amor, lamento la tardanza - digo besando rápido sus labios, lo que sorprende a Marinette

- No te preocupes, te presento a Nathaniel, Nathaniel mi esposo Adrien - dice ella presentándome

- Un placer, bueno me retiro ya estas a salvo de los depredadores, puede que nos veamos durante su viaje en algún país -dice sonriendo y guiñando un ojo a Marinette

- Si, puede que así sea o puede que no -digo serio

- Espero que si -dice Marinette sonriendo como boba

Me molesta la expresión de Marinette, toda feliz sonriendo al idiota ese de Nathaniel, no se merece que ella lo mire de esa forma. Al quedar solos me siento a su lado y ella pierde la sonrisa, lo que me molesta enormemente. Sé que tengo la culpa por ir a ver a Lila, pero no pude irme sin verla.

Trato de conversar con ella, sin embargo, me responde solo con monosílabos, suspiro frustrado por la situación. No quiero que el viaje sea siempre así. No planeaba que fuera así.

Abordamos el avión y ella sigue seria, no digo nada. Me siento a su lado y ella se acomoda y cierra los ojos, cuido su sueño. La observo como un admirador y veo que su cabeza se ladea hacia la ventana, por lo que la tomo y la apoyo en mi hombro, su aroma me hace cerrar los ojos y termino dormido a su lado con mi cabeza en la suya.

Tocan mi hombro y me remuevo por el toque. Abro los ojos y es una azafata la que me esta despertando

- Señor estamos por aterrizar en nuestro destino - dice sonrojada

- Gracias, despertaré a mi esposa - le digo sonriendo

Miro a mi lado y Marinette continúa dormida en mi hombro, acaricio su mejilla y ella se remueve por mi caricia. La veo comenzar a abrir los ojos y le sonrío, ella me devuelve la sonrisa y le digo

- Estamos por aterrizar - ella asiente y se endereza - ¿Todavía estas molesta conmigo? - pregunto nervioso

- No, para nada. Disculpa no tenía motivo para estarlo - me responde sonriendo

Eso me deja pensando, ¿no tenía motivos? No digo nada solo asiento y guardo silencio. El avión aterriza y nos bajamos en nuestro primer destino.

Marinette se ve feliz de ver donde nos encontramos, partimos en México, nos vamos al hotel y miramos la puesta de sol desde nuestra habitación. Pedí una suite que contiene dos cuartos dentro, así cada uno tiene su espacio y podemos compartir en la sala que tiene en medio. Cenamos en la suite, ambos estamos un poco cansado del viaje y mañana tenemos un tour por la ciudad, el que tiene ansiosa a Marinette por los lugares que visitaremos.

Después de cenar nos vamos a dormir, al día siguiente debemos levantarnos temprano para irnos.

En mi cuarto miro la hora y no aguanto irme a dormir sin enviarle un mensaje a Lila, le digo que ya estoy en México y que la extraño demasiado, le recuerdo que la amo y dejo el teléfono cargando para dormir.