108. Libre

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Adrien Agreste

Aun no puedo creer lo que he visto, ese bebé no es mío y yo como idiota pensando en casarme con ella, si ya había notado sus cambios en la forma de ser que tenia le echaba la culpa a las hormonas. Cuando lo cierto es que siempre ha sido así, solo que yo no lo sabia porque me mostraba una faceta que no era real.

Escucho todo lo que dicen, pero mi mente solo recuerda a Marinette, que ahora nada me impide ir por ella y rogarle su perdón,

- Amor no puedes creer todo esto, es una trampa de tu madre que nunca me ha querido - dice Lila llorando

- ¿Quién es el padre? - le pregunto muy molesto

- Tu eres el padre, ese documento tiene que ser falso confia en mi - dice casi arrodillándose

- Ja ja ja no me puedes decir algo así, ¡con que descaro me pides que confíe en ti cuando tu "amigo" se decepcionó al saber que tampoco es su hijo! No quiero ni imaginar con cuantos hombres me has engañado y ¿sabes lo que es gracioso en toda esta situación? ¡Que no me dan celos! Por el contrario, me alivia saber que no mereces mi remordimiento, me hace feliz saber que ahora soy libre de ti y que puedo buscar mi felicidad - le digo sonriendo

- ¿No puedes estar hablando en serio? Yo soy tu felicidad, aun podemos ser la familia que queremos, eres el amor de mi vida y todo eso de que me interesa el dinero no es cierto, ¿acaso no recuerdas que firme el acuerdo prenupcial? - me dice llorando indignada por mis palabras

- Claro que recuerdo, tu enojo al saber de ese documento y tu cambio al firmarlo, siempre he estado ciego cuando te miraba, pero no volverá a suceder. Ahora conozco a la verdadera Lila y créeme cuando te digo que no siento nada por ti, creo que nunca lo sentí solo estaba ilusionado con una mujer que no eres en realidad, me dejé engañar por tu falsedad, pero ya abrí los ojos - le digo serio y con sinceridad

- ¡Esto no me puede estar pasando! - dice mas para ella misma que para mi mientras toma su cabello y camina de un lado a otro

- Esta demás decirte que la casa tienes una semana para dejarla, hablaré con la enfermera y finiquitaré sus servicios, no quiero volver a saber de ti y como regalo por lo feliz que me hiciste al ver tu mentira, puedes llevarte toda la ropa que te has comprado con mi dinero, tu verás que haces con ella - le digo retirándome del lugar dejándola sola y gritando mi nombre.

Llamo a mi amigo Nino, es el único que puede ayudarme ahora con encontrar a Marinette, necesito hablar con ella contarle toda la verdad y rogarle que me perdone.

- Amigo te necesito - digo nada más contesta la llamada

- Estaba esperando tu llamada, ven a mi casa - dice terminando la llamada

En el camino voy pensando en que mi madre dijo que él y Chloe la ayudaron a descubrir todo esto, ¿Cómo no me contó antes de todas las sospechas? Necesito preguntarle esto, pensé que no teníamos secretos entre nosotros, pero me doy cuenta que si, al menos él conmigo.

No tardo nada en llegar a su casa, me abre la puerta. Al sentarnos me doy cuenta de que Alya no esta aquí, mejor aún así podemos hablar tranquilamente.

- ¿Sabias de todo esto y no me dijiste nada? - pregunto incapaz de no hacerlo

- Si, la verdad es que antes de que tu madre comenzará a investigar sobre esa mujer, siempre sentí que algo no andaba bien con ella y no me equivoque. Sobre decirte no quise hasta tener pruebas, cosa que tu madre ayudo y luego le prometí a ella que no te diría hasta tener todos los documentos en mano. Incluso hay cosas que no te dijo porque no eran necesarias - me dice nervioso

- No me vale eso, dime todo lo que sabes - le exijo

- Bueno, cuando estaba estudiando te engañaba, cuando le pagabas el departamento en otra ciudad, luego cuando vivia con el vecino, por eso él tenia la esperanza de ser el padre de ese bebé. Aunque esto lo supe hace dos días, por un investigador que contratamos con tu madre, también sabemos de su familia a los que no ve porque son humildes y sin dinero, su madre siempre ha visto como es en realidad, su padre es ciego por el amor que siente por su hija. Detalles que ahora no valen la pena revelar porque son cosas que no cambian nada - me dice nervioso

- En eso tienes razón, lo importante ahora es que necesito saber donde esta Marinette y como puedo localizarla, necesito hablar con ella - le digo desesperado

- Eso no puedo hacerlo, Alya es la única que puede hablar con ella, ya ni siquiera conmigo habla últimamente - me dice triste

- Entonces llama a Alya, necesito que le diga que la amo más que a nada en el mundo - le digo ansioso

- Mi hermosa esta descansando, esta con dolor de cabeza, por eso esta dormida. No creo que sea buena idea despertarla para decirle esto, ya sabes las hormonas la tiene un poquito enojona - dice tratando de sonreír

- No puedo esperar, pero entiendo que no se encuentre bien y un día más no será tanto, cuando despierte mañana dile que vendré a verla - le digo levantandome para irme

Nino me detiene mirándome y me dice

- ¿Quieres una copa? Creo que te hace falta - asiento y vamos a su despacho

Una copa lleva a otra y otra, perdí la cuenta. Solo sé que estoy riendo como loco feliz repitiendo que soy libre de ir detrás del amor de mi vida, que espero que me alcance la vida para pedirle perdón y que si es necesario le rogaré a diario con tal de tenerla en mi vida.

No sé que hora es, solo sé que me siento liberado de unas cadenas que me tenían prisionero en un lugar donde estaba muriendo de tristeza un poco cada día.

Adaptación MLB || Amor después del divorcio || Adrinette Donde viven las historias. Descúbrelo ahora