Donde estoy?

Cocina 1

Esta es mi primera vez en la cocina 1, que decir, es grande, a diferencia de la cocina 2 donde solo comemos unas 5 personas, de aquí venía la comida resto del castillo y como no podía ser de otra forma, estaba llena de gente. Toda mi fuerza de voluntad se concentró en no mirar todo como si no conociera el lugar.

Al ser tanta gente la comida de la servidumbre se servía en masa para que cada quien tomase lo que quisiera.

Seguí a Elis, y la imité en todo lo que hacía, era la única solución segura en este lugar. Lo que trajo como resultado que comiéramos lo mismo.

Tortilla, pan y ensalada.

Sobre su sabor, estaba bien, nada de lo que quejarme, por supuesto sigo manteniendo que la comida de Beacrox es la mejor.

Nos sentamos en una mesa vacía en una esquina de la cocina, cosa que agradezco, no quería tener que fingir que conozco a alguien aquí.

-Realmente prefiero comer en la cocina 2.- Mencioné, sin pensar mucho en ello.

A lo que rápidamente Elis respondió.

-Lo siento, debimos mejor haber ido allí.

-Oh no, no te preocupes, Beacrox estaba ausente. - Dije rápidamente.- De todos modos, tú qué opinas.

-Ambas cocinas tienen sus cosas buenas, no sabría decidirme por una u otra.

-Elis, eres demasiado diplomática. - La joven sonrió y desvió la mirada.

Por lo que sabía del propio diario, esta chica rara vez decía algo malo de cualquier cosa. Lo que se demostró ser cierto.

Mientras nos concentramos en nuestra cena, se nos acercaron dos sirvientas.

-Buenas Nadya, tiempo sin verte por aquí. ¿Qué tal tu nuevo puesto?

-Claudia. - Le dio un codazo a su compañera.

-¡Que! No he dicho nada. -En medio de algunas risitas se sentaron como si nada al lado nuestro.

-Buenas noches. - Dijimos ambas.

-Pero enserio cariño, ¿Cómo estás?

-Muy bien, gracias. -Dije en un tono formal intentando ocultar mi incomodidad.

-Vamos, vamos, tenemos curiosidad.

'Realmente...'

Las mire un poco aburrida.

-No tengo nada que decir.

-Oh vamos, estas trabajando para la basura del condado, es imposible que no tengas nada que decir.

-Ese es el asunto, no me gusta hablar de la persona para la que estoy trabajando directamente.

*Risitas*

-Vamos, no te preocupes solo estamos nosotras aquí.

Suspiro.

'Enserio ¿no hay forma de que se vayan?'

Lamentablemente no se me ocurrió nada, parece que tuve suerte con las dos anteriores.

Mire de reojo a Elis que había estado callada todo el tiempo, solo seguía comiendo su cena en completo silencio, parecía no querer llamar la atención.

-Escuche que te golpearon.

-Nadie me ha golpeado -respondí de inmediato y continúe- Si eso hubiera sucedido, habría pedido el cambio de puesto.

-Entonces en serio te estás quedando con él por voluntad propia, ¿te dieron un aumento?

-...Si.

No estaba nada cómoda, y ya me estaba arrepintiendo de haber contestado.