'¿Está bien lo que acabo de hacer?'
No pude evitar pensar en ello casi al instante, al dejar la habitación atrás.
Cuánto no le habrá costado a Cale, pedirle a alguien ayuda, cuando no lo ha hecho con Ron, con quien ha compartido prácticamente toda su vida.Me mordí el labio inferior, ya estaba pensando en devolverme cuando llegue a la esquina del Ala.
Frente a mí, podía ver la imagen del pelirrojo con la cabeza agachada y contrariado mientras escuchaba todas las ofensas que profesaban esas chismosas en su contra.
'No está bien'
'No puede estar bien'
Si fuera cualquier otra cosa, habría dicho que sí, sin pensarlo mucho.
Por supuesto que quiero ayudar a Cale, pero no podía aceptar esta petición.
Reuní mi fuerza de voluntad y salí del Ala.
Los susurros me rodearon casi de inmediato.
Un sonido incesante como moscas zumbando, no podía entender nada, pero el ruido simplemente iba en aumento a cada paso que daba.Era angustiante.
Mire al frente con la cara más estoica que pude y caminé con la frente en alto en dirección a mi habitación.
A cada paso el zumbido aumenta.
'No pienses en ello'
'Solo son idiotas'Entre más avanzaba peor era, no tenía punto en comparación al día que llegué y era aún peor de lo que había sentido esa misma mañana.
Ya estaba llegando, podía ver la zona de la servidumbre.
Lamentablemente eso también significaba que el número de sirvientes era mayor y con ello también el ruido.
'Solo ignóralo'
Seguí caminando a un paso el cual intente que fuera constante.
Podía ya no sólo escuchar el chismorreo sino también risas y ver miradas despectivas, sin ningún atisbo de discreción.
'Solo ignóralo'
Solo un poco más.Solo un poco...
De pronto tenía una mano sobre mi hombro.
-Nadya, tiempo sin verte, ¿Por qué no cenamos juntas?
Repentinamente estaba rodeada por un grupo de tres sirvienta, no sabia quienes eran, solo sabía una cosa.
La voz de la mujer que me detuvo, es la misma que dijo que estaba desesperada por dinero, hace solo unos minutos, por lo que posiblemente, las otras dos también eran aquellas sirvientas.-Si, es que he estado muy ocupada últimamente.
-Demasiado diría yo.
Una risita de dios sabe donde hizo eco en mis oídos.
Empezaba a darme nauseas.
-Entonces qué tal si te relajas un rato con nosotras, empezamos a sentirnos un poco olvidadas, sabes.
-Lo lamento, pero no será posible.-Oh no digas eso, no tienes idea de lo preocupadas que nos tienes.
-Cierto, vamos, solo será un rato.-Yo...
-Ah Mmmn... lo siento. Siento llegar tarde Nadya.
Repentinamente otra sirvienta con cabello marrón claro se metió entre nosotras. haciendo una reverencia en forma de disculpa.
'Elis'-No, no llegas tarde, yo acabo de llegar. Lo lamento chicas, ya le prometí a Elis que estaría con ella, puede que podamos cuadrar algo en otro momento.
Tomé a Elis de un brazo como quien sostiene a un salvavidas y me despedí de ellas con una sonrisa y una tranquilidad que no sentía.
-Tendrá que ser otro día. Cuídense.
-Igualmente, cuídate.
Mientras nos alejamos pude escuchar.
-Cuando volvió a acercarse a esa.
-No lo sé.'Esa....'
Estaba molesta, pero también estaba mareada.
Intenté no pensar en nada mientras era guiada por Elis a algún sitio, no sabía a dónde íbamos, pero cualquier lugar era mejor que aquí.
____________________________
Lamento la tardanza!
Pero he vuelto!
Espero que por mas tiempo...
Dando noticias positivas el siguiente capitulo esta prácticamente escrito, así que debería subirlo la semana que viene.

ESTÁS LEYENDO
Donde estoy?
Fantasy¿Dónde estoy? Había terminado su jornada laboral. Recuerda haber tomado el bus hacia su hogar. Recuerda estar leyendo una novela en su móvil. Aun así no estaba ni en su casa, ni en el bus, ni siquiera en el hospital o en cualquier sitio conocido. -¡...