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~Arizona~

Abrí mis ojos con dificultad, la luz blanca atacó mis ojos débiles, no entendía nada, solo estaba en un lugar de cuatro paredes.

Entonces ahí supe, callie está en peligro y yo en una estúpida camilla.

Observé por la ventana y podía ver a mis padres discutir con doctores, luego la puerta se abrió y pude ver cómo entraban ellos.

— Hija ¿Cómo te sientes?

— Como la mierda, Quiero irme ahora - demande, trate de levantar mi cuerpo pero dolía por doquier.

— Cuida tus modales - me regaño mi papá.

Yo solo rodee mis ojos, estaba enfadada con ellos, habían interrumpido mi privacidad y descubrieron lo mío con Callie, ahora tengo miedo a lo que vaya a pasar.

Más porque este es el hospital en el que trabaja calliope.

— Arizona Robbins ¿Verdad? - preguntó el médico y yo solo rodee mis ojos, son preguntas tontas - Estás estable, te quedaras una noche aquí para que te controlen, tienes algunas lesiones en tus huesos pero nada grave, la caída fue dura solo tendrás dificultad en mover tus Articulaciones.

Asentí, solo quería encontrar a Callie.

— En unos minutos vendrán a hacerte chequeos mientras hablo con tus padres - el salió con ellos quedandome sola pero podía verlos desde la ventana.

— Hol-

Era calliope, por fin, ella está en la zona de ortopedia y estaba segura que vendría.

Ella se acercó alarmada, confundida y asustada, aún no sabía de nada.

— Cariño que sucedió? - susurro examinandome.

— Calliope...

— ¿Que sucedió? - Pregunto nuevamente alarmada.

— Ellos lo descubrieron, debes huir - susurré apretando su mano discretamente.

— ¿Que?

— Lo nuestro, debes irte ahora - dije débil.

Mis lágrimas comenzaron a deslizarse por mis mejillas, tenía miedo de no ver más a mi morena.

— Oh...Mierda.

— ¡Vete de aquí! - grite muy débil.

Pero fue demasiado tarde, mis padres se encontraban detrás de ella, comenzaron a gritarle cosas y yo a alterarme.

— ¡Abusadora! - grito mi mamá.

— Irás a la cárcel, pagarás por todo! - está vez fue mi papá.

— Lo siento, pero no es como parece... - trato de hablar pero la interrumpían.

— ¡No me ah echo nada! - grite mientras trataba de ponerme de pie, los cables que tenía conectados se salían de mi piel - Calliope sal de aquí! - grité casi al borde del llanto.

— Arizona... - sus ojos lagrimosos miraban a los míos, mis padres le gritaban infinidades de cosas y más cirujanos se acercaron para detener todo esto, trataban de golpear a callie.

Yo gritaba, lloraba y trataba de explicarles la verdad, ellos no entendían o no querían entender que la amaba, que ella nunca abusó de mí, que nunca haría nada para lastimarme.

Sentía que la perdía a cada segundo, mi alteración era tanta que tuvieron que sedarme, no sabía de mi ni de ella, había muerto por varias horas.

Nunca pensé que tendríamos un último beso
Nunca imaginé que terminaríamos así
Tu nombre, por siempre estará en mis labios

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Es corto pero no quería estar inactiva en este fic.

Actualizare en unas horas, días o maybe semanas.

My first winterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora