Capítulo 28

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-Cierto duende artesano que ya no está-


Registros:

Era anterior: Era de la luz (Avances científicos).

Nueva era: Era de las estrellas (Nace la esperanza).


12 años después. . .

Las áreas de Protección Sobrenatural se habían reparado sólo unos días después de ser destruidas. Después de tanto tiempo, esos mismo espacios cambiaron cientos de veces, la gran sala, que una vez fue la oficina de la segunda fundadora ahora era un corredor principal, algunos pasillos se unieron para formar nuevas alas, pináculos y torres de techos dorados nuevos decoraban los exteriores, dando vida a nuevos talleres privados y aulas de estudio e investigación. Como un gran ser vivo que respiraba, crecía y se modificaba.

En un puesto tranquilo, un joven elfo anotaba las misiones de recolección de llaves de dos artesanos novatos, mientras registraba sus papeles no pudo evitar dejar escapar una suave exclamación, ambos artesanos siguieron la mirada del elfo para encontrarse con la figura de la cuarta fundadora. Se deslizaba por el pasillo en una silla de ruedas, una suave manta de plumas cubría sus muslos y sus suaves rizos dorados enfatizaban su bello rostro. Aunque aún mantenía el mismo rostro, exceptuando sus pómulos más marcados y dos pliegues en los bordes de los ojos, había ciertos cambios en ella, como su porte sereno y maduro que sólo se podían adquirir a través del dolor y la pérdida.

–¿Sr. Elfo? ¿Están listos nuestros papeles?– Para ambos artesanos, fue fácil salir del estupor de ver a un fundador, a diferencia del joven elfo que era un admirador de la diplomática hada.

–¡Ah! Lo siento, lo siento. Ambos papeles han sido aprobados. El sello verde es del área administrativa, deben llevarlo al área de relación y conexiones del tercer piso, ala 3B, para recibir la firma y la calendarización– El joven elfo deslizó ambos papeles con cuidado hacia ambos artesanos. Después de tomarlos, agradecieron al elfo con un asentimiento de cabeza y continuaron según las indicaciones, al pasar junto a la cuarta fundadora hicieron un saludo cortés seguido de una inclinación de cabeza. Notaron a la extraña figura junto a la cuarta fundadora y se retiraron para no interrumpir la conversación.

Al ver partir a los dos artesanos, la cuarta fundadora esbozó una sonrisa nostálgica. Con el peligro pasado, cultivar el área de enseñanzas fue menos laborioso. La persona frente a ella, también dedicó una profunda mirada hacia la espalda de los artesanos que se alejaban. Reconocía ese tipo de gafas, ese tipo de cuerpo manchado de hollín y esos guantes de cuero. Como algo propio, lejano y cercano, un destello fugaz. Al comprender la mirada perdida de Darcy, la sonrisa amable de la cuarta fundadora Helena se tensó, conteniendo la amargura, ¿No prometió ella con arrogancia un futuro para esta pareja de artesano sagrado e Inmortal? Había abierto la boca con facilidad para morderse la lengua doce años después. Ahora el joven frente a ella parecía tranquilo y dócil. Recordó con pesar los primeros meses después de la muerte de Light, el Inmortal había arrastrado sus largos cabellos por todo el Bosque Sangriento en busca de una pista, llenando su cuerpo de barro y sangre. Una vez que fue traído a Protección Sobrenatural, frenéticamente intentó escapar una vez que confirmó que el pequeño duende no se encontraba ahí. Sólo había logrado calmarse una vez que fue llevado al antiguo taller del artesano, durmió acurrucado entre las hojas llenas de trazos, sosteniendo al peluche de la mantícora. Pasó tres meses de esa manera, sin comer, sin dormir, sin moverse. Y de repente, un día común, como cualquier otro, con el mismo sol y la misma triste realidad, se presentó justo como ahora, tranquilo y limpio. La cuarta fundadora quiso evaluar y sondear su salud mental, pero el joven se encontraba rodeado de una aura genuina de serenidad. Al igual que Helena, su cuerpo no cambió, pero parecía más maduro, algo dentro de sus ojos negros era distinto y antiguo. Sin embargo, a diferencia de ella, la serenidad del Inmortal provenía de su desinterés por el mundo.

El duende recolector de llaves y el coleccionista.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora