Una nueva forma de amar.

Sorpresas.

Me despierto son seis de la mañana no he conciliado el sueño, otra vez tuve pesadillas y eso verdaderamente me está jodiendo.

Decido ponerme mi pantalón de chadal y mis tenis salgo en silencio y comienzo a correr siento aún la brisa de la noche combinado con el olor de la mañana, suspiro agotado y me detengo en un parque, sólo hay jóvenes corriendo.
Me apoyo sobre mis rodillas para controlar mi respiración.

-Hola—Dicen cerca de mi alzó la vista viendo quién se dirige a mi

-Hola ¿Cómo has estado?— Ella me sonríe viene con un pantalón pegado y su cintilla en la cabeza

-Bien Abraham ¿Cierto?— Dice yo asiento y trato de recordar su nombre

-Tú eres Raquel sino mal recuerdo— Digo con una media sonrisa

-Así es y aún sigo esperando ese partido— Dice con su perfecta sonrisa joder con tanto trabajo no le tome importancia

-Disculpa he estado muy ocupado pero si quieres te invito un café— Digo mientras tomo un poco de agua para aclarar mi garganta

-Por supuesto ¿Cuándo?— Dice Raquel yo pienso estaré muy ocupado el nuevo proyecto me llevara varios meses

-Ahora mismo si gustas no está lejos— Digo ella alza las cejas sorprendida más vale aprovechar el momento

-Esta bien— Dice yo asiento y comenzamos a caminar serenamente

-¿Siempre sales a correr?— Pregunto para hacer tema de conversación odio hacer esto salir con una mujer y fingir interés

-Diario es una costumbre—Dice relajada—¿Y tu?— Pregunta yo frunzo el ceño y hago un pequeño recuento, pienso que le digo que salgo a correr cuando no puedo dormir por mis pesadillas y mis pensamientos del pasado

-A veces— Decido contestar de manera sería, ella asiente mientras entramos al starbucks nos sentamos y comenzamos a platicar me cuenta que ella trabaja en una empresa y que estudió telecomunicaciones se sorprende cuando le digo que soy dueño de mi propia empresa y cuando se entera de que soy dueño de una de las mejores constructoras se culpa por no haberme reconocido le cuento que tengo varias en otros Estados pero la central en Madrid, hablar de mi trabajo es ameno para mí y el tiempo se me pasa un poco más rápido.

-Espero ese partido— Dice cuando nos despedimos

-No lo dudes— Contestó serio, ella se acerca y me da un beso en la mejilla una sonrisa se asoma en la comisura de sus labios

-Adiós— Dice y comienza a caminar desapareciendo poco a poco.
Yo meto las manos en mis bolsillos y camino serio no estoy acostumbrado a salir por un café como un chaval que quiere conquistar, eso ya no va conmigo me enfado conmigo mismo pero no quiero que se repita.
Cuando llegó a casa mi madre está sonriendo

-He preparado Cup Cakes— Dice con su hermosa sonrisa

-Me doy una ducha y bajo— Digo subo rápido me ducho y me pongo mi traje me acomodo mi cabello.

-Gracias madre— Digo cuando terminó— ¿Y Tony?

-Ha salido, me ha dicho que él llega más tarde a la oficina— Yo asiento y me despido de mi madre que corretea por la cocina.

Entró a la oficina y no tardan en saludarme yo sólo asiento no estoy de humor, subo en el ascensor hasta el ultimo piso donde se encuentra sólo mi oficina y sólo el personal más seleccionado.
Hay otra oficina que nunca quiso ocupar Tony entró rápidamente

-Señor— Dice Santiago antes de que logre entrar a mi oficina

-¿Si?— Digo con poco ánimo, Santiago se pone nervioso

-Lo están esperando— Dice señalando al fondo yo ruedo los ojos y volteo
distingo a Regina sentada en el inmenso sofá que tengo al fondo donde se encuentra el gran ventanal que deja una perspectiva magnífica de la ciudad.

Ella alza la mano tímida lo cual me relaja inesperadamente
Me acerco tranquilo hasta donde está

-Buenos días señorita— Digo alzando la comisura de mis labios

-Buenos días Señor— Dice yo la observo va con un vestido gris tacones negros y con un ligero maquillaje sus ojos son más claros por el reflejo de la luz.

-¿Qué hace aquí?— Digo observando mi Rolex hoy he decidido llegar mas tarde, ¿Cuánto tiempo lleva esperando?

-No me han dicho que tengo que hacer— Dice alzando los hombros yo frunzo el ceño, porque carajo no le han dado indicaciones o mínimo el recorrido necesario dentro de la empresa, pero sabrán de mi más tarde ahora mismo debo atenderla

-Pase a mi oficina— Ella cuidadosamente se levanta y comienza a andar de mi lado yo sonrió le abro la puerta y la dejó pasar— Tome asiento—Digo señalando un pequeño sofá-¿Gustas algo de beber?— Pregunto mientras camino a mi pequeño bar

-Un poco de agua por favor— Dice con esa voz melodiosa camino sereno tomo dos vasos y los lleno de agua

-Aquí tienes— Le entregó el agua y me siento en el sofá frente ella observo como le da un sorbo ligero me da tiempo de verla detenidamente, cuando se percata de que la estoy observando se sonroja— Bueno yo te he elegido principalmente cómo te comenté para un proyecto en Cuernavaca— Me levanto y tomo el archivo que contiene
Imágenes del terreno, se lo entregó ella cuidadosamente pone su vaso en la pequeña mesa y empieza observar

-¿Qué se va a construir?— Pregunta curiosa al ver las imágenes

-Un club deportivo— Digo mientras bebo de mi agua—¿Alguna idea?— Pregunto esperado escuchar algo de su inteligente boca

-Demasiadas— Dice sonriendo lo cual a mi me hace mejorar de humor este proyecto va demasiado atrasado y necesito poner agilidad

-Le gustaría decirme— Digo serio mientras me acomodo con naturalidad

-Me gustaría plasmarlo— Yo observo mi área de trabajo al fondo de mi amplia oficina.

-Eso me parece perfecto pero— Ella alza la vista

-¿Qué pasa?— Dice observándome con mirada curiosa

-La mayoría de mi equipo está disperso en varios proyectos he aprovechado el tiempo para remodelar las oficinas en el piso que es especialmente para mis diseñadores — Me quedo pensativo busco una solución y una media sonrisa se forma en mi rostro

-¿Sucede algo?— Pregunta después de unos segundos

-Trabajarás aquí— Digo seguro y sin ninguna emoción en mi rostro ella abre los ojos

-No puedo invadir su espacio señor— Dice alerta yo alzó los hombros para restarle importancia

-Es por unos días mientras acondicionan una oficina para ti— Digo satisfecho ella me observa y por un momento se que quiero observarla y poder conocer como es.
Si quiero conocer la sorpresa, primero tengo que abrir la caja y está es una oportunidad para descubrir que sorpresas guarda Regina.