Sedιeɴтα de тι© |JJK| >>+18

~VEINTIDÓS~

~❣️~

Deseé por dentro qué por nada del mundo Jungkook se despertará y fuera en mi búsqueda al no encontrarme acostada a su lado. Todos los vampiros del evento de Drácula piensan que Taehyung es mi único siervo y me gustaría mantenerlo así, aunque con la visita de este vampiro me será imposible esconderlo. 

— En el aire se respira un aroma muy embriagador— apreté mi cuerpo al escuchar la voz del Conde Namjoon a mis espaldas. 

Justo a eso me refería. 

— Me alegra que le guste— traté de sonar casual y los llevé al ala oeste del castillo. 

Ahí estarán más alejados de mi habitación y por supuesto de la de mis siervos. No los quiero para nada cerca mio cuando sea de noche. 

— Es raro no ver a tu siervo por tu alrededor, su aroma decía mucho acerca de ustedes esa noche— suspiré levemente al captar el tono. 

No voy a caer en sus provocaciones. 

— Qué te haya dejado pasar no quiere decir que tenga que brindarte mi información, ¿sabes?— me detuve en la última habitación del fondo del pasillo. 

Gracias a mis empleados qué tiene todas las habitaciones limpias puedo darle cualquiera del castillo. Y qué mejor que la que está más lejos. 

— Ja, eres igual de paranoica qué Drácula— sonó risueño y fruncí el ceño. 

Que comparación tan desagradable. 

— Pueden pasar la noche aquí— abrí la habitación y de inmediato entró el siervo antes que el Conde. 

— Pero no hay ningún olor qué se le compare al tuyo, Daena— sentí mi piel erizarse al escuchar la voz del vampiro susurrando a mis espaldas. 

Me retorcí en mi sitio al sentir la sensación de su voz viajar por mi cuerpo. Que horror. Entré después de ellos y Kang ya había prendido algunas velas. 

— Su castillo en verdad es enorme señorita Daena— reí entre dientes al escuchar a su siervo fascinado. 

Esté parece más amigable que la chica anterior aunque claro, el beneficio de la atracción no se le compara a ningún siervo. Dudo mucho que esté chico sienta algo por el Conde y le brinde el beneficio qué perdió en aquella velada. 

— Kang, deja de abrir la boca— el chico se ruborizó y solo entró en el baño qué tenía la habitación—, perdóname, es un principiante— sonó cansado y me miró. 

— Oh, tranquilo Conde, no prejuicio tus modos— sonreí de lado y me sorprendí de estar tan relajada. 

— Por favor, estaré más a gusto si quitas el título, puedes llamarme Namjoon o Nam si lo prefieres— sonrió coqueto y me sentí un poco intranquila. 

— Bien, espero que mi hogar les pueda ser caluroso esta noche aunque sinceramente prefiero dejarlos afuera y que los lobos te coman— fui totalmente irónica y el vampiro abrió los ojos. 

— ¿Drácula los dejó ir?— aquella pregunta me borró la sonrisa de la cara. 

Así que Lisa tenía razón, ¿cómo es que están bajo su control? 

Y parece que se dio cuenta de lo que dejó escapar, lo miré con la interrogante en la cara y solo procedió a sonreír. 

— No cree que ya debería de ir a su habitación, mi Lady— me sobresalte al verlo acercarse a mí—, estoy muy seguro que debajo de esa pequeña tela no hay nada más que piel, ¿no es verdad?— sentí la cara arder de vergüenza.