~SEIS~

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~❣️~

Era Drácula. Ambos giramos nuestras miradas a aquella voz, sentí frío al mirarlo delante mía. ¿Qué hacía aquí? Mis ojos viajaron al rostro de Jimin, parecía confundido. 

— ¿Y él es… ?— el rubio me miró para darle una respuesta. 

Me quedé muda al no saber qué decir. ¿Aún no lo conocían? ¿Entonces como saben de nosotros? 

— Soy su padre, un gusto joven— fruncí el ceño en su dirección. 

— No lo eres— dije de inmediato con los ojos fruncidos. 

— Soy tu padrastro pero te crié y te cuidé como si tu fueras mi hija, mi propia sangre— dijo con tono autoritario y bajé la mirada a sus palabras. 

En eso tenía razón y no podía ponerme al tú por tú con él, estoy sola. Aparte no me sentía nada cómoda con un asesino de vampiros y un antiguo vampiro a mi alrededor. A pesar de tener tantas décadas vivo su apariencia es de un joven de 27 años apuesto y alto. 

— Un gusto señor— contestó Jimin a Drácula. 

— Oh por favor llamame Jin— Drácula sonrió y lo miré curiosa de que le diera su verdadero nombre. 

No le gustaba que nadie lo llamara así, salvo yo, cuando era su sierva. Y más si era su apodo.

— Oh claro— Jimin se puso nervioso y le tendió la bolsa del traje. 

Drácula la aceptó y sonrió en mi dirección, no, no, no quería estar a solas con él. 

— ¿Nos vamos Daena? Tenemos mucho de qué hablar— cerré los ojos al escuchar mi nombre de sus labios. 

Drácula caminó en dirección contraria de donde venía, miré a Jimin y le sonreí en disculpa. 

— No te preocupes, ya nos veremos cuídate— dijo antes de que pudiera dar marcha. 

— Gracias, nos vemos Jimin— y apresure mi paso para ponerme al lado del Conde. 

Este comenzó a reír al ya estar lo bastante alejados del pueblo, fruncí el ceño en su dirección y me miró de reojo. 

— ¿Te diviertes con los humanos? ¿Te hace recordar los viejos tiempos?— su tono de voz serio me hizo estremecer. 

— S-solo fui a comprar lo necesario para tu velada— regresé la vista al frente. 

Nos comenzábamos a alejar más del pueblo. ¿Por qué demonios vino? 

— Oh, espero verte encantadora, vas a ser la primera en beber de mi nuevo siervo— aquello revolvió un poco mi estómago. 

Traté de relajarme y parecer indiferente a lo que dijera. 

— ¿Por qué apareciste de repente?— pregunté curiosa. 

No puedo creer que Jimin se tragara el cuento que se inventó. 

— Necesitaba entregar la invitación oficial— me mostró una pequeña caja aterciopelada color rojo. 

— ¿Invitación oficial?— repetí confundida y el joven apuesto me mostró los colmillos. 

Sentí frío al verlos y este río de inmediato. 

— Tranquila aún no pienso hacerlo— su susurro aceleró mi corazón—, te la llevé al castillo pero todo estaba hecho un desastre— suspiró—, tus siervos casi, casi se estaban matando y nadie sabía donde estabas. 

Sentí remordimientos creciendo dentro de mí, sabía que no tenía que irme así y menos como terminaron las cosas la última vez que nos vimos. No pude evitar suspirar al pensar en ellos, tarde que temprano se tiene que enterar Jungkook y sé que no le va a agradar para nada. Él quería ser el único para mí y sólo el único. 

Sedιeɴтα de тι© |JJK| >>+18 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora