OMEGACEMBER 2023 // Desafío aldoriana

7. C E L O S

Celos :: (Deseo)

Pues celos en sí, de ti dependerá qué tan oscuro quieres que sea. Si eso evoca miedo, sumisión o competencia...

۵

Aldo salió de su habitación en silencio y caminó hasta la cocina, encontrándose con Osvaldo preparando el desayuno. El alfa lucia animado, meneando las caderas al ritmo de una canción de reggeton que se reproducía desde su celular.

Se rió un poco ante la imagen, llamando la atención de Osvaldo el cual giró a verle sonriente.

— ¿De qué te ríes pendegeo? — expresó risueño.

Aldo soltó una carcajada más ruidosa mientras se acercaba al alfa para rodearlo con sus brazos por el cuello y besarlo.

— De que te ves muy lindo bailando. — beso en los labios. — Buenos días.

Otro beso en los labios.

— Buenos días, omega. — Y otro beso más.

Si así de acaramelados eran ahora, no podía imaginarse como serían cuando estén enlazados. Aldo se separó del alfa para permitirle seguir haciendo el desayuna y se sentó en la barra de la cocina. Sólo cuando estuvo cómodamente sentado en la silla alta de la barra recordó el porque había llegado a la cocina con sigilo: el clip de Barca.

— Am, ¿y cómo dormiste hoy Valdo? — empezó el omega, queriendo saber si el alfa había visto o no el clip. — ¿Viste algo interesante durante la noche?

Osvaldo le miró con una ceja alzada mientras ponía un plato con huevo revuelto frente a él en la barra.

— ¿Interesante en qué sentido?

Aldo se encogió de hombros sin saber como proceder realmente.

— No sé, algún clip de Twitch interesante o alguna película. — respondió el moreno y en automático se golpeó mentalmente, ahora seguro levantaría alguna sospecha.

— La verdad no, estuve viendo memes en facebook hasta que me dormí. — respondió Osvaldo con un sonrojo en sus mejillas, creyendo que Aldo había escuchado lo que verdaderamente había estado viendo.

A menos que Aldo lo dijera directamente, él nunca admitiría que había estado viendo porno alfa-omega por el placer perverso de imaginarse a el mismo follándolo.

Soy un pervertido, pensó Osvaldo.

Aldo soltó un suspiro y tomó una decisión. Después de todo Osvaldo tenía derecho de saberlo y que mejor que lo sepa de el mismo, igual Aldo no había hecho nada malo ni le había dado a entender a Diego que le iba a dar entrada. Así que tomó su celular, abrió el clip desde el chat de Sebastian y se lo mostró a Osvaldo.

— ¿Qué es esto Aldo? — preguntó extrañado mientras tomaba el celular ofrecido.

— Solo ve el clip, no es nada malo realmente pero creí que sería bueno que lo vieras y supieras. — Osvaldo asintió y observó todo el clip, cuando este acabó le tendió de regreso el celular al omega y soltó un suspiro, pero no dijo nada.

— Di lo que piensas, alfa. — dijo suavemente Aldo, extendiendo su mano hasta rozar suavemente el dorso de la mano del alfa que estaban en la barra.

— No hay mucho que decir. — expresó Osvaldo casi en un gruñido, claramente molesto. — Sólo sé que le quiero arrancar la garganta de una mordida a ese estupido y pretencioso alfa, ¿quién se cree para pensar que puede quitarme a mi omega?

— Es nuestro amigo, Osvaldo. — empezó Aldo pero guardó silencio en cuanto vio la mirada que le dedicaba el alfa al decir aquello. — Sólo digo que quizás solo es necesario aclarara que ya me estás cortejando tú, eso es todo Valdo. — terminó de hablar con las manos en alto, permitiendo al alfa que se acercará a él y se abrazará a su cuerpo, escondiendo su rostro en el hueco de su cuello y enterrando su nariz en u glándula de olor.