Dámaso
Aparto la silla para que Kala tome asiento, yo me posicionó frente a ella y le damos nuestra orden al camarero.
-¿Cómo ha estado tu día?- intento establecer una conversación
-Bien, muy bien la verdad; envié a los tribunales la evidencia contra unos corruptos y ayude a una compañera de trabajo en un cazo sobre una mala inversión- sonríe llevando uno de sus mechones rubios tras de su oreja -Y un atractivo hombre llegó a mi oficina-
Sonrió encantado por sus últimas palabras -me alegro por ello-
-Y después llegaste tu-
Mi sonrisa se borra y ella suelta una suave carcajada, toma mi mano por encima de la mesa y la dirije a sus labios. Deja un pequeño beso y veo su rostro sonrojarse.
Quedó anonadado por su acción ya que me parece de lo más tierno.
-¿Cómo ha estado tu día?- pregunta regresando nuestras manos unidas sobre la mesa
Aprieto nuestro agarré -Tranquilo, mañana debo de ir a verificar unos negocios a uno de mis hoteles pero nada relevante -
Ella asiente ante lo que digo. Es tan bonita, me gusta tanto no solo por su físico porque soy más que conciente de lo bello que es su corazón.
-me alegra saber que ahora me permites invitarte a salir-
Se encoje de hombros -Ya paso un tiempo desde el juicio, en si nunca me importó el que dirán pero no quiero perjudicar mi perfil profesional -
-mi madre sigue insistiendo en que te quiere conocer -
Es cierto, hoy antes de salir me recordó que no me dejara tranquilo hasta hablar con su nuera.
-¿Crees prudente que me conozcas? Digo, al fin de cuentas no somos pareja-
Siento un ardon en el estómago ante sus palabras pero me obligo a sonreír
-Eso ella ya lo sabe pero parece no importarle-
-Por mi no hay problema, me has hablado muy bien de tu madre y de tu hermana, talvez nos lleguemos a llevar bien-
-Creeme les vas a encantar- aseguro
-No quiero espantarte- dice de forma tímida- pero me gusta pasar tiempo contigo, y que hablemos así sin formalidades -
-A mi también me gusta estar contigo-
El camarero llega con nuestros platillos y comemos intercambiando opiniones, ahora su risa es más usual en nuestras conversaciones y su sonrisa ya la conozco de memoria.
-¿Qué harás el resto del día?- pregunto cuando terminamos de comer
-pensaba en ir de compras-
-¿Te molesta si te acompaño?-
-¿No te vas a aburrir? Creeme yo de compras soy algo peligroso de ver- me advierte
-creo que me arriesgaré -
Pago la cuenta y así nos dirigimos al centro comercial.
Cuando Kala me advirtió que verla de compras era algo peligroso no creí que me lo dijera en serio.
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Arma Blanca (Libro 1)
RomanceLo peligroso es atrayente. Está historia es de mi propiedad y completamente ficticia, cualquier parentesco con la realidad es mera coincidencia. Primer libro de la saga "Armas de fuego"