Un sueño de Aziraphale

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Aziraphale Patito

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Aziraphale Patito.

Aziraphale Patito

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Crowley Patito.

📌 Aziraphale y Crowley patitos.
📌La historia se desarrolla dentro de un sueño de Aziraphale.
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Aquella noche Aziraphale se fue a dormir temprano, tenía su pijama listo y acababa de tomarse su taza de leche con chocolate, tenía una cita importante al día siguiente con Crowley y no quería llegar tarde. Se acostó en su cama, apagó las luces de noche y se durmió unos minutos después.

Todo parecía ir en calma hasta que comenzó a tener un raro sueño.

Era un pato blanco, llevaba un corbatín y paseaba por el parque saludando a otros patos, en eso estaba cuando un pato de plumaje oscuro y cabeza roja, con gafas negras le pasó a toda velocidad por al lado. Gritaba a unos humanos que no le dieran pan a los demás, gritaba y picoteaba, aleteando con furia, las personas dejaron de lanzar migajas de pan a lo otros patos alejándose del problemático.

Aziraphale se acercó al pato con gafas, ¿un pato con gafas? ¿Cómo las sostiene si no tiene orejas? Bueno, es un sueño, en los sueños todo es posible. El pato blanco se acercó al otro dándole un golpecito con su ala a modo de saludo, este se dio vuelta acomodando sus lentes.

— ¿Crowley? —el otro asintió—. ¿Por qué estabas molestando a los humanos?

— Ellos me estaban molestando, a mi y a los otros patos —refunfuñó—. ¿Estás listo para nuestra cita? Encontré un buen lugar para almorzar.

— Oh, la cita, verdad que sí —dijo buscando entre sus plumas—. Conseguí este boleto para conseguir frutas.

— Oh vaya, que genial, busquemos las frutas y vamos a comer.

Los patitos se fueron hacia la dirección que había en el boleto, era una feria de frutas y mientras Aziraphale se paseaba por entre los transeúntes atrayendo a estos con su graznido y bonito plumaje, entreteniendo a los humanos para que Crowley robara las frutas que se llevarían. Cuando el pato con gafas obtuvo una bolsa con variados alimentos comenzando a correr y luego a volar, el pato blanco hizo lo mismo saliendo de allí y sorprendiendo a todos, un par de patos estrategas.

Volaron hasta llegar a un lugar apartado, habían muchos árboles y un lago, sobre el pasto verde había una manta donde ellos aterrizaron, el pato con gafas oscuras acomodó las frutas y semillas sobre un plato plástico, y mientras el pato blanco se acicalaba el otro cortaba unas flores. Tras estar todo listo Crowley le dio las flores a Aziraphale, poniéndolo todo nervioso.

— No hacía falta querido, muchas gracias es un lindo detalle —tomó las flores con su pico poniéndolas a su lado.

— Escogí tus frutas favoritas, espero te gusten.

— Me encantan, comamos ahora, antes de que vengan a molestar.

Crowley asintió comenzando a comer, tras el almuerzo reposaron tumbados en la manta y más tarde nadaron por el lago, Crowley incluso dejó que Aziraphale se subiera en su espalda y lo llevó por el lago. Era una linda cita, y los humanos presentes les tomaban foto hablando sobre aquellos patos.

Aziraphale despertó con el sonido de la campana de la librería, ¿todo aquello fue un sueño? Si, sin dudas fue el más bonito que haya tenido. Se levantó arreglándose rápido y bajó, viendo a Crowley con una canasta de picnic en su mano, mostrándole esta a Azira.

— ¿Quieres ir a una cita en el parque? Una día de picnic, ¿te parece?

— Oh querido, acabo de tener un deja vu —rió Zira, haciendo a Crowley dudar—. Es que tuve un sueño...

Comenzó a explicarle mientras se dirigían al Bentley, estaba seguro de que Crowley se reiría mucho con aquél sueño

One Shots Good OmensDonde viven las historias. Descúbrelo ahora