Castigo

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— A ver Jim, si dos y dos son cuatro, y cuatro y dos son seis ...

— Seis y dos son... No, no me lo sé, ¿me lo repites?

— ¡Carajo! Ya son las diez de la mañana y sigues sin aprenderte esa porquería —dejó los libros sobre la mesa, palmeando la tapa de uno—. Olvídate de eso, las mates son un asco, ahora lee estos libros y escribe un resumen de cada uno.

— Siento que me estás castigado, Crowley.

— Si, por irrumpir anoche en la habitación de Aziraphale, ¿o se te olvida que nos arruinaste el momento y tuvimos que ir a tu habitación a matar un insecto?

— Era una cucaracha voladora, además tu gritaste "Ángel, ángel, m4ta ese bicho, viene hacia mi"

— Me vas a hacer dos resúmenes, de cada libro.

Concluyó, apartándose de Jim en tanto este le observaba con fastidio.

One Shots Good OmensDonde viven las historias. Descúbrelo ahora