CAPÍTULO 27: CLÁSICO

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*Los resultados de este partido son ficticios, así como en los demás de la historia he ido en orden cronológico con los partidos de la liga de la temporada pasada, en este en concreto tomo como referencia el partido de la Supercopa*



VALENTINA


Me sudaban las manos y tenía escalofríos a pesar de que en Madrid estuviese haciendo un frio que pelaba. Estaba nerviosa, demasiado a decir verdad.

En parte por que tenía miedo de que 'mi plan' no saliese cómo esperaba, al fin y al cabo esto no dejaba de ser un clásico y el Real Madrid era nuestro rival más fuerte.

Tomé el asiento que me correspondía en la grada y me dediqué a observar cada minúsculo detalle a mi alrededor.

Los jugadores de ambos equipos empezaron a salir poco después desde el túnel de vestuario.

Inevitablemente me fijé en él (cómo siempre, a quién vamos a engañar).

Gavi ya tenía puesta su ''Cara de enfado'' como era costumbre, miraba hacia las gradas pero no como si buscase a alguien, me encantaría decir que en medio de tanta gente nuestras miradas se encontraron, pero no fue así.

El partido dio comienzo y desde el minuto 1 ambos equipos empezaron a correr con agilidad y energía.

Estaba tensa, muy pero que muy tensa, y no podía dejar de mirar el dorsal de Gavi y visualizar cada uno de sus movimientos. 

En el minuto 5 Pedri lanza el balón buscando un remate que no sale, pasan cinco minutos más, Balde conecta una jugada con Gavi y este lanza el balón hacia Lewandowski, inevitablemente me pongo de pie esperando el gol, pero se va al palo.

Maldigo por lo bajo y vuelvo a sentarme, pero dos minutos más tardes vuelvo a estar al borde del infarto, Pedri le da un pase directo a Gavi, Gavi coge carrerilla y avanza hacia la portería, recorta en cuanto se le echan encima tres jugadores del Madrid y se la pasa a Lewandowski, este dispara, pero rebota en las manos de Curtois, Balde aprovecha la oportunidad pero aún así Curtois vuelve a parar la pelota.

El partido avanza, siguen habiendo tres o cuatro ocasiones claras que no tuvieron remate y no ayuda nada que el Madrid lo esté dando todo y que haya tenido también ocasiones en nuestra contra.

Y lo voy a decir, no me escondo, me he mordido todas y absolutamente cada una de mis uñas de las manos, este partido tiene que salir bien, es que no hay de otra.

Justo sobre el minuto 32, cuando estaba al borde del colapso, se produce una jugada que me mantiene eclipsada hasta su finalización:  Rudiger le hace un pase a Camavinga, que es acorralado por dos jugadores del Barça, Dembelé y Busquets que se la pasan rápidamente a Pedri que avanza la jugada rápida hacia Lewandowski y que se la quita de encima rápido pasándosela a Gavi.

Gavi patea el balón rápido, fuerte y con determinación y acaba entrando a la portería por el lado derecho.

En cuanto se da cuenta de que el balón ha entrado sale corriendo hacia la banda y empieza a celebrar y a gritar con sus compañeros.

¿Y yo cómo estoy?.

Pues no me he tirado al campo de milagro, he gritado como nunca antes, he saltado en la grada como la que más.




PRÓRROGA-PABLO GAVI-PAUSADA/EN EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora