Capítulo 01

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—Mi amor, Taehyung, despierta cariño, llegaremos tarde al trabajo— el alfa movía a su omega, que estaba arropado con las sábanas.

Su llamado no dio resultado, así que agarró las sábanas y las deslizó fuera del menudo cuerpo, cargándolo, para dirigirse hacia la tina. El alfa tocó el agua tibia y su piel se relajó, con cierto cuidado se posicionó con el omega aun en sus brazos.

Taehyung se removió y empezó abrir lentamente sus ojos, no se asustó al sentir el agua, porque sabía que su alfa nunca lo lastimaría.

—Alfa, buenos días— lo saludó con una sonrisa.

—Buenos días mi amor, mi cosita dormilona— se acercó y besó los labios del omega.

—¿Hoy también me bañaras?

—Sí, mi amor precioso.

—Te amo, alfa— acarició el rostro marcado de su pareja.

Jungkook no tardó en tomar los labios del omega.

Luego de unos minutos se separó del beso, dejando los belfos de Taehyung rojos y abultados.

—¿Qué quiere comer hoy mi precioso omega?— preguntó empezando a enjabonar el cuerpo.

—Panqueques y juguito.

—Está bien, cariño.

Jungkook terminó de bañar a Taehyung y lo sacó de la tina, para proceder a colocarle la bata blanca y sentarlo en el banquito pequeño.

—Terminaré de bañarme mi vida— fue a la ducha.

Taehyung con una sonrisa veía el cuerpo desnudo de su alfa, tan fuerte y musculoso.

Una vez bañado, Jungkook salió del lugar con Taehyung en brazos, se cambiaron y fueron a la cocina.

—Preparé la mezcla, cariño, me alcanzas la harina, por favor.

—Enseguida, alfa— fue por la harina, que estaba en la encimera y le entregó.

—Gracias.

—Alfa, picaré un poco de duraznos.

—Con cuidado, cariño.

Taehyung, empezó a picar los duraznos con cuidado de no cortarse, no era muy bueno utilizando los implementos de la cocina. Desde que nació había tenido empleadas, pues su familia contaba con una buena economía, pero todo eso cambió cuando conoció a Jungkook y decidieron casarse.

—Tae— llamó Jungkook, viendo a su omega en otro mundo —Cariño, ¿estás bien?

—Oh, estoy bien— le sonrió.

—Cierra los ojos— el omega obedeció. Mientras tanto Jungkook fue hacia la nevera y sacó una fresa —Abre tu boquita— vio como su omega abría su boquita y no dudo en colocar la fresa entre los labios rosaditos.

Taehyung apenas y saboreo la fruta salió corriendo de la cocina. El alfa asustado fue detrás del omega que se había dirigido al baño.

—Cariño— abrió la puerta, viendo a Taehyung arrodillado e inclinado en el escusado, no dudo en acercarse —¿Qué sucedió? ¿te encuentras bien?— le empezó a frotar la espalda, al darse cuenta que su esposito había vomitado.

—A-alfa— miró a Jungkook con sus ojitos brillosos y se recostó en su pecho.

—Todo está bien, cariño, ya pasó— depositó un beso en la cabello castaño y empezó acariciarlos suavemente —Cariño, lávate esa bonita carita y los dientecitos— apretó el botón del escusado.

Unos minutos después, Taehyung terminó de lavar su carita y sus dientes —Listo, alfa.

—Ven aquí— lo cargó entres sus brazos, sacándole una sonrisa.

—Te quiero— dejó un besito en la mejilla de Jungkook.

Nuevamente regresaron a la cocina, Jungkook ocupándose de hacer los panqueques. Mientras Taehyung terminaba de hacer el jugo de durazno.

—Veo que últimamente te gusta mucho el durazno.

—Sí, alfa, me gusta mucho.

—Perdón por darte la fresa, cariño, es tu fruta favorita, solo quería consentirte.

—No te preocupes, alfa, me gusta la fresa y mucho, pero últimamente tengo mucho asco al probarla.

—¿Será qué tu celo se adelantará y por eso estas quisquilloso con la comida?

—No lo creo alfa, mi celo fue hace dos semanas, sería muy pronto, tal vez solo me cayó mal.

—Bien, pero si sigues igual iremos con el doctor.

—Está bien— dejó el jugo en la mesa y fue al lado de Jungkook —Umm, huele delicioso, eres el mejor chef Jungkook.

—¿Jungkook?— lo observó con una de sus cejas alzadas.

—No me mires así alfa, ese es tu nombre "Jungkook".

—Está bien, Taehyung— colocó todos los panqueques en el plato y los dejó en la mesa —Siéntate, serviré el jugo.

Taehyung, cabizbajo tomó asiento y empezó a comer un panqueque sin ganas.

Conforme iban comiendo la tensión aumentaba, tanto alfa y omega estaban totalmente callados.

—Terminé, alfa, estaban deliciosos— se levantó, llevando su plato al fregadero.

—Me alegra que te hayan gustado, Taehyung.

Esa última palabra fue la gota que derramó el vaso o bueno lágrima.

Taehyung empezó a llorar y fue corriendo a su habitación, no le gustaba que su alfa lo llamara por su nombre.

Por otro lado, Jungkook estaba caminando de un lado a otro en la cocina, moría de ganas de ir con su omega, para nada le gustaba que lloré y mucho menos si quien le ocasionaba el llanto era él, pero parte de su orgullo le decía que no vaya, estaba molesto con su omega por llamarle por su nombre, desde que se casaron se llamaban con apodos lindos. Después de unos minutos ya no aguantó más y fue hacia donde estaba su omega, abrió la puerta y lo observó recostado en la cama aun llorando.

—Mi amor, mi vida perdóname— fue hacia la cama y se recostó al costado de Taehyung —Por favor, perdóname.

El omega sollozaba sin decir nada, aunque quería lanzarse a los brazos del alfa, era muy caprichoso que a pesar que él fue el primero en llamar por su nombre al alfa no le quería disculpar fácilmente.

—Tae, mi vida, perdóname por favor, lo siento tanto, soy un alfa estúpido por hacerte llorar— se pegó más al cuerpo, quedando en posición de cucharita.

—Te perdono, Kook— se dio la vuelta quedando cara a cara con Jungkook —También perdóname por llamarte por tu nombre, Alfa, solo que hace mucho no te llamaba así.

—Te perdono mi amor, y ahora entiendo que solo querías llamarme por mi nombre, tal vez exageré todo.

—El exagerado soy yo, por ser un llorón.

—Dejemos el tema atrás.

—Está bien, pero prometo llamarte de forma cariñosa.

—También lo prometo mi amor, nos dirigiremos con apodos bonitos— se acercó a los labios contrarios —¿Qué te parece si nos reconciliamos?— habló con una sonrisa ladina, mientras se colocaba encima de su omega.

—Hoy llegaremos tarde al trabajo, Jungkookie~

°°°° Bebé °°°°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora