Capítulo 12

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Jimin mantenía su mirada fijamente en los documentos que estaba leyendo detenidamente, el nuevo proyecto que estaba organizando su hermano era muy interesante y podía asegurar que sería muy productivo.

—Jimin— entró Yoongi con su Tablet en su mano, respirando profundo para llenar sus fosas nasales del aroma del omega —¿Me mandaste a llamar?

El omega levantó la mirada, viendo al alfa muy guapo con ese traje negro que se ajustaba a su cuerpo y se marcaban sus músculos. —S-si, mañana llegarán de china las telas y necesito que vayamos a revisarlas.

—De acuerdo, mañana pasaré a buscarte— habló, mirando como Jimin frunció su ceño.

—No es necesario, tengo coche y puedo manejar— fingió una sonrisa.

—Solo decía, además sería innecesario ir cada uno en su coche, podemos ahorrar gasolina— argumentó, en realidad quería pasar tiempo con el omega.

—Está bien está bien— se sacó sus lentes, viendo como su secretaria entraba con una bandeja en sus manos.

—Aquí está su pedido Señor Jimin— dejó en la mesa la bandeja.

—Gracias— sonrió a la chica que pasaba a retirárse.

Yoongi empezó a mover su nariz, ante el aroma para nada agradable que salía de ese palto. —Creo que la sopa está descompuesta— se acercó a verificar el platillo.

—Está deliciosa— probó una cucharada —¿Qué te pasa? ¿Estás bien? — preguntó, al ver como el semblante del alfa se volvió pálido.

—Y-yo no tolero el aroma— llevó sus manos hacia su boca, dándose la vuelta y corriendo hacia el baño.

Jimin al verlo correr sin decir más, salió corriendo detrás, encontrándose con el alfa hincado en el retrete.

—¿Estás bien?— preguntó, mirando desde la puerta.

—S-si, no sé que me pasa— se dio la vuelta, mirando al omega.

—Tal vez no te guste la sopa de algas, sabes, a mi tampoco me fascina mucho, pero justo hoy se me antojó.

—Es normal, muchas veces cambiamos de opinión— caminó hacia la puerta, no pudiendo pasar pues Jimin estaba allí y podía sentir su aroma a caramelo más de cerca. Suspiró profundo, llenando sus fosas nasales del rico aroma, sintiéndose un poco más relajado.

—S-señor Min— tartamudeo, viendo como el alfa se había acercado a su cuello y olfateaba su glándula de olor.

—No te muevas, por favor— susurró totalmente embobado, agarrando la cintura del omega, pegándose más a su cuerpo.

—Basta, ¿Qué hace? — alejó al alfa con sus manos, confundido ante la acción que alteró las palpitaciones de su corazón.

—Perdón, y-yo...— bajó su mirada sin saber que decir, se dejó llevar por el embriagante aroma —Tu aroma es delicioso.

—Gracias, me lo han dicho.

—¿Quiénes? — preguntó firme, alzando una de sus cejas.

—No te importa— habló juguetón.

—Claro— salió del baño con enfado , dejando a Jimin sorprendió.

—Estúpido— sonrió victorioso, según la cara que puso el alfa, pudo deducir que estaba celoso.

Contento de su logro regresó nuevamente a su oficina, empezando a comer la sopa de algas que estaba deliciosa, qué al terminarla decidió llamar a su secretaria.

—Señor, me mando a llamar— entró una señorita con coleta alta y un vestido muy corto.

—Hola ¿Quién eres tú? ¿Dónde está Ji-Hye?

—Ella dejó su puesto y la estoy reemplazando, su alfa se accidentado y a tenido que ir al hospital.

—Comprendo ¿Cómo te llamas? No te he visto por aquí ¿eres nueva?

—Me llamo Momo y soy la nueva secretaria del señor Min Yoongi— hizo una mueva de desagradó al acercarse al escritorio del omega castaño y agarrar la bandeja.

—¿Pasa algo?— levantó una ceja, no le gustaba la expresión de la chica.

—¿Usted es pareja del señor Min?.

—¿Qué cosas dices?— sonrió nervioso.

—Tiene impregnado en su cuerpo el aroma de mi jefe— le señaló.

Jimin empezó a oler con detenimiento, comprobando que tenia el aroma de chocolate y canela en su cuerpo.

—No me había dado cuenta, debe ser que tengo su aroma porque estuvimos coordinando algunas cosas juntos. Puedo preguntarte algo— la chica asintió —¿Eres beta, no puedo detecto tu aroma?

—Soy una omega, con respecto a mi roma el señor Min me pidió suprimirlo, bueno...me retiró.

La secretaría salió de la oficina moviendo sus caderas de un lado a otro, con una mueca de desagradó en su rostro. Dejando a Jimin pensativo ¿Por qué Yoongi le había pedido a su secretaria ocultar su aroma?

Durante toda la mañana Jimin organizó algunos papeles y llamó algunos de sus socios de otros paises para acordar acerca de como elaborarían la nueva colección de ropa que presentarían. Una vez que terminó su última llamada, salió de su oficina, caminando hacia la cafetería, llevaría comida ya preparada para Tae y él.

Al llegar a la cafetería habían muchas personas, era hora del almuerzo y todos los trabajadores de la empresa venían a alimentarse, evitando chocarse con las otras personas llegó hacia la recepción, donde pidió pasta, pollo y verduras sancochadas, comida salúdale para su hermanito y su sobrinito, mientras su pedido era procesado decidió tomar asiento y esperar, mientras miraba su celular.

—¡Ey! Jimin!— Yoongi se acercó.

—Hola— habló desinteresado, viendo a Momo detrás del alfa.

—Iremos almorzar ¿te unes? — invitó.

—Pero señor Min, pensé que iríamos a comer solo nosotros dos— interrumpió, mirando con desagradó al omega.

Jimin miró a la chica que mantenía su mano en el hombro de Yoongi, su lobo quiso lanzar un gruñido amenazante ante la omega. —Gracias, pero comeré junto a Taehyung, además no quiero molestar a tu acompañante, espero que disfruten su almuerzo— fingió una sonrisa.

—Jimin, aquí está tu pedido— se acercó un chico de baja estatura con la bolsa de comida en sus manos.

—Gracias— recibió su pedido —Bueno debo irme, hasta luego— miró a Yoongi y salió lo más rápido posible. Regañándose mentalmente por sentir celos por la secretaria.

°°°° Bebé °°°°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora