°°°° Bebé °°°°

Capítulo 30

—Jimin, necesitamos entrar ya— pidió Taehyung, mirando de un lado a otro, solo ellos quedaban en la sala de espera.

Hoy, Jimin, tenía cita con la ginecóloga, a la cual acudieron, pero Jimin se negaba entrar al consultorio sin Yoongi.

—No entraré hasta que Yoongi llegue— habló, reacio a levantarse de esa silla —Quiero que también esté presente cuando me digan el sexo de nuestro bebé.

—Lo estará, Liam fue por él.

Taehyung, no mentía al decirle a su hermano que Liam fue por Yoongi, qué fue la única opción ya qué el alfa peliplateado no les contestaba los mensajes ni llamadas. Hace un mes que no sabían nada de él, ocasionando qué Jimin también se deprima mucho más.

—Entonces, esperemos un poco más.

—De acuerdo— tomó asiento para no cansarse, ya tenía siete meses de embarazo y estar mucho tiempo de pie le cansaba.

—Jimin ¿Y si Yoongi no quiere venir? — preguntó Taehyung, pues Yoongi no había dado señales de querer ver a Jimin.

—Tiene que venir, Taehyung. Él debe de venir y conocer qué será nuestro bebé— se negaba a imaginar que Yoongi no quiera saber nada de su hijo o hija.

—Entonces esperemos...

Una hora después, los omegas alzaron sus miradas, al ver a Liam ingresar por la recepción.

Jimin, rápidamente dirigió su mirada en dirección hacia Liam, ansiando ver al alfa de tez blanca.

—Jimin... No encontré a Yoongi.

—¿Cómo que no lo encontraste?

—No está en la oficina ni en su casa. Tal vez se fue de viaje— tomó asiento al lado del omega mayor.

Jimin, negó varias veces, Yoongi no pudo irse y dejarlo solo, no es que él no podía solo, pero anhelada que su hijo conozca a su padre y que el alfa esté en todo el proceso de su embarazo y crecimiento del pequeño.

—Mimi, tal vez está en algún lugar tomándose su tiempo, todos sabemos que a él le dolió mucho la pérdida del bebé, hasta se culpaba. Por favor vamos con la doctora.

—Es un maldito tonto— dijo, poniéndose de pie, para empezar a caminar hacia la salida.

—Jimin, espera, ten cuidado— habló Taehyung, tratando de ir lo más rápido para alcanzar a su hermano.

—Taehyung quédate aquí, yo iré por él— dijo Liam —Llamaré a Jungkook.

—No es necesario, yo lo llamaré, ve con Mimi.

—Ten cuidado y espera aquí a Jungkook, al parecer habrá una tormenta.

El omega de cabellos castaños asintió, posando sobre el marco de la puerta de salida, viendo a su hermano subir a un taxi y en otro Liam.

En el taxi, Jimin sollozaba bajito, con sus manos secando sus mejillas ante las lágrimas que recorrían por su rostro.

Unos minutos más tarde, Jimin pudo ver ese edificio que había visto antes, rápidamente pago al taxi e ingresó al interior de este. Subió el ascensor hasta llegar al pasillo donde cierto alfa vivía.

—¡Yoongi! ¡Abre la puerta! — gritó, tocando fuertemente la puerta —¡No me moveré de aquí hasta que abras!

—Jimin— llamó Liam, acercándose al omega, totalmente cansado —Cálmate, estar alterado afectará al bebé.

—Él debe salir y dar la cara— susurró, posando su cabeza en el pecho de alfa.

—Prometo buscarlo y no pararé hasta encontrarlo y llevarlo contigo, pero vamos a casa— abrazó el cálido cuerpo, podía ver que el omega no estaba bien; su piel era más pálida de lo normal y se notaba cansado.