Del Mar a la Luz

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Harry llegó a San Francisco y buscó un empleo Muggle. En Rumania, había estado de lleno en el mundo mágico. Se hizo más fuerte físicamente y ya se sentía de nuevo en forma. Su autoestima había mejorado. Su físico había cambiado para mejor. Su salud era de roble. Se había ganado un par de cicatrices de quemaduras pero no muy notorias. Ahora, Harry quería experimentar lo que era vivir como un Muggle en una ciudad hermosa, soleada y grande, siendo un tipo cualquiera. Tal vez en San Francisco, Harry descubriera lo que sería su futuro, mientras tanto, quería conocer, broncearse y pasarla bien.

En Rumania, Harry había trabajado duro de día y había tenido noches cálidas, llenas de caricias, suspiros y pasión; en San Francisco, Harry descubrió lo que era divertirse como jamás lo había hecho en su vida.

En su trabajo como mesero, conoció una joven que le invitó a surfear. A Harry le fascinó desde que la conoció. Por alguna razón, le recordaba un poco a Pansy Parkinson, su cabello era negro pero lo usaba corto, casi de forma masculina, sus ojos eran verdes y grandes, aunque más claros que los suyos, su rostro estaba muy bronceado y tenía pecas en las mejillas y sobre la nariz, hablaba mucho aparentemente, pero no con todos, era muy guapa, su cuerpo era fuerte y bien moldeado, era evidente que todo los chicos que la conocían se sentían bastante atraídos por ella, pero por alguna razón, ella le sacaba el cuerpo a todos, y luego de un par de semanas trabajando en el mismo restaurante en una zona muy turística de la ciudad, Harry se había ganado su confianza siendo él mismo.

No coqueteaba descaradamente con ella, al contrario, se mostraba un poco tímido – sin fingir serlo, él no era muy lanzado con su trato con la gente – era amable y caballeroso, y aparentemente, en el mundo de Rachel Flanagan eso era una novedad.

Pronto Harry descubrió que él no era el único hombre en la vida de Rachel, pero si él único que ella se llevaba a su cama.

Rachel, era parte de un grupo de surfistas. Ella era la única chica. Todos sus amigos la trataban con respeto. En cierta forma, era como si ella fuera un chico más. Le daban empujones, le exigían el mismo rendimiento que ellos sobre la tabla, y se burlaban sin compasión cuando una ola la revolcaba. Pero Rachel era dura. Una experta surfista. Ella y Kyle, un rubio surfista muy sonriente que al parecer era una especie de líder en el grupo y al cual Harry por lo visto le había caído bien, se dedicaron a enseñarle a surfear e insistieron hasta que torpemente Harry logró mantenerse de pie sobre la tabla en las olas.

Harry compró la tabla que ellos le recomendaron para su peso y estatura, no la más cara, la apropiada para él. Y pronto, luego de muchas caídas, de tragar agua salada y de varias insolaciones que curtieron su piel, Harry Potter se sintió como un pez en el mar.

Todos sus amigos eran Muggles. A veces se reían de la ignorancia de Harry en cosas tan sencillas como los celulares o los video juegos, pero Harry decía que había recibido una educación en un internado estricto del cual prácticamente había escapado, donde no podía usar nada moderno y lo machacaban con aburridos estudios, todos se mostraron horrorizados y compadecidos de sus padecimientos e insistían en enseñarle todo lo que podían del mundo moderno.

"Bro...", dijo Kyle, "Qué bueno que te liberaste... el mar te limpiará tanta mala vibra. Sé libre, Harry Evans, disfruta la libertad que solo dan el viento y el mar", y Harry de verdad se sintió libre por primera vez en su vida.

A veces dormían en la playa para remontar las olas inmensas del amanecer. Él y Rachel en el mismo saco de dormir. Tenían sexo no siempre los suficientemente callados mientras otros soltaban risitas cerca, pero no eran los únicos así que a nadie le molestaba. Kyle tenía a Lirio, una joven mexicana hermosa como una escultura hecha en madera, fuerte y agraciada, de largos cabellos negros. Y entre los chicos, algunos tenían parejas fijas y otros ocasionales. Rara vez alguien dormía solo bajo las estrellas.

Perdido y Encontrado en ParísDonde viven las historias. Descúbrelo ahora