Un Demonio Peculiar

XXV

La presencia del Demonio de la Oscuridad había dejado tocado a todos los estuvieron dentro del Infierno. Los demonios conocidos como "Primordiales", generaban una sensación de terror que permanecía dentro de las personas o demonios que los vieran, quedando en lo más intrínseco del subconsciente de dicha persona, como un miedo latente que siempre lo acompañaría y despertaría en las situaciones más improvistas. Este miedo, por ejemplo, había sido personificado por Power, no queriendo quedarse sola, sintiéndose observada constantemente, encontrando el terror en cualquier lugar sin la luz apropiada, siendo una niña en el cuerpo de una mujer.

Este comportamiento podría verse infantil, producto de algún miedo o trauma arrastrado desde la niñez. Esa sería una visión humana del problema que los demonios estaban arrastrando. Pero ¿cuál era la visión de un demonio a dicho problema? El Demonio de la Oscuridad era poderoso, inevitable. Y cuanto más poderoso era un demonio, más era el miedo que podía propagar en sus congéneres, inundándolos del terror que solo humanos podían sentir, doblegándolos a su voluntad simplemente con su presencia.

Poder.

Los demonios crecían, se fortalecían y creaban su propio dominio. Pero no podían competir con los demonios que llegaron antes que ellos, que existieron desde la creación desde el mismo mundo, de la raza humana, aquellos conocidos como los "Primigenios", los que estuvieron antes de la raza humana y sus miedos.

Como en la jungla, los más poderosos estaban arriba en la cadena alimenticia. El Demonio de la Oscuridad, el Demonio del Miedo, el Demonio de la Muerte...solo eran algunos de los demonios que fueron creados en los primeros tiempos de la raza humana, aquellos que fueron antes de los demonios que tomaban forma híbrida.

Naruto comprendía el miedo de Power, el terror que la estaba inundando dentro de su cuerpo llegando hasta su mente, instalándose como un parasito.

―Estas muy callado.

El humo se alzó desde el cigarrillo entre los labios del Uzumaki hacia el techo de la habitación, generando una cortina densa de color gris claro que se expandió hasta salir por la única ventana abierta.

―Solo pensaba.

―¿En esa chica rubia? ¿Power se llamaba?

Los labios se contrajeron y la otra persona dedujo que había acertado al mencionar al híbrido con el que el cazador estaba trabajando.

―La experiencia con el Demonio de la Oscuridad ha dejado a más de uno en un estado muy lastimado...mentalmente hablando, por supuesto―las cenizas cayeron al recipiente. Naruto colocó nuevamente el cigarrillo entre sus labios―. Makima hubiera actuado si yo no lo hubiera hecho. Y, sinceramente, quité algo de peso de los hombros de esa mujer. Sin embargo, creo que ya comprendo muchas cosas.

―¿Qué cosas?

―El Demonio Pistola no está vivo, no esta en un cuerpo humano y no esta formando un ejército. Makima es una perra manipuladora, si te soy sincero, y esto me ha molestado demasiado tiempo. Ella realmente va a doblegar al idiota amante de los pechos.

Makima era el Demonio del Control y fue formado desde su aparición por el gobierno japones. El mismo gobierno, dándole el control de la División 4, había colocado una soga en su propio cuello.

―¿No vas a ayudar a Denji con la mujer rusa?

―Eso pasó. El chico se enamoró fuera del control de Makima y la Demonio Bomba sigue viva―ojos azules brillaron intensamente. Antes del Demonio de la Oscuridad, antes de la muerte de Beam y algunos heridos psicológicamente, Deji había estado con Reze, la espía de la Unión Soviética que se introdujo en la vida del adolescente para controlarlo―. Ella es un activo muy valioso para perderlo, sinceramente. No voy a desperdiciarlo sobre el tablero ni voy a dejar que Makima siga jugando su juego maquiavélico.

―¡Ah! ¿Así que crees que todo se está moviendo?

―¿No lo notas en el ambiente? Personas anteriormente opuestas a la División 4, se han posicionado como un fuerte respaldo. Los enemigos de la perra, ahora yacen muertos sobre sus asientos, sin una cabeza sobre los hombros, convertida solamente en un amasijo de huesos y sangre.

No hubo amor en ninguno de los escarceos amorosos entre Makima y Naruto. Fue solamente necesidad biológica entre ambos, deseo carnal entre un hombre y una mujer y que los dos necesitaban apaciguar usando sus cuerpos. Después de dos mil años viviendo, los sentimientos eran secundarios en el corazón de Naruto y no podían empujar sus acciones más de lo que hacían.

―Ha si que has estado investigando por tu cuenta, ¿uh? Eres demasiado concienzudo cuando quieres serlo y demasiado molesto cuando realmente haces tu trabajo.

Las palabras fueron respondidas con un encogimiento de hombros. Fue contratado para aquello y no fue dinero lo que recibió. Enormes ingentes cantidades de reamen, preferiblemente de Ichiraku, eran entregadas n su hogar a final y principios de mes, teniendo un doble pago. Dinero ya tenía después de más de dos mil años viviendo en la Tierra y no podía recibir fortunas cuando ya las poseía. La mejor forma de que alguien lo contratara era dándole comida.

―Tengo la motivación para trabajar―el cigarrillo cayó al suelo sin hacer ruido y el pie lo aplastó, apagándolo en el acto―. Ahora que lo pienso, ¿por qué exactamente has venido a verme Quanxi? Sé que te patee el trasero, pero tú eres más cercana al viejo Kishibe.

Quanxi soltó un bufido que fue acompañado de una enorme cantidad de humo procedente de su boca. La mujer china de un solo ojo, miró al cazador milenario por varios segundos, analizando su joven rostro, comprobando su lenguaje corporal en aquellos instantes.

―Todas mis amantes han muerto, chico. No tengo una intención de seguir peleando por el Motosierra y no puedo volver a China con las manos vacías. Puedo terminar muerta, ya lo sabes. Y mi mejor carta es permanecer junto al más fuerte.

―Y ese soy yo, ¿no?

―Quiero entrar dentro de tu círculo. No soy idiota, muchacho. Los movimientos de la "División 0" no han sido lo suficientemente silenciosos como para no verlos. Eso o...

―Eres perceptiva―los labios del cazador se movieron mostrando los afilados dientes―. He dejado que vieras los movimientos, porque te quiero en el equipo Quanxi. Si aceptas―la carne fue cortada y la sangre goteó hacia el suelo―; solo bebe mi sangre. Veremos lo que pasa después, querida.