Epílogo

78 10 13
                                    

—Odio el ruido, no sé cómo los humanos soportan el desastre que provocan los autos— Jean, la aprendiz de Kurt, hacía mucho que había dejado atrás su adolescencia y ahora podía comportarse como si fuera la hermana de Erik y no su hija.

—Decías lo mismo de los caballos y los trenes, al final, ambos terminaron por ser tu fascinación— aseguró Erik observando la pintura que había logrado recuperar en una subasta— Podrías no salir y quedarte en este lugar como yo.

—¿Y soportar todo el ruido que hace tu antro? No gracias, valoro mis oídos— Jean observó por encima del hombro de Erik— Tenía mucho que no veía esa pintura.

—Cuando huimos tomé todo lo que pude, pero no logré pasar al templo donde descansa Charles. Creí que la habían destrozado, pero al parecer tu hechizo de protección sobre la tumba funcionó.

—Lucen como una familia.

—Siempre fuimos el uno para el otro— la pintura de Charles a su lado con los niños sería uno de los objetos de los cuales nunca querría separarse— Si él estuviera aquí, en esta época, no tendríamos miedo de amarnos, lo sé.

—Sobre eso...— la mujer se removió inquieta en su lugar, acomodando su suéter color beige solo para hacer un poco de tiempo extra— Mis guías han hablado conmigo y dicen que ya han nacido. Charles y Kurt ya están en este mundo. Seguramente Azazel y Raven también llegaron.

—¿Te dijeron dónde nacieron? Tenemos que ir a buscarlos ahora mismo, vamos, tomas tus cosas y...

—No, no me dijeron dónde, además, son solo unos bebés, vas a asustar a sus padres con esa actitud. Tienes que tener paciencia, hemos esperado siglos por ellos, sé que podemos soportar unos años más.

Erik evitó soltar un grito de frustración ante la respuesta de Jean.

—Mientras, podemos seguir buscando a Ayla. Puedo sentir su magia, es débil porque debe estar lejos de nosotros, pero si nos movemos, podemos dar con ella y deshacernos por fin de tu maldición.

—¿Y si perdemos a Charles y Kurt?

—Nunca dije que estuvieran en este país, solo dije que ya han nacido. Gracias a Dios— Erik evitó hacer comentario alguno sobre la mención de este ser superior.

—Tendré que guardar de nuevo la pintura— Jean sonrió al notar encima del escritorio dos collares, ambos en forma de flores, solo que uno era un loto y otro un cerezo— ¿Puedes guardar eso?

—Creí que Nina y David tenían esto.

—Mi nieta Svetlana me los dió cuando mi hija murió— Erik sonrió ante el recuerdo— Ella se parecía tanto a Nina.

—Kurt dijo que todos nos íbamos a reencontrar.

—Realmente espero que sus palabras sean verdad. Pero no es momento de llorar, ahora solo quiero encontrar a Alya para no preocuparme de nada más que amar a Charles y esperar reencontrarme con mi hija.

—Él podría tener otro rostro, otra voz, incluso puede ser mujer ¿Lo amarás aún con todo y eso?

—Yo me enamoré de Charles por quién era, no por como lucía, y aunque su cuerpo era precioso, sé que voy a adorar su nueva apariencia.

Los ojos de Jean brillaron con ilusión—Vas a tener que enamorarlo, vas a iniciar de cero porque él no recuerda nada.

—Me alegra saber que voy a poder corregir mi pésimo cortejo.

—Entonces, es hora de irnos, pediré boletos de avión a un país al azar, así que ve preparado— Jean sonrió tomando su bolso— Voy a enviar a alguien para que se lleve la pintura, guárdala bien.

Erik con mucho cuidado tomó ambos collares entre sus manos, besando el que había pertenecido a su amado rey.

—Espera solo un poco más Charles, ya voy por ti.

- - -

Quiero agradecerles a todos ustedes por haber acompañado esta historia que pertenece a una de las shipps a la cual le tengo mucho cariño, no importa si fueron muchos o pocos los que decidieron entrar a darle un vistazo, les agradezco sus comentarios, sus votos, todo. Gracias por dejarme entrar en sus vidas aunque fuera un poco y espero que sus problemas se les hayan olvidado aunque fuera por unos instantes.

Si quieren saber un poco más acerca de su autora pueden seguirme en instragram, dónde me encuentro como @famousvilla, suelo subir contenido de mis historias pero también de mi día a día como universitaria estresada c:

Los quiero mucho 

Nos leemos en otra historia 

Con amor

Le Mexicain 

La sombra del corazón | CherikDonde viven las historias. Descúbrelo ahora